Las cadenas que me atan a ti

¿Amigo o enemigo?

La rubia sobrevolaba la ciudad con una sonrisa en los labios. No era para menos, el encuentro con la omega había sido satisfactorio, en su momento pensó que no encontraría una compañera en este involucionado mundo, se había equivocado.

— ¿Es una sonrisa lo que tienes? ¿El mundo se acaba y no me di cuenta? — a su lado está esa molestosa omega la cual siempre estaba molestándola.

— Si este mundo se acabará solo tendría que invadir otro planeta — comento la Kriptoniana disgustada, estaba teniendo un momento privado de realización y la molestosa omega volaba a su lado.

— Créeme Kara, si el mundo se acabará tu tendrías que ayudarme a salvarlo — dijo divertida — Alex me dijo que saliste de repente.

— Tenía asuntos que resolver — no quería hondar en eso, Lena era un tesoro que no planeaba compartir.

— ¿Y esos asuntos tienen que ver con Luthor Corp? — curioseo la omega.

— ¡Estuviste siguiéndome! — Kara no tardó en alterarse, su alfa recelosa de que alguien aparte de ella descubra a su nueva adquisición.

— Bueno Alex estaba asustada cuando saliste de repente, así que me llamo, pensó que reaccionarias mejor a mí que a Diana — la sola mención de la amazona alfa hizo a Kara tensarse.

— No necesito ni a Diana ni ti de niñeras — en un rápido movimiento Kara empujó a la omega contra un edificio para luego sujetarla de cuello con fuerza — ¿Entendido?

— Jajajaja — se río entre dientes la omega — Pensé que ya habíamos pasado este punto en nuestra relación Kara.

Eso solo hizo irritar más al alfa de Kara que no dudo en estrujar la garganta de la omega, en un intento de someterla de una vez por todas. Solo obtuvo que los ojos de la omega se volvieran rojos.

— No puedes dominarme — con un movimiento de manos, la omega hizo brotar energía que saco expulsada a Kara, destruyendo otro edificio.

Kara quedó aturdida por unos segundos, odiaba eso de la omega, no podía dominarla, cada vez que lo intentaba la rubia terminaba estrella contra un edificio, que probablemente la DEO termine arreglando.

— Bueno nunca está de más intentar, ¿O no Wanda? — lo último que quería era una pelea ahora mismo, estaba más concentrada en la linda omega que vio en aquel edificio, que en esta que solo le hacía la vida imposible.

— Lo que tú digas — comento escéptica, aún le picaba la curiosidad sobre que hacía Kara en uno de uno de los edificios que Luthor Corp poseía.

Al sentir la mirada concentrada de Wanda, la rubia se dio por vencida, lo último que quería era que la bruja se meta en su cabeza.

— Encontré a mi Zhao — las palabras salen fuertes pero recelosas, el pecho de la rubia se infla, orgullosa.

La omega quedó sorprendida, sabía lo que significaba que la Kriptoniana encontrará a una omega a la que quisiera anudar, cosa de por sí muy rara puesto que Kara parecía reacia a anudar algún omega.

— ¡Eso es excelente Kara! — era feliz por la joven alfa, a pesar de sus continuos roces, eran algo así como amigas —¿Pero no deberías estar con ella ahora? Ya estás en edad de criar así que ....

Un gruñido hizo que Wanda dejara de hablar.

— Todavía no le e anudado — y su alfa le recriminaba por ello — ¡Y para que sepas soy muy capaz de criarla!

Wanda soltó una pequeña risita ante la rabieta del alfa, quien tenía un complejo con su edad, pero no pudo evitar preguntarse ¿Porque no había anudado a la omega? Siendo Kara un alfa alienígena joven de gran rango, uno supondría que lo primero que haría sería anudar.

— Y antes de que preguntes, no la anude porque una molestosa casi alfa se inmiscuyo — comento irrita la rubia.

— ¿Casi alfa? — Wanda pensó a qué podía referirse Kara — ¿Te refieres a un alfa recesivo?

La alfa solo hizo una mueca fastidiada, ya no quería seguir hablando sobre cómo su encuentro fue interrumpido y justo cuando Wanda iba a abrir la boca.

— Wanda, habla Alex ¿Encontraste a Kara? — Alex hablaba por el intercomunicador.

— Si, Alex — respondió lanzándole una mirada divertida a Kara — Estamos en camino.

— No necesito una niñera — hablo la rubia luego de que Wanda acabará de hablar con Alex.

— No, pero seguro que te gano unas carreritas a la DEO — tras decir eso la omega salió volando dejando a una rubia irritada que se dispuso a seguirla.

Lena no podía dejar de tocar su amoratado cuello, su omega interior lloriqueaba con la necesidad de ser cuidada y mimada.

Toda su habitación olía a pino y almizcle, el aroma que llegó a detectar en Supergirl, el fuerte olor no hacía más que marearla y provocar punzadas en su estómago bajo.

Sin saber que hacer, Lena cuál minino empezó a sobarse en su cama con la intención de calmar el creciente calor que empezaba a sentir; estaba en esa labor cuando escucho la puerta.

— Pase — solo podía ser una persona.

— Señorita Luthor le traje la ropa que necesita — comento una pelirroja mientras dejaba un gran montón de ropa en el piso del departamento de Luthor.

— Gracias Romanoff — Natasha Romanoff, era un agente de seguridad que contrato Lex para ella, después de que decidió que iba irse.

— En cuánto al otro asunto, la carga de Kriptonita llegará pronto.

Lena bufo por lo bajo, para cuando la carga llegará, la "heroína" ya habría logrado su cometido, cualquiera que sea ese.

— Muchas gracias Romanoff, puedes retirarte.