Cupido

Capítulo 35

Al final si se había concretado la venganza: habían puesto laca por todos los carteles del puesto de Seokjin y habían roto parte de su decoración. No era la mejor venganza, pero por lo menos Hoseok se sentía satisfecho.

De alguna forma eso no afecto a Seokjin, bueno..., había venido a gritarle a Hoseok en la cara, pero nada del otro mundo. Taehyung había estado allí para defenderlo y mandarlo a rodar (lo cual fue muy valiente hacerlo en medio del pasillo), pero ya que, Seokjin tenía dinero a por montones y compró materiales a última hora.

En primer lugar, Hoseok no sabía que se iba a presentar, pero en fin.

Ahora estaban en el patio con Hoseok sentado en su puesto y Taehyung repartiendo volantes al que se le apareciera primero. Menos mal ya le habían pagado el préstamo a su hermana y habían comprado suficiente anuncios para no importarle si alguien lo botaba a la basura.

A Hoseok ya le dolía la cara de tanto sonreír y llamar a la gente a que se inscribiera a su festival de fin de año.

—¡Anímense!—llamaba con alegría.

Uno que otro paraba y preguntaba de que trataba y Hoseok se encargaba de explicarle todo. Unos se inscribían y otros se iban al puesto del frente a confirmar su asistencia para dicho evento.

No tendría problema con el puesto del frente, salvo que era el maníaco de Kim Seokjin que cada vez que Hoseok terminaba de explicar, vociferaba a todo pulmón que tenía un baile por organizar.

Quería golpear su cara petulante.

—¡Mejor ven aquí! —llamo Seokjin con un ademán. El chico que había terminado de rellenar la hoja, volteo para verlo.—Estamos haciendo un baile de fin de año, ¿no quisieras venir? Compra tu entrada aquí.

El chico simplemente dejo el lapicero y se fue donde Seokjin preguntando por más información. Hoseok miraba con rabia pura a su contrincante de al frente. Una vez terminó el chico de comprar también su entrada (no sabe cómo rayos iría a las dos cosas), Seokjin le tendió una sonrisa socarrona:

—Deberías poner más esfuerzo, te están quitando los clientes.

—¿Por qué mejor no te metes en tus asuntos y dejas de fastidiarme?—respondió Hoseok con el mismo veneno.

—Es divertido verte enojado. Además, estoy cobrando lo que me hiciste hace un día, ¿lo olvidaste?

—Tu me robaste mi dinero.—reclamo.

Que cinismo el de él.

—No lo hice, técnicamente le pedí a alguien que lo hiciera.—su sonrisa podía ser tan siniestra.

—Es lo mismo, eres cómplice de robo.—Hoseok sacudió su cabeza.—Y no me cambies de tema. En realidad, no me hables, estoy trabajando.

—Hoseok, Hoseok, Hoseok.—Seokjin siguió fastidiando.—Aunque sigas haciendo tu esfuerzo por eso, yo casi voy a llenar una lista completa, en cambio tu... ¿llevas la mitad? Y eso que tienes que hacer por lo menos 10 hojas de alumnos. Solo ríndete y nadie se enterara el porqué fue.

Hoseok decidió ignorarlo tomando su café helado que le trajo Taehyung apenas comenzó esta tontería.

—Puedes venir tu a mi baile y también puede venir tu amigo.—Seokjin siguió.—O solo tu amigo, ¿Qué tal si lo convenzo de ir?

Hoseok no aguanto más y se paro de su puesto con café en la mano. Fue caminando hasta el puesto de Seokjin donde este también se había puesto de pie mirándolo fijamente.

—Si no dejas de fastidiarme, le avisaré al director que estas haciendo trampa.

—Uy, que miedo.—respondió con una risa socarrona.