Capítulo 27

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La sala estaba en completo silencio, incluso el insecto más pequeño podía pasar volando y se escucharía por toda la casa.
San y Wooyoung estaban sentados en el sofá con la mirada de Jiwoo sobre ellos.
Estaba de brazos cruzados parada frente a los dos chicos mirándolos seriamente, mientras tanto su linda omega y Minho observaban desde atrás y esperaban a que ella comenzara a hablar, el silencio era una tortura para todos.

_Bien, ¿Ustedes dos darán explicaciones o seré yo la que hará preguntas?_ Dijo seca y autoritaria.

San por fin la miró, decidió que tenerle miedo no tenía sentido, no habían hecho nada malo y él solo quería cuidar de Wooyoung.
Pero no sabía que decir, no sabía por dónde comenzar, ni siquiera una palabra lograba salir de su boca.

_Esta bien, comenzaremos_ Volvió a hablar Jiwoo tomando una silla para sentarse enfrente de ellos cruzando sus brazos y piernas.

Ambos la miraron y asintieron, tal vez era mejor que ella hiciera las preguntas. Aún así Wooyoung tragó duro, no sabía que tipo de preguntas tendrían y si había una respuesta correcta o no.

_¿Desde cuándo se conocen?_

_Hace varios meses_ Dijo San.

_Seis meses_ Dijo Wooyoung. El tenía contado sus días junto a San.

_¿Tú madre sabe que estás aquí?_ Miró a Wooyoung esta vez.

_Le dije que me quedaría en casa de un amigo_ Contestó Wooyoung rápidamente, era intimidante y no quería ser irrespetuoso al no responder.

_¿Sabe que es San?_

_No señora_ Respondió, ni siquiera se animaba a decir su nombre.

_¿Cuál es su relación?_ Hizo otra pregunta y ambos se miraron.

_Bueno nosotros... San y yo solo somos..._ Dudó un poco, le costaba decirle a Jiwoo la verdad.

_Somos novios_ Respondió San decidido, ya no le importaba si era regañado o no, si su madre estaba de acuerdo o no.

_Novios..._ Dijo ella y se quedó en silencio mirándolos fijamente. _Wooyoung..._ Llamó al omega quién levantó la mirada nuevamente.

_¿Si?_ Preguntó algo preocupado, no estaba seguro de si quería escuchar las siguientes palabras de Jiwoo.

_Acércate a mí por favor_ Ordenó y él en un segundo obedeció quedando frente a la alfa.

Otra vez miró a Wooyoung esta vez de pies a cabeza detalladamente, tomó sus manos y lo acercó un poco para mirar su cuello de cerca. Ella solo quería asegurarse de que su hijo no haya cometido un error al marcar un omega tan joven como Wooyoung.
Ambos eran demasiado jóvenes y un lazo a su edad seguía siendo peligroso.
Cuando se aseguró de que el cuello del Omega estaba impecable sin siquiera una pequeña marca lo miró a los ojos por fin y Wooyoung esperaba lo peor.

_Oh por dios... Cuánto has crecido_ Sonrió abrazando a Wooyoung fuertemente.

Ahora en los brazos de la enorme alfa Wooyoung solo podía sonreírle, ella claramente lo conocía desde pequeño y entendía su reacción pero a la vez era confuso todo, él esperó un regaño, que lo corrieran de esa casa y le prohibieran volver, pero no pasó nada de eso.

_¿Madre?_ Llamó San al ver que no soltaba a Wooyoung.

_Me alegra tanto que estés bien cariño, y que estés de vuelta con San, no sabes cuánto dolor sentí al separarlos... entonces ¿Si recuerdas a San?_ Preguntó mirando a los ojos al omega.

_Yo bueno, no recuerdo todo pero algunas cosas si_ Respondió sincero.

_¿Esas vacaciones las hicieron ustedes juntos?_ Dijo al caer en cuenta de ello.

_Si, luego se sumaron dos amigos_ Mencionó Wooyoung con una sonrisa, ahora no le parecía tan intimidante como hacía unos minutos.

_Ven vamos a cenar, tienen que contarme todo_ Dijo llevando a Wooyoung del brazo dejando a San boquiabierto en el sofá.

Él miró a su otra madre y esta solo se encogió de hombros con una sonrisa, tampoco podía creerlo, rió y siguió a su alfa para cenar por fin.

Durante la cena ambos contaron anécdotas de ellos juntos, aunque hubieron algunas o más bien muchas cosas que evitaron decir tuvieron una bonita charla, la noche pasó entre risas, bromas y dulces tanto para Wooyoung como para la madre omega de San. La estaban pasando tan bien que no se dieron cuenta de la hora y a la una de la madrugada Jiwoo supo que ya era momento de dormir para ella ya que al otro día debía trabajar.

_Por favor San, prestale un pijama tuyo y dale unas mantas a nuestro lindo Wooyoung_ Ordenó apretando uno de los cachetes del omega.

_Dormirá conmigo_ Advirtió antes de que su madre dijera algo más.

_Bien, espero si duerman ¿Entendido San?_ Miró amenazante a su hijo.

_No se preocupe, estamos muy cansados_ Dijo Wooyoung en un bostezo.

_Puedes ducharte antes si quieres cariño, supongo que ya viste el baño en la habitación de San_ Wooyoung asintió y subió las escaleras para darse un baño. _San te dará ropa en un minuto_ Dijo Jiwoo desde abajo.

_¿Cómo es que tú... Supiste?_ Preguntó San apenas estuvieron solos, era lo que desde un principio quiso saber.

_San, tú madre es una alfa dominante de cuarenta años, ¿Creíste que nací ayer?_ Rió su madre despeinado los cabellos de su hijo. _Apenas entré a tu cuarto el aroma de Wooyoung me golpeó en el rostro, es tan único y fuerte su aroma a Jazmin que jamás pude olvidarme de él_ Comentó sonriente.

_Pero tomó supresores para inhibir sus feromonas_

_Oh... Pues no funcionó del todo, ¿Acaso tu no lo sientes?_ Preguntó, se dió la vuelta sin siquiera escuchar la respuesta de San y subió las escaleras para ir a su cuarto y poder dormir con su amada omega.

_¿Tú lo sientes?_ Dijo al darse vuelta y mirar a Minho pasar por ahí.

_Yo no siento nada_ Respondió y pasó al lado de San para subir a su cuarto.

•••

Escuchó que el agua de la ducha dejó de caer, Wooyoung no tardaba en salir así que tomó el pijama que había dejado sobre la cama, escogió el más pequeño para entregárselo y que le quedara bien.

_Wooyoung, ten tu ro-_

La puerta se abrió de golpe, el vapor causado por el agua caliente salía del baño y entré ese vapor Wooyoung apareció con una toalla rodeándolo, apenas lo tapaba ya que podía ver sus brazos aún húmedos al igual que sus piernas, cubría una pequeña parte de su torso el cual también tenía gotas de agua que caían desde su cabello mojado.
Wooyoung sonrió mirando a San parado frente a él sin hacer nada y se acercó dejando un beso en sus labios.

_Gracias Sannie_ Besó sus labios y entró nuevamente para poder secarse bien y cambiarse.

Cuando Wooyoung salió de nuevo San seguía allí mirando al frente sin moverse, inconciente bajó la mirada y Wooyoung ya no tenía esa simple toalla que apenas tapaba su hermoso cuerpo, sino unos largos pantalones que ahora odiaba y una playera suya que podía tapar hasta su cuello, también la odiaba.

_No hacía falta que te cambiaras allí adentro_ Mencionó y Wooyoung sonrió pícaro ante su comentario.

_¿Y Si tu madre entra de golpe y me ve desnudo? O peor... Minho..._ Dijo exagerando horror en su rostro.

_No digas eso, vamos a dormir_ Ordenó dándole una nalgada para que Wooyoung comenzara a caminar.

_Si señor_ Respondió en tono serio y comenzó a caminar pero apenas hizo dos pasos sus pantalones cayeron hasta sus tobillos. _Oh si, son muy grandes para mi_ Rió quitándose los pantalones por completo dejándolos tirados en el piso y acto seguido saltó a la cama para taparse con las mantas y esperar a San.

No Me Olvides Esta Vez «WooSan» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora