Las Chicas De La Banda

34. Emma hizo una estupidez

Si vienen con la intención de leer sobre Alex y Nicol, las voy a decepcionar, el capitulo solo trata de Sam y Charlotte, me extendí mucho en Sam y no quise darles solo un capitulo de ella asique también inclui a Charlotte, espero les guste y si no, disculpen  

                              Sam

-No puedo creer que me hayas hecho traerte

-Animo nos ira bien – la mire mal, pero ella seguía con su animada sonrisa

Minutos antes

Estaba enfrente de mi televisor desayunando

-Necesito un favor

-Si implica levantarme lo hare más tarde, estoy desayunando

-Necesito que me lleves a casa de mis padres

-Ni siquiera lo pienses

-Sam por favor

- ¿Por qué no te lleva Javier?

-Porque su auto se averió, aparte está en su trabajo

- ¿Y porque no te fuiste ayer?

-Porque sabes que ayer me la pase haciendo tarea toda la tarde

-Pues vete transbordando

- ¿No crees que mis padres se preguntaran si porque no me llevaste tu? – rodé mis ojos – además el trato era que te prestaría el auto si me llevabas los fines de semana a mi casa – deje mi sopa de lado y tome un sorbo de mi café – tu nunca rompes un trato – suspire

Vencida porque sabía que no podía hacer nada más

-Nos vamos en un ahora

-Gracias – entro a su habitación

Termine lo que quedaba de mi sopa, y mi café, entre a mi habitación

Tenia que mentalizarme que iría de nuevo a casa de mis tíos, ¿Qué podía salir mal?, la última vez que fui afortunadamente no me cruce con nadie de la familia

Espero esta vez correr con suerte

Actual

Hace media hora habíamos entrado a la ciudad donde ambas crecimos, sentí mis manos sudar ante el volante, cada vez que miraba las calles familiares me entraba un escalofrió

Me detuve en un semáforo

-Es la una de la tarde – mire mi teléfono – ¿te quedaras a comer?

- ¿Me puedo regresar? – pregunte con un poco de emoción

-Creí que eso harías, conociéndote – asentí – y como regreso hasta el domingo en la noche creí que hasta el domingo irías por mi

-Mira que eso no suena mal – di marcha cuando el semáforo marco el verde – sinceramente no lo había pensado

Pero claro que esa idea tarde o temprano pasaría por mi mente

-Me sorprende – la escuche reír – como sea mi mamá hará que te quedes a comer

-Lo sé y como no puedo resistirme a un plato de comida hecho en casa con gusto lo aceptare

-Bien – mire de reojo a Emma

En todo el camino siempre mantuvo la sonrisa que carga ahora, y no se porque cada que me acercaba a una calle conocida mis nervios aumentaban más y más, espero no estar cometiendo una estupidez

Estacione enfrente de su casa, había varios autos a los lados supongo que eran de los vecinos, ya que la ultima vez que venimos no había ningún auto, cuando quite mi cinturón capte que Emma ya estaba abriendo la parte de atrás para sacar su maleta, quite la llave, tome mi teléfono y tome un gran bocado de aire antes de salir del auto