Capítulo 33

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"¿Qué haces aquí? "La gruesa y dulce voz de su alfa le sorprendió en medio de aquel momento "Deberías estar en la cama, príncipe, el clima es fresco estos días, podrías enfermarte o a nuestro..." se calló un poco cuando volteó a su alrededor y se percató que no estaban en la intimidad de su habitación "bebé" susurró por lo bajo.

Los ojos del pelinegro se volvieron pequeños cuando sonrió ante la preocupación del príncipe heredero. Lo observó desde abajo recostado en una silla de mecer y cubierto de varias mantas para contrarrestar el frío "No tiene que preocuparse, su alteza, necesitaba tomar un poco del sol" explicó haciendo que el mayor se sentara a su lado.

"Insisto en que deberías descansar en la cama y no aquí" replicó.

El menor sonrió nuevamente y esta vez puso sus manos, que habían estado sobre su vientre cubierto por las mantas, sobre las mejillas del mayor causándole un leve sonrojo "El bebé y yo necesitamos sol, deje de preocuparse" apretó levemente haciendo que el otro se mantuviera embelesado "Hoy está muy atractivo, ese traje le queda bien" dijo con picardía y el alfa carraspeó avergonzado.

"Quiero besarte" confesó de pronto sorprendiendo al omega "No puedo tener suficiente de ti" esta vez tomó las manos de su pequeño esposo y las apretó despacio con las suyas.

"Eso sería romper el protocolo, príncipe" dijo riendo el menor.

El castaño gruño ante la objeción impuesta "Que se joda el protocolo" dijo muy cerca del rostro del menor "Si quiero besarte, lo voy a hacer" advirtió sobre sus labios y procedió a unirlos en un suave y delicado beso que fue correspondido por el príncipe Jeon.

Le supo a ternura, a pasión y a algo más que no logró descifrar. Aún cuando el castaño se inclinó tanto sobre el menor que casi terminaba por recostarse encima si no fue porque la mecedora llegó tan atrás que Jungkook se sobresaltó y lo separó con rapidez de sus labios soltando una leve carcajada "Hará que me caiga" dijo riendo al tiempo que saboreaba la saliva que había dejado el príncipe Kim sobre sus labios.

"Perdona, no sé qué me sucede" explicó el más alto recomponiéndose en su lugar y ayudando al menor a cubrirse con las mantas.

"Al menos hizo que mi temperatura subiera unos cuantos grados" soltó con evidente doble sentido.

"Me estás matando" le respondió al otro todavía riendo.

Kim Taehyung sentía una verdadera tortura el hecho de tener a su esposo tan dispuesto a saborearlo, a probarlo a complacerlo y sin poder hacer absolutamente nada, puesto que tenía que ser cuidadoso con su cachorro. No le tocaba mas que conformarse con besos dulces y apasionados de vez en cuando y aún con eso, no le era suficiente.

Nunca obtendría suficiente de él, había llegado a esa conclusión.

"¿Qué hay en esa bolsa detrás de usted?" el menor preguntó señalando la bolsa de regalo color blanca detrás que estaba colocada descuidadamente detrás del alfa.

"¡Oh!" Exclamó el otro "Lo había olvidado ya" dijo riendo y volteándose para traer la bolsa consigo.

"Claro que la olvidaría si se ocupó en comerme la boca" Jungkook le reprendió juguetonamente.

"Y lo haría de nuevo" insinuó "Pero traje esto para ti" le tendió la bolsa de regalo suavemente.

El príncipe Jeon la tomó y hurgó dentro de ella retirando el papel decorativo para poder sacar el contenido. "Bueno... no es precisamente para ti, o tal vez sí, no lo sé, yo solo los vi y pensé que..." explicó nervioso al observar que el menor comenzaba a retirar el papel.

El omega sonrió tranquilizadoramente "No tiene que explicarme, alteza, siempre me hace feliz con sus regalos" dijo haciendo que el otro se mantuviera en un silencio reconfortante.

Un esposo para el príncipeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora