I don't love you

การแต่งงาน

Doyoung había esperado algo de tiempo en lo que terminaban los anillos de compromiso en la tierra del Sol naciente, el resultado final era alucinante, ahora era imprescindible proponerselo a su amada, solo que aún no sabía cómo hacerlo si llegaría en completo incógnito.

Se subió al barco más temprano posible, eran exactamente las 8:00 am, llegaría al atardecer, casi no llevaba equipaje salvó por una maleta con ropa y zapatos y algo de dinero, está tan emocionado que no había dormido casi el día anterior.

6:38 pm

Por fin había llegado al reino de su preciosa novia, ahora no sabía cómo evitar que se comentará en la ciudad que había llegado un rey, tampoco es como que fuera muy popular o conocido, pues era medio introvertido, pero seguramente había gente que le reconocería ¿verdad?.

Había rentado un Automóvil para llegar al castillo de los nobles, subió su maleta y se aseguró de que los anillos y el regalo que le llevaba estuvieran en perfectas condiciones.

Manejo 25 minutos hasta la colina donde se encontraba la enorme casa, pidió a los vigilantes que no avisasen al rey o a las princesas, se estacionó frente a la entrada, y bajó el regalo y sus preciosos anillos. Pidió que solo se le dijera a la princesa Lu que Kim Doyoung le esperaba en su oficina.

Nervioso, esperó sentado en uno de los sillones, moviendo sus pies como un infante, hasta que escucho las pisadas apresuradas de unos tacones, se levantó y espero a que la bonita cara de su princesa apareciese.

Lu sentia mariposas en el estómago y estaba muy emocionada, asomo su cara por el marco de la puerta viendo ahí a su novio, corrió a abrazarlo, hacía tiempo que no se veían y se echaban mucho de menos.

-Doy ¿qué haces aquí?- dejo un beso en la mejilla del Rey.

-Es que, quiero decirte algo, pero primero, mira lo que te compre en Italia- le dió la caja roja de terciopelo que llevaba

-¿Es para mí?- destapó la caja y había unos hermosos tacones stiletto color verde olivo, de gamuza con la suela blanca y sus iniciales en la parte de adentro, eran hermosos- ¡No puedo creerlo Doy, están maravillosos!¡Muchísimas gracias, Corazón!

- Ahora Lu, quiero hablar de algo contigo- el ambiente paso de amarillo a gris muy rápido

-Si claro, dime qué pasa- los pequeños ojos de Lu, se hicieron grandes, lo miraba con mucha atención

Kim se hincó en una rodilla, con la pequeña cajita abierta.

- Lu Leechaiyalapornkul, ¿me harías el enorme favor de aceptarme como tu esposo?

-¿Qué?¿ Es de verdad Doyo? - Lu estaba hecha una magdalena- Claro que sí mi amor, Si quiero que seas mi esposo

Doyoung procedió a ponerle el anillo y el se puso el suyo, pronto estarían juntos para siempre.

¿es esta la mejor sensación de toda una vida?¿de verdad es como todos decían?  definitivamente