-With her is easy to love being in love-

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-Angie Snyder-

-Oh! Casi lo olvido, mandarinas.

-Mandarinas?

Me pregunta Aidy.

-Si, a mi abue le gusta ver películas y comer mandarinas, es una especie de tradición, una vez cuando éramos pequeños Ash y yo queríamos ver una película, no había palomitas, peor había mandarinas, desde ahí siempre comemos mandarinas cuando vemos películas.

-Que? Tú eras más pequeña, bonita?

Puso una falsa cara de sorpresa.

-Ja ja ja ere muy gracioso Aidan.

-No me digas así! Me siento regañado!

Dice para abrazarme por detrás, posando sus manos en mi cintura y su cabeza en mi hombro, hsjahsksj.

-Pero es tu nombre Aidan.

-Puedes llamarme como quieras pero no por mi nombre.

-Te puedo llamar un idiota?

-Me gusta más cuando me llamas sweetheart pero lo que te parezca mejor a ti boo.

Hsjskshekahkr me voy a hacer chiquita, mas.

El deposita un beso en mi mejilla e intento regresar el gesto, pero el no volteo su cara, quedamos muy cerca, demasiado, y me di cuenta que, mis intenciones no cambiaron, seguía queriendo besarlo, pero no en la mejilla, creo.

-Hey tortolitos! Saben que George nos espera en casa no? Si se van a besar háganlo rápido!

Yo solo me sonrojo ante el comentario de Ash y Aidan mueve su cabeza para dejarme un beso en mi cabeza.


-Mira lo que te traje!

-Insistí en traer palomitas pero-

-Gracias Angie! Y Aidan, ya te acostumbrarás a nuestras tradiciones.

-Ya lo veo.

Dijo Aidy con una sonrisa posando disimuladamente una de sus manos en mi cintura.

-Y que película veremos?

-Matilda, duh!

Dijimos Ash, George y yo como si fuese lo más obvio del mundo, que para nosotros, lo era.

Aidan soltó una risita por la sincronía de los tres y le pase una mandarina para comenzar a ver la película.

Cuando los padres de Matilda comienzan a gritarle y ella se encierra en su cuarto para leer y llorar Aidan me abraza, puedo escucharlo sollozar.

-Hey, que pasa lindo?

Le pregunto bajito y haciendo que su cara se esconda en mi cuello gracias a mi abrazo.

-Es que, Matilda me recuerda a ti, lamento mucho que tengas que pasar por esa mierda.

-Oh Aidy, descuida, a todos les recuerda a mi, pero ve la parte positiva, todos aquí nos amamos, somos nuestra familia cuando la propia nos abandonó, tuve mi final feliz.

Almas viejas...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora