Capítulo 12 -Parte 2

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Narra Scarlett

-¡Ya estoy aquí! – oigo decir a mi hermano.

Mierda.

-Joder Nate vístete y vete – digo cogiendo toda la ropa y tirándola fuera al jardín.

-¡Pero qué haces que estoy en pelotas! – susurra – me va a ver todo el vecindario

-¡Me da igual joder pírate ya! – digo poniéndome las bragas y los pantalones, al ver que no da ni un paso lo empujo fuera al jardín y cierro la puerta de la cocina.

Me pongo la camiseta y me giro viendo a Nate poniéndose los calzoncillos en mitad de mi jardín y no tardo en empezar a partirme de risa, ojalá pudiera grabarlo.

-¿De qué te ríes? – pregunta mi hermano entrando en la cocina

-¿Eh? Nada, nada – digo cerrando la cortina y sonriéndole. Estoy segura de que está pensando que me he vuelto loca.

-Vale... - dice un poco desconcertado – por cierto prepárate. Nos vamos todos.

-¿Todos? Quien son todos y donde vamos – digo un poco perdida.

-Hemos pensado de ir a hacer paracaidismo. Los Jacks, Nate, Becca, Kaitlyn, Faith, tú y yo.

-¿Paracaidismo? – digo – Estáis locos.

-Puede, pero tú te vienes.

Como no tengo otra opción y en el fondo sé que va a ser divertido acepto. Subo a mi habitación y me visto. Cuando bajo ya están todos en la sala esperándome y miro a Nate que me guiña un ojo, entonces me acerco a él.

-No tengas miedo nena, estoy aquí para protegerte – dice rodeándome la cintura.

-Lo que tú digas – digo rodando los ojos.

Subimos todas a la camioneta del padre de Gilinsky que, aunque estemos muy apretados, entramos. Gilinsky se pone al volante con Johnson de copiloto, después van Becca, Kait y Sam detrás y por último Nate, Faith y yo detrás como bollos en el horno.

-El viaje es bastante largo, así que poneos cómodos – nos dice Gilinsky

-¿Es una broma no? – digo ya que estoy apretujada entre Nate i Faith – Mierda de furgoneta – susurro.

-Nate bájale los humos a tu chica – dice Gilinsky

-Eso está echo hermano – dice Nate con una sonrisa de satisfacción que ahora mismo me encantaría quitarle de un guantazo.

-No soy tu chica – le digo flojo para que me oigan los otros.

-Lo que tú digas – dice imitándome

-Imbécil – remugo

-Vale chicos por si no os acordáis estoy aquí  - dice Faith – y si no os calláis os voy a meter el pie en la boca a cada uno.

-Gilinsky calma a tu chica – digo riéndome y Faith me da un codazo en las costillas .

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-Scarlett despierta – oigo una voz lejana.

-Cinco minutos más mamá – digo o creo que lo he dicho.

-¿Mamá? ¿Tu madre te hace esto? – dice ahora claramente Nate metiendo la mano por mis pantalones y bragas.

Doy un respingo y le quito la mano de ahí.

-¿Pero tu estas tonto o qué? – digo pegándole en el brazo mientras se parte de risa el solito.

Salgo del coche y me reúno con todos en una explanada. Estamos en medio de un montón de montañas a bastante altura y hace mucho viento. Entramos a lo que llega ser el recinto y nos llevan a una sala dónde nos explican todo lo que hemos de hacer bla bla bla, un muermo vamos. La decepción llega cuando solo nos podemos tirar con alguien que tenga el título de paracaidismo, así que nos asignan a una persona a cada uno.

Me asignan a un chico de unos treinta años y se acerca a mí con las mochilas y  los arneses.

-Hola encantado, soy Scott ¿Cómo te llamas? – pregunta el chico

-Me llamo Scarlett, encantada – le sonrío con amabilidad.

Vamos todo a otra sala y cada uno se empieza a abrochar los cinturones y todo lo que hace falta con ayuda de, en mi caso, Scott.

Veo como Nate me mira fijamente mientras Scott me sube un cinturón entre las dos piernas. Le guiño el ojo al ver su ataque de celos, después miro al tío que le ayuda e intento no partirme de risa cuando veo que le saca como medio metro de alto y de ancho a Nate.

Cuando estamos sobrevolando las montañas en la avioneta tengo el corazón a mil y lo único que pienso es que me voy a morir.

-Relájate esto es muy seguro – dice Scott para que me tranquilice.

El piloto hace unas señas y abren las puertas haciendo que todo el viento me pegue en la cara y empiece a maldecir. Scott nos ata los cinturones para que estemos juntos y no me vaya hacia una a muerte segura y nos preparamos al borde de la puerta para saltar.

-¿Preparada? – Grita Scott por encima del viento

-¡Sí! – grito con el corazón en la boca.

 Nos tira y paro de respirar un momento por el viento. Enseguida vuelvo a coger aire y me permito observar las vistas mientras caemos en picado. Empiezo a gritar y a reírme como una loca y siento s Scott reírse también, esto es impresionante.

Cuando abre el paracaídas disminuye la velocidad y ahora parece que estemos volando sobre las montañas que al instante me quedo embobada.

-¿Qué te ha parecido? – dice Scott cuando aterrizamos

-¡Una pasada! – grito y me empiezo a reír otra vez.

Poco a poco van aterrizando todos mis amigos y nos vamos juntando todos.

-¿Te ha gustado? – pregunta Nate cuando me acerco a él.

-Nunca me había sentido más viva

-¿Nunca? – pregunta y yo niego con la cabeza – Bueno, haré que cambies de idea – sonríe maliciosamente.

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Wooooooo estoy de vuelta. Me pasaba para deciros a las fans de Cameron y Nash que estoy haciendo una novela sobre ellos. Ya está en mi perfil, leeros la sinopsis y esta semana subiré el primer capítulo. Pues eso que ily babes:*


Under the sheets (Nate Maloley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora