Capítulo 23

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Aunque a Taehyung le gustara pasar tiempo con Hoseok, a veces creía que necesitaba un respiro.

Simplemente porque Hoseok era demasiado. En el sentido de que a veces no lo comprendía del todo y eso lo ponía un poco con los nervios de punta.

Es decir, ¿cómo puede alguien vestirse ridículamente y aun así verse de manera linda? Apostaba Taehyung qué si se vestía así, todo el mundo se burlaría. Él era más de una paleta de colores que daban entre marrones semi oscuros y color hueso, también variaba, pero nada tan extravagante como el chico carismático que salía de su casa con un abrigo de color morado, shorts amarillos y zapatilla blancas con medias que tenían una franja con brillantina.

Aunque fuera ridículo, se veía bien en él, debía admitirlo.

Por eso, Taehyung creía que Hoseok era demasiado, ya que hacía algo a su sistema que no parara de picarle las manos por tocar.

Solo tocar ese abrigo color morado y ver que se siente al tacto, ¿se sentiría suave como cuando Hoseok sonríe?, ¿se sentiría cálido como cuando ve los hoyuelos de Hoseok asomarse?, ¿Qué cara pondría Hoseok si tocará su abrigo unos momentos?

No era como si quisiera tocar el abrigo de otra persona, solo pasaba con Hoseok. Tampoco es como si estuviera rogando por tocar el abrigo en sí, para nada. Era que si lo usaba Hoseok, probablemente quisiera tocar alguna parte de este, independientemente de la ropa. Podría tocar su mano, su mejilla o su hombro, como la otra vez…

Y es por eso, una vez más, que Taehyung sentía que era demasiado lo que le hacía sentir Hoseok y que le ponía los nervios de punta a más no poder.

Jamás había sentido esto y era extraño querer simplemente tocar algo de Hoseok, porque era él o porque…

Aunque eso ya no sonaba un poco fuera de lugar, porque si lo decía en voz alta, probablemente Hoseok se asustaría y ya no serían amigos nunca más. Pero a veces creía que tenía algún sentido de propiedad sobre él, que Hoseok debia ser Hoseok para Taehyung.

Y ese es otro problema que venía angustiándolo desde ayer: ¿Por qué se comportó así ante la mención del tal “Namjonnie”? No es como que el chico tuviera algo de malo, pero el solo hecho de mencionar su nombre, ya le desagradaba.

Todo era demasiado confuso para Taehyung y lo mejor que podía hacer era evadirlo, siempre había sido así ante los problemas, creía que era lo mejor antes de saber la verdad.

Porque pensar que Hoseok era suyo, ya era algo… no estaba bien, suponía. Era su amigo, punto. No era como sus juguetes de la infancia, cuando no quería prestárselos a nadie porque eran suyos.

Muchas veces se culpo porque a veces podía ser demasiado intenso, como cuando tuvo a su primera novia, y le mencionó esta que se comportaba demasiado posesivo para el gusto de ella. Después trató de cambiar eso con su segunda novia, pero se había aburrido para aquel entonces tratar de comportarse como ella quería, que simplemente terminó con ella por el bienestar de los dos.

Desde ahí se dijo que trataría de no tener ninguna relación intensa con nadie.

Entonces llega ahora a esta escuela y conoce a Hoseok que hace que salga a relucir su pasado tenebroso, siendo más que un poco controlador y obsesivo. No comprendía a Hoseok por eso, no podía entender a este ser humano, simple.

Solo que hay más cuestiones por las que Hoseok era demasiado.

—Hola, Tae.—canturreo apenas llego a su lado.—¿Nos vamos?

Taehyung asintió mostrando su máscara de siempre.

Aunque siempre la mostraba, a veces caía cuando estaba frente a Hoseok. No sabía cómo hacía, pero siempre caía de vez en cuando con este ser pequeño y gracioso.

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