«Las almas gemelas que se encuentran y se reconocen, nunca se sueltan; ni con la distancia, ni con el silencio, ni con las vueltas que da la vida.»
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La estadía de Lucerys Velaryon en Desembarco del Rey tomará giros inesperados en su vida, su d...
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El príncipe Jacaerys le desagradaban los bailes.
Y más si la invitación venía de parte de la Reina Alicent.
De hecho, ninguno de los integrantes que conformaba la familia de la heredera soportaban siquiera a los Hightower. Y no había un hombre que odiara a los Hightower como Daemon Targaryen, y tal desagrado se esparció por el príncipe Jacaerys. La sola idea de asistir a una celebración por parte de ellos le revolvía el estómago, después de todo lo que les habían hecho hacía su madre y hermanos no debía sentir siquiera empatía.
"-¿Soy al único que le desagrada la idea de asistir?" Preguntó, con una voz monótona.
Rhaenyra negó con la cabeza, ella tampoco deseaba asistir.
"—Podemos no hacerlo".
"-Debemos asistir, -replicó mirándolo- es nuestro deber como familia o será mal visto por parte de las casas más importantes de Poniente".
Él bufó.
"-En lugar de estar en un ridículo baile deberíamos hablar sobre el derecho de mi hermano al trono de Marcaderiva".
Ella suspiró acariciando su notoria barriga.
"-Tu abuelo organizó esto, además, será algo bueno para distraernos. Jace te prometo que junto a tu Padre tendremos tiempo para preparar nuestro terreno".
"-Los bailes no nos harán ganarle a Vaemond". Masculló en voz baja.
Ambos se sumieron en un silencio espeso. La noche había llegado en Desembarco y no faltaba mucho para que la dichosa celebración diera marcha. Ella observaba a su hijo mayor, Jacaerys era un réplica del príncipe canalla y eso le complicaba al llegar contradecir a su hijo. Además, había una fuerte energía de liderazgo en ellos, auténticos Alfas que los sumaban a una lucha de poder constante que llegaba cansar a la heredera; más en el estado que se encontraba.
El príncipe Lucerys se encontraba sentado en el sofá, no muy lejos de su hermano y madre, soltó un suspiro exasperante.
"-¿Y yo por qué tengo que asistir? -preguntó- ¿No pueden solo ir ustedes?"
Rhaenyra endureció su mirada y tomo una postura rígida, una clara señal de que una guerra daba entrada entre ambos.
"-Debo recordarte Jacaerys que somos la familia de la Reina Alicent, ella nos invitó cordialmente a la celebración entre las casas de Poniente por petición de mi padre, el Rey". Su tono de voz los tomo por sorpresa haciendo que ambos compartieran una mirada. "-Como heredera después de mi padre debo asistir a estos eventos importantes, y tú cómo mi heredero debes mostrar el mismo apoyo hacia la familia real. Deja ya de lado tus caprichos y apoya a tu familia; a tu hermano, y a mí".
