Capítulo 39

384 85 9
                                    

Hoseok se sentía tan en dicha. Es decir, ¿quién no lo estaría si tenía de novio a Kim Taehyung? Era lo mejor que le había pasado en la vida y no lo cambiaría por nada.

Taehyung siendo novio era algo interesante. Podía tratarte como normalmente hacía y luego hacía cosas verdaderamente cariñosas que hacían que los dientes de Hoseok se pudieran por lo dulce que era. Maldición.

Acariciar su cabello inconscientemente, luego llevarle la mochila, después simplemente tomarle la mano mientras caminaban.

Era tan hermoso que Hoseok sentía que estaba flotando y en cualquier momento su estómago explotaría por los elefantes de allí adentro.

Sentía que cada segundo quería más a Taehyung y que era imposible amar a alguien tanto, pero lo era. Con Taehyung podría ser lo extremadamente ridículo que fuera y este no se lo impediría.

El ejemplo claro era que Hoseok le decía apodos cariñosos en público y este solo carraspeaba por la vergüenza de que lo hayan escuchado, pero no dijo nada más. Hoseok también le encantaba fastidiarlo acariciando su mejilla cuando estaban en público y hablando con la voz más melosa que tenía.

Era divertido y tan placentero sentir que no podías dejar de sonreír. Llegar a tu casa y que te dolieran las mejillas por alegría.

Era satisfactorio, nada más que agregar.

Sus padres se lo tomaron bien y su hermana ni que hablar. Solo que esta última le regalo condones, y se aguanto las ganas de decirle que ya lo habían hecho, pero no tenía el corazón para negarse a sus explicaciones sobre las relaciones sexuales.

Cómo sea, su vida estaba yendo muy bien, teniendo en cuenta que se acercaba el festival y ya Taehyung había planeado una cita en dicha fecha, que tenía tantas expectativas y muchas ganas de ir.

Entonces todo eso se fue a la mierda.

Me mentiste, no creo que pueda cumplir mi promesa. Tu felicidad no durará mucho, Hoseok. Disfrutalo mientras puedas.

Te escribe: Jiun”.

Hoseok tembló mientras leía la carta que habían puesto por la rendija de su casillero.

Su respiración estaba siendo inestable y no podía hacer otra cosa que fruncir el ceño, tanto por el miedo y el enojo.

Fue en dirección hacia Taehyung que ya lo esperaba en una esquina del pasillo, lo observó por unos segundos, que hizo que Taehyung lo mirara extrañado y preguntara si había algo en su cara. Hoseok respiro tranquilamente al ver que no estaba enojado o algo entre ellos no había cambiado.

Bien, la víbora no le había dicho nada.

Estaba bien, por ahora…

Hoseok quería estar tan feliz por su relación, pero no podía por estar constantemente en guardia de que Jiun viniera y arruinara todo, que simplemente se comportó muy depresivo los últimos dos días.

Taehyung lo noto por supuesto, así que hizo de todo para hacerlo feliz. Lo llevó a caminar bajo el sol, le compró cantidades innumerables de helado y lo abrazo más de lo que él lo hacía normalmente.

Hoseok no mejoraba. Claro que estaba agradecido por el consuelo y podía sonreír al instante gracias a su novio, pero pronto le carcomia aquello que había guardado tanto tiempo.

Taehyung preguntó en más de una ocasión que sucedía, pero Hoseok sólo le decía que era el estrés porque se acercaba el día de la exposición.

Taehyung pronto se vio más que preocupado al ver cómo Hoseok se mordisqueaba los dedos fuertemente. No le gustaba. Constantemente tuvo que apartarlo de su boca y besar sus dedos para que dejara de hacerlo, Hoseok al parecer se calmaba con ello y hablaría como si no hubiera pasado nada, pero entonces recaía y se volvía alguien triste con el aura llena de carga.

CupidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora