SUPER VS SUPER

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Lena se acurrucaba lo más posible a Kara, a pesar de que ella era más alta que la alfa por el momento.

El olor del alfa la cubría por completo, era satisfactorio tanto para ella como para su cachorro. La alfa rubia envolvía sus brazos alrededor de su cintura protectoramente y ella se derretía interiormente.

Estaba tan cómoda que no sintió el pesado olor acercarse a su pequeño refugio.

Todo fue muy rápido.

Cuando se dio cuenta Kara está encima de ella cubriéndola con su cuerpo mientras que el mismísimo Superman se posaba heroico ante la iracunda rubia

— Supergirl — el tono tenso de Superman dejaba mucho que desear, al igual que su olor pesado. Lena sabía que Lex y Superman eran amigos, así que probablemente este escándalo era idea de Lex.

Su corazón vibro ante la idea de separarse de su alfa.

— Tu presencia no es bienvenida, Kal El — Lena inconscientemente se apego más a la rubia buscando protección y consuelo ante el alfa extraño.

— Necesitó que te separes de esa omega, prima — los ojos de Superman analizaban la escena como si este fuera el gran enemigo del día y fuera su obligación vencerlo.

— Primero muerta — tras esas palabras el infierno se desató.

Kara embistió contra el otro alfa con intenciones de sacarlo de su ahora considerado territorio y Superman respondió el ataque de manera ágil.

La omega estaba asustada y lo demostró soltando feromonas pesadas que solo hizo que Kara se enfureciera más, llegó un punto en el que parecía que la rubia iba a vencer al alfa kryptoniano cuando aparecieron agentes de la DEO

De repente Kara había sido reducida con unas pesadas cadenas que por alguna razón no podía romper.

Lena viendo esto rompió su estado de shock e intentó ir a ayudar a su alfa, pero fue detenida por unos fuertes brazos inamovibles.

— Tranquila Luthor, ahora estás a salvo.

Supergirl intentaba sin éxito liberarse de su captura y votaba feromonas a lo loco.

— Yo, no — Lena no sabía que decir, su parte salvaje le decía vaya con su alfa y la ayude, mientras que su parte racional decía que esto quedaría como un mal sueño.

—¡Mi omega! ¡Mia! — la rubia no dejaba de retorcerse entre las cadenas.

— Estoy decepcionado prima — dijo Kal mientras se acercaba a Lena — Abusar de una omega, no lo pensé de ti.

Kal entonces poso descuidadamente una mano en el ligeramente abultado vientre de la omega pelinegra que empezó forcejear para liberarse entonces Kara vio todo rojo.

— ¡Mío! ¡Mi omega! ¡Mi cachorro! — la alfa reunió todas sus fuerzas y logro romper las pesadas cadenas.

Tanto Superman como la DEO retrocedieron, y no fue para menos pues la rubia no dudo en usar su visión de calor para rostizar un par de agentes que se entrometían en su camino hacia su Zhao.

Cogió a su omega en brazos y salió volando lo más rápido que pudo, agarrando con fuerza a su omega y cuidándola de cualquier daño.

Decidió llevársela a un lugar secreto, un lugar al que ni Superman conocía y donde su omega podría anidar tranquila, incluso podría reunir aliados para enfrentar a cualquiera que la quiera separar de Lena, porque pondría el mundo arder antes de perder a su Zhao.

— No te preocupes mi Zhao, nadie nos separara — murmuro mientras aspiraba el dulce aroma de su omega.

La Fortaleza de la Soledad era un lugar que había marcado como suyo y ahora estaba compartiendo con su omega.

Lena había caído en un profundo sueño después de todo el ajetreo, así que Kara optó por llevarla directo a su recámara.

Puso un par de prendas alrededor para formar un buen y cómodo nido y recostó a su omega en el medio, esta no dudo en acurrucarse y seguir su sueño

— Mi Zhao — murmuraba la alfa mientras acariciaba las hebras de cabello negras — Mi cachorro.

Dijo esta vez posando su mano en el vientre abultado de su omega, porque ¿Cómo no podía querer a ese cachorro? Era parte de su Zhao y Kara amaba todo de ella.

Las cadenas que me atan a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora