Capítulo 30

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Ser el oculto de alguien era una daga de doble filo, un estado que te mantenía entre el amor y el dolor, no importaba cuántas veces había querido decirle a las personas que ellos eran más que dos chicos que pasaban tiempo juntos. Habia perdido la cuenta de las veces que fingía sonrisas cuando Changbin lo presentaba como "Compañero de proyecto".

Y ahora ahí se encontraba, haciéndole de frente a aquel idiota que le había robado suspiros aún cuando era un idiota. Los ojos de Felix viajaron hasta las embriagantes orbes del mayor, por un segundo dudó si lo que iba a hacer era lo que realmente quería, pero no aguantaba un segundo más ser amado solo cuando nadie los veía, él lo quería todo, lástima que el platinado solo podía ofrecerle tan poco.

-¿De qué querías hablarme? -Preguntó el mayor mostrándose igual de despreocupado que siempre, Felix envidiaba como podía ignorar situaciones donde sabía que nada estaba bien.

-Changbin. -Tragó saliva en cuánto sintió la mirada profunda del mayor en él. -Esto no esta funcionando. -Sonrió forzosamente, era su manera de evitar llorar, el susodicho abrió los ojos sorprendido, él pensaba que entre ellos todo estaba bien.

-¿Qué? ¿P-Porqué? Creí que todo estaba bien entre nosotros. -Habló rápidamente, tenía demasiadas dudas en este momento.

-Changbin, solo para ti estaba todo bien. -Evitó mirar a los ojos al mayor desviando la mirada al costado. -No quiero ser secreto para nadie, Bin.-Susurró con la voz entrecortada. El mayor no pudo decir nada más, porque no podía ofrecerle algo que no podía darle.

-Lo siento tanto Lix. -Murmuró resignado.

-¿Ni siquiera trataras de persuadirme? -Volvió a conectar la mirada al del mayor, los ojos de Felix brillaban por las lágrimas que estaban por caer.

-Lix, no puedo ofrecerte algo que sé que no podré darte.

El corazón del menor dolió como si mil dagas lo estuvieran atravesando, con la poca energía que tenía se levantó de aquella silla y las lágrimas comenzaron a caer.

-Sé que es un mal momento. -Habló mientras seguía cuestionandose si era bueno soltar aquellas palabras que tanto habia deseado decirle, tal vez si los decía podía dejar de sentir aquella presión creciente en su pecho. -Te amo, Changbin. -Soltó mientras soltaba un suspiro para darle una última mirada al mayor y sonreírle. -No te digo esto para que me sigas y prometas algo que sé que no quieres, te lo digo porque quiero deshacerme de este sentimiento. -Finalizó diciendo mientras se dirigía a la salida.

Changbin no había podido reaccionar, pues todavía estaba procesando aquellas palabras que salieron de la boca del rubio "Te amo"-Se repetía a sí mismo en la cabeza. ¿Felix sentía eso por él? ¿Lo amaba? ¿Y que habia de él? ¿También amaba al pecoso? Muchas preguntas estaban rondando su mente sin obtener ninguna respuesta. Deseó por unos momentos ser alguien que pudiera darle el mundo entero a Felix, presumirlo en cada lugar al que fueran, tomarlo de la mano y decir aquel anhelado "Él es mi novio", tan solo si Changbin no estuviera destinado a estar casado con aquella chica.

La situación era realmente complicada, a los 20 años Changbin había conocido a Nim Jisu ambos se habían enamorado perdidamente y en su locura de amor, el mayor le había propuesto matrimonio, sus padres estaban realmente felices por ambos, pues Jisu era de una familia adinerada al igual que él. Organizaron una gran fiesta de compromiso dónde todo el evento fue transmitido a nivel nacional, Changbin en su momento no sabía de su atracción hacía las personas de su mismo sexo, pues para él Jisu había sido su primer y único amor. Al año siguiente tuvo que viajar a Australia junto con Chan, ahí fue cuando todo su mundo comenzó a tener grietas, conoció a Wooyoung, este despertó en él deseos que con Jisu nunca habia sentido y aunque sabía que estaba mal, no pudo evitar caer ante la tentación que aquél chico era para él. Pero cuando Wooyoung comenzó a incluir caricias diferentes y besos sin aquella pasión, no tuvo más remedio que hablarle sobre Jisu.

𝕷𝖔𝖛𝖊 𝖒𝖊 {𝕸𝖎𝖓𝖘𝖚𝖓𝖌}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora