Capítulo 14

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Últimos capítulos---

"Porque bebé, todo lo que eres
Es todo lo que necesito, lo eres todo para mí.
Bebé, cada parte es quien eres
Porque estabas destinado para mí."

Everything I need / Skylar Grey

Kangin estaba paralizado.

Pude verlo en su expresión congelada, no parpadeaba, no decía nada era como si fuese un cascaron de él frente a mí. No sé cuánto tiempo estuve mirándolo, pero noté como volvía de su estado de shock en el momento en que su mirada se transformó en una mezcla de curiosidad e incredulidad.

-¿Cómo pasó?
-No lo sé. Estuve sintiéndome mal toda la semana y me hice una prueba de farmacia. –le dije intentando no temblar, estaba nerviosa y tan alterada como él. Sólo que yo tuve un rato a solas para procesarlo todo.
-Usábamos preservativos. Claro, no son infalibles. Pero... -se acercó a mí y me tomó de las manos- ¿Estás bien?
Asentí intentando no llorar. -Sí, eso creo. No podía quedarme en casa esperando que regresaras en la noche. Es una horrible incertidumbre Kangin. Soy viuda y estoy embarazada. Podría irme de Busan si es lo que deseas.
-No, no vas a hacer eso- Kangin me miró desesperado. –No voy a dejar que te vayas y ocultes al bebé por evitar un escándalo. Sólo hay una cosa que vamos a hacer.

Un hijo nunca estuvo en mis planes antes, pero ahora ya era un hecho.
- ¿Qué vamos a hacer?
Kangin frunció el ceño- Lo correcto Mirae, hablaré con tu padre y con mis hombres e informaré de nuestra boda.

Ahora la sorprendida era yo.

-¿Casarnos?- Aun en mis sueños más locos, había imaginado esto de otra manera. Pero si, era lo correcto. Casarnos para evitar un escándalo peor o una guerra. –Nos casaremos por el bebé.
-Nos casaremos porque es lo que debimos hacer desde que iniciamos lo nuestro- dijo con contundencia.
-No quisiera precipitarnos- le dije intentando pensar y no dejarme llevar por la felicidad de que quería que fuese su esposa –Yo ya tuve una pérdida antes y mi hermana perdió varios bebés antes de tener a Youngmin...

Y entonces Kangin me besó y le devolví el beso con ansias, él me daba paz, me sentía segura. Un sonido y una voz interrumpió nuestro beso.
-Señor...
Era Kim Daehyun
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Kangin

Aun besando los labios de Mirae, no podía creer lo que había escuchado. Embarazada, el hijo de ambos creciendo en su vientre. Y era una extraña sensación entre la sorpresa y la felicidad.

Cuando notó que era Kim Daehyun quien los había interrumpido, una especie de triunfo lo llenaba. – ¿Necesitas algo?
Daehyun compuso su gesto –Llegaron los líderes.
Kangin asintió –Perfecto. Cariño, ¿esperarás por mí?
Mirae estaba sonrojada pero asintió. Por favor, si mi prometida decide quedarse aquí, que nadie entre sin su consentimiento.
-Por supuesto señor. ¿Debo darles mis felicitaciones? – preguntó Daehyun intentando componer su sorpresa.
-Debe. Mirae ha aceptado convertirse en mi esposa.
-Felicidades... Señor, señora.

Mirae asintió.

-Debo irme. Espérame por favor.
-Lo haré. – Mirae le obsequió la primera sonrisa desde que le había dado la noticia de su embarazo.
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-Buenas tardes señores.- Kangin saludó a los líderes que estaban en un salón privado en la parte superior del establecimiento. Choi Siwon, Lee Hyukjae, ZhouMi, Lee Changmin y el recién casado Choi Minho, que ahora se estrenaba en el matrimonio con Hyunah, una de las trillizas Lee de Incheon...
-¿Y Lee Donghae?- preguntó Kangin al notar la ausencia.
Hyukjae rió –En el baño.

En ese momento Lee Donghae salió del baño luciendo pálido y descompuesto. Kangin nunca lo había visto así. Se sentaron todos mientras Daehyun entraba y servía unos tragos. ZhouMi apartó el vaso y Donghae lo mismo.

-Prefiero un vaso de agua mineral- dijo ZhouMi con una mirada de disculpas. Kangin recordó que el hombre desde que hacía un tiempo había dejado la bebida.
-Uno para mí también. –Un pálido Donghae que era el blanco de las risitas de los demás.
-¿Sucede algo?- preguntó Yesung viendo que hasta Choi Siwon se reía del claro malestar de Donghae.
-Aquí mi primo –dijo Hyukjae- está sufriendo los estragos del embarazo de Mina. Mientras su esposa está fresca como una lechuga, aquí el sufrido padre está sufriendo los estragos.
Donghae gruñó
-Felicidades- dijo Kangin. -Imagino que debemos hacer la reunión lo más corta posible.
-Lo agradecería- dijo Donghae con su piel cetrina y mirada cansada que era el deleite de todos los demás.
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-Así que vas a tomar esposa- comentó ZhouMi luego de que Kangin tocara el tema ante los líderes. Era algo que debía hacer si tenía que reforzar su posición y ligar en la Organización. -¿Quién es?
-Es Mirae, la viuda de mi padre.
Todos en la sala se quedaron en silencio, incluido Daehyun que ya estaba informado.
-Es una sorpresa- dijo Siwon mientras Donghae observaba a Kangin y por la forma en que lo hizo, este supo que el líder de los Lee sospechaba o bueno, acababa de confirmar sus sospechas.
-¿Podemos preguntar que te impulsó a ello?- Preguntó Hyukjae en un tono serio.
-Necesito una esposa, Mirae necesita un marido, además que es la tía de mi hijo, mejor madre para él no puedo conseguir. Tan fácil como ello.

Todos asintieron, todos incluido Daehyun. Por ahora era necesario ocultar el hecho de que estaba embarazada. No sabía de cuánto tiempo podría ser y era preferible que por ahora, por la seguridad de Mirae y su bienestar que nadie supiera de su estado.

Yesung era el único que miraba a Kangin como si sospechara que ocultaba algo y claro que hablaría con él otro día, ahora su prioridad era Mirae.

Sería su esposa, su compañera y la madre de un hijo suyo.
Nunca había sentido tanto miedo como ahora.

Pero tampoco tanta felicidad.
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Mirae

-Mañana tenemos la cita con la ginecóloga.
-¿Tenemos?- pregunté sentada en el tocador de mi habitación. Habíamos regresado un par de horas antes y ya nos encontrábamos a solas. Le había dicho a Kangin que quería confirmar mi embarazo y ver que todo estuviese bien.
-Iré contigo Mirae. Ese bebé no se hizo solo. –Dijo y no pude evitar sonreír. -¿Te disgustaron las felicitaciones por nuestra boda? – me preguntó y yo negué. Había sido extraño que todos los líderes de la alianza nos felicitaran.
-Aun no sé si hacemos lo correcto- le dije de nuevo, no sé cuántas veces lo había repetido ya.
-Hacemos lo correcto- se acercó a mi mientras sus manos bajaron por mi costado. Nos besamos y quitamos nuestras ropas con urgencia quedando él en sus boxers y yo con mis braguitas. Me sentí atrevida mientras mis manos bajaron sus calzoncillos hasta la mitad de sus muslos, acariciando sus testíc*los, él gimió en respuesta a la suave caricia y me empujó suavemente besándome y antes de darme cuenta estábamos en mi cama y completamente desnudos.

Me moví sobre él, necesitaba tomar el control y me subió encima de él mientras lo besaba en la boca, luego bajé por su cuerpo y antes de darle tiempo a moverse, metí su mi*mbro en mi boca arrancándole un gemido.

Mis manos se movían sobre su cuerpo mientras continuaba torturándolo. Kangin estaba a punto de perder el control y como pudo cambió su postura. Se subió encima de mí, pasó los brazos por debajo de mi cuerpo y se apoyó en los antebrazos sin aun p*netr*rme.

-Te amo Mirae- dijo mirándome a los ojos. -Te amo.
-Kangin- susurré acariciando su mejilla- Creo que siempre te he amado y siempre te amaré.
-Nunca le había dicho a una mujer que la amaba.
-¿Ni siquiera a Minhee?
-No, tal vez debí hacerlo, pero me sentía incapaz de decir esas palabras, orgulloso de no haberle entregado el corazón a nadie. La respeté como mi esposa y le tenía afecto porque era una buena mujer, pero nunca sentí por ella lo que siento por ti, me siento culpable por eso.
-No te sientas culpable, sobre el amor nadie puede mandar. Ella fue tu esposa, aunque no la amaste, estoy segura que tu trato hacia ella, fue gentil y respetuoso-Lo consolé.
-La parte racional me dice que no debo sentir culpa, pero el corazón aún me pesa, de haber sabido que moriría tan joven, se lo hubiese dicho, ella merecía mi amor, merecía ser feliz.

Lo abracé, besándolo muy suavemente, sin pasión, demostrando mi amor y tratando de calmar sus sentimientos.

-Quiero que te cases conmigo-dijo Kangin no porque estés embarazada. Quiero que te cases conmigo porque quiero que seas feliz conmigo, con mi hijo y en este hogar que será tuyo.
Youngmin te ama y te ve como su madre, a pesar de te encargas que no olvide a Minhee mostrándole las fotos de su mamá, en su vida ese papel lo has desempeñado tú, no sería el hijo que estamos criando.

Kangin tomaba mis labios con los suyos y enroscaba las piernas en torno a su cintura.

Kangin se dejó arrastrar por la pasión, los besos fueron largos profundos, era su turno de jugar un rato y así me lo susurró al oído, bajó por mi cuerpo, dejando estelas de besos haciéndome suspirar de pasión. Utilizó su lengua hasta que el extasis explotó para luego suavemente entrar en mí. El placer volvió a atravesar mi cuerpo, siguió empujando mientras yo aún sentía los ramalazos de placer, sentí el momento exacto en que él se abandonó a su propio éxtasis. Dejó caer su cuerpo sobre mí, mientras me susurraba cuanto me amaba.

Ya poco quien se opusiera a su unión, yo era suya, siempre había sido suya y el pasado ya no importaba porque ya no había vuelta atrás.

Sol de medianoche (4ta y última de la serie Amor en la mafia.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora