1539, inicios
«¿Un corazón se puede destrozar?
¿Un corazón puede ser quemado y renacer como el fénix?
¿Quién es el desdichado a amar con locura inmensa?
¿Quién es el infeliz que necesita una razón para amar?
Corazones desdichados amar por la eternidad, sentimientos ocultos que no se pueden mostrar. Mi corazón arde en llamas y he tomado una decisión.
El hombre al que amo, no me ama.
El olvido no llega y solo hay una sola sensación, desamor.
Un amargo trago, un amargo sentimiento«
— Mihrimah se fuerte — escuché la voz de mi valeroso hermano Mehmed.
Oh por Allah, solo pensar en mi familia me traía oscuros recuerdos. Oscuros porque los ame con el alma, y los perdí en un cruel momento, en una cruel e injusta enfermedad.
A veces solo quisiera dejar de pensar en todo lo malo que me ha pasado. Solo necesito que alguien me abrace y me diga que todo estará bien.
— ¿Majestad? — escuché una voz a los lejos.
Mis ojos se cerraron, mi corazón dejó de latir en un suspiro. Los angeles y los mártires estaban a mi alrededor, el cruel sonido de Azrael seguía mis pasos. Perdí la noción del tiempo y de la vida.
— Por Allah, que sucede — escuché la voz de Malik Agha cada vez más lejos.
«Lo vi, mi padre estaba a lo lejos con una sonrisa. Cihangir mi pequeño hermano ya no traía su joroba y reía al compás del sonido de las aves. Mis hermanos Mehmed, Selim y Bayezid luchaban con espadas y yo estaba enfrente, luchaba contra otros hombres y ellos me protegían del enemigo. Mi voz era solo un murmullo y después un gran trueno.
Entonces solo estaba yo, y detrás de mi los familiares que perdí por la viruela como angeles luchando contra el infiel«— El enemigos esta por atacar, se fuerte — dijo mi padre con una voz fuerte y determinante — Tú eres la sultán del imperio y del mundo. Debes escoger a un fiel compañero como lo hice yo con tu madre, ese compañero debe luchar contigo.
— Malkoçoğlu no me ama padre — dije con tristeza.
El sultán sonrió y me abrazo fuerte.
— Él no sabe lo que tiene enfrente. Tú eres la mujer más hermosa que existe, claro después de tu madre no queremos que se enoje — dijo mi padre Süleyman — Jurame algo.
Asentí.
— Vas a proteger el imperio y encontrarás al infiel que está entre nosotros.
— ¿Hay un enemigo padre?
— Lo hay hija, pero te protegeremos de ese infiel que osa atacar nuestro imperio.
«Sentí la mano de alguien en mi pierna. Luego abrí los ojos y alrededor de mi estaban todos los que hasta el día de hoy se habían encargado de cuidarme y protegerme«
— Su Majestad la Sultán se encuentra cansada, eso es todo — escuché decir al médico jefe.
Sonreí, mi madre la Valide Sultan lo hizo.
— ¿Te sientes mejor mi hermosa hija? — inquirió.
Su amor era lo que me hacía fuerte.
— Vi a mi padre el difunto sultan, me protege madre. Y dice que te ama, que eres lo más importante para él y que siempre está al pendiente de ti — dije con una sonrisa.
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Mihrimah, La Sultan
Historical FictionHija del difunto Süleyman l y de su esposa imperial Hürrem Sultan. Mihrimah Sultan presencia la muerte de todos sus hermanos, primos y parientes hombres por la viruela. No hay quien herede el trono o eso creía, cuando es obligada a casarse para acce...