No Me Olvides Esta Vez «WooSan»

Capítulo 12

Esta vez fueron a un hotel, el más hermoso de la ciudad donde se encontraban, ya que justo al frente estaba el mar. Las olas se escuchaban y la luna iluminaba estas por lo brillante que estaba.

_¿Valió la pena el precio?_ Preguntó Wooyoung quien en un principio se negaba a que San pagará algo tan caro.

_Valió cada centavo_ Respondió San mirando por la ventana. _Ahora vamos a dormir de una vez_ Dijo sorprendiendo a Wooyoung quien miraba atento las olas, lo levantó y llevó directo a la cama para hacerle cosquillas sin parar.

_¡Espera!, Me duele la panza de tanto reír ya basta_ Rió Wooyoung retorciéndose debajo de los brazos de San.

_Esta bien_ Dijo también cansado.

Se levantó de la cama y fue al baño para asearse un poco y tomar sus supresores antes de ir a la cama. Él en cualquier momento podía entrar en celo y sabía muy bien que debía tomar los más fuertes si quería dormir con Wooyoung.

_Listo es tu turno_ Sonriente salió del baño y fue a la cama mirando a Wooyoung pasar por su lado para ir al baño y hacer sus cosas.

Salió a los minutos limpió y cambiado, en su mochila había llevado un pijama, desde un principio había planeado dormir con San así que lo había guardado y así estar más cómodo.

_Por tu culpa no tengo sueño, me hiciste reír mucho_ Dijo apenas salió y se tiró sobre San.

_Entonces no duermas_ Sonrió envolviendo la cintura de Wooyoung con sus brazos.

_Este lugar es caro, si no duermo me siento culpable_

_Wooyoung, somos los únicos raros que van a un hotel así solo para dormir_

_Los extranjeros si duermen en hoteles_ Contestó.

_Exacto, nosotros no lo somos. ¿Vemos una película hasta que tengas sueño?_ Preguntó y el omega aceptó.

•••

La película ya había terminado, eran las 3 am y Wooyoung seguía despierto y sin una pizca de sueño. Mientras que San estaba durmiendo, apenas empezó la película él había cerrado sus ojos y sin darse cuenta se durmió durante toda la película.

_El final no estuvo tan bueno_ Comentó Wooyoung quien tenía su cabeza sobre el pecho de San usándolo de almohada.

No obtuvo respuesta así que levantó la mirada y vio a San en un sueño profundo.

_Que suerte que no roncas_ Dijo mirándolo por un rato con una sonrisa en sus labios.

Volvió a recostarse en su pecho está vez mirando en dirección a San para solo poder observarlo dormir.

_En serio quiero que seas mi alfa San_ Fueron las palabras que salieron por fin de su boca. Era algo que todavía no se animaba a decirle pero ya estaba seguro de su decisión. Solo le bastaron un par de hermosos meses para estar completamente seguro de ello.

Besó sus labios como acostumbraba hacer y se acomodó para dormir de una vez con los brazos de San rodeando su cintura, mientras él abrazaba una almohada.

_Descansa Sannie_ Pronunció antes de quedarse dormido por fin.

Ambos durmieron plácidamente en la enorme y cómoda cama de hotel, o por lo menos unas cuantas horas ya que Wooyoung comenzó a inquietarse y volvió a sentir calor en todo el cuerpo y en dormido sus feromonas comenzaron a esparcirse por toda la habitación.
Despertó de golpe a sentir un fuerte espasmo por todo su cuerpo provocándole escalofríos.

_Oh no..._ Dijo mirando a San quien seguía durmiendo por suerte.

Se levantó rápidamente y buscó en su mochila las preciadas pastillas. Pero no las encontró por ningún lado.

_Oh Dios... San!_ Llamó al mayor y este despertó de inmediato buscando a Wooyoung con la mirada.

_¿Qué sucedió?_ Dijo sentándose en la cama mirando a Wooyoung desesperandose.

_San, no traje los supresores, ¡¡No los traje!!_ Gritó acercándose y sacudiendolo de un lado a otro.

_Wooyoung, son las cuatro de la madrugada, tendré que ir a la ciudad para encontrar una farmacia abierta_ Dijo en un bostezo.

_No quiero que salgas entonces... Pide en recepción tal vez tengan_ Mencionó luego de pensarlo.

Y San lo miró buscando las palabras para decirle que en los hoteles lo menos que podía encontrar eran supresores.

_¿Dónde están las llaves del auto?_ Preguntó estirándose para quitarse la pereza que aún tenía y al pasar cerca de Wooyoung sintió sus feromonas.

Fue cuando al fin cayó en cuenta de lo que pasaba, se tapó la nariz y buscó sus propios supresores, apenas sintió lo dulce de Wooyoung sus propias feromonas salieron sin previo aviso.

_San~ no te vayas_ Dijo el Omega alargando sus palabras. Ya había sentido a San y esperaba el momento indicado para lanzarse sobre él.

_Tengo que ir, volveré rápido_ Habló de una manera extraña debido a que aún tapaba su nariz.

Cuando por fin encontró sus pastillas tomó una pasándola con agua y esperó sentado, eran fuertes así que en segundos su lobo entraría en razón.

_¿Y si atraigo a un alfa, lo dejo entrar y me toma justo cuando no estás?_ Dijo Wooyoung sonrojado.

De solo pensarlo le hirvió la sangre y ahora no pensaba salir de esa habitación. Solo debía mantener a Wooyoung quieto hasta el amanecer, no se preocupaba por él ya que tenía una buena dosis de supresores.

_San, quiero que seas mi alfa_ Comenzó a balbucear Wooyoung mientras se acercaba a San y en un segundo estaba sentado sobre sus piernas.

Si escuchaba esas palabras un día antes no iba a dudarlo pero estando con su celo no quería siquiera tocarlo.

_Eso dímelo el día que no estés en celo Woo_ Contestó dulce al omega.

_¡No!, ¡Estoy hablando en serio!_ Protestó golpeando el pecho del alfa.

Tomó sus manos para que se detuviera y rió por el comportamiento que Wooyoung estaba teniendo.

_¿Puedo besarte?_ Preguntó de repente y San asintió, ya lo habían hecho. Siempre se daban pequeños besos al despedirse y no veía mal solo darle un beso.

_Solo uno, ¿Está bien?_

_Pero uno largo, no solo chocar los labios, quiero más que eso_

San rió nuevamente y asintió, si así Wooyoung se relajaba aunque sea un poco estaba bien. No podía dejar salir sus feromonas, los supresores ayudaban así que el omega no se pondría peor de lo que estaba.

_Solo uno..._