sunoo

03

Bajé en dirección a la sala - Qué extraño, no veo a nadie-seguí mirando a mi alrededor hasta llegar al comedor y visualizar una pequeña nota en la mesa

Sunie, salimos padre y yo a desayunar, padre me dijo que no querías ir, pero de todas formas dejé un poco de comida en la mesa, con amor, hyung <3.

Decidí volver a dormir, tenía que aprovechar al máximo los últimos días de las vacaciones de verano, porque después no podría hacerlo. Me disponía a subir cuando escuche el timbre, quería ignorarlo pero parece ser que la persona tras la puerta no se rendiría tan fácilmente, así que la abrí, no me dió tiempo ni de reaccionar cuando ya tenía un par de brazos rodeando mi cintura.

-Sunie, te extrañé demasiado- murmuró con su nariz sobre la curvatura de mi cuello/si, como no/ murmuró mi lobo.
-¿Dijiste algo?- Pronunció confundido.
-N-no, también te extrañé ¿a que se debe tu visita? Heeseung no está por si querías verlo.
-Vine a verte a ti ¿que hacías?
-Planeba dormir -
-Qué te parece mejor si salimos a caminar-dijo animado.
-Uhm, bueno, solo deja me cambio-
-Asi estas hermoso, andando-Me llevó de la mano hasta salir de mi hogar.

Recorrimos las calles de Seúl, hasta visualizar una pequeña heladería.
-¿Quieres un helado? -
-eeh, yo- no sabía que reponder, la verdad si deseaba uno, pero últimamente he subido de peso y cada vez estoy más feo.
-Tomaré esos balbuceos como un si- dio un beso a mi cabeza y me dirigió hasta el lugar.

-Buenas tardes, bienvenidos a "iland-ice" ¿de que sabores serán sus helados?- dijo una amable chica.
-y-yo quiero de/
-seria uno de chocomenta y otro de chocolate- lo miré, como algo tan pequeño como el recordar mi sabor favorito causó tantas sensaciones en mi, soy estúpido al emocionarme por algo como esto, pero muy pocas personas saben cosas sobre mí.

Esperamos, hasta que la misma chica los trajo consigo.
-Listo, que los disfruten- nos regaló una linda sonrisa.
Salimos del lugar y caminamos hasta sentarnos en una banca.
-Está muy linda la tarde - dije con una sonrisa en mi rostro mientras observaba hacia el paisaje.
-Si, muy hermoso- Pronunció sunghoon, con la diferencia de que él no observaba el paisaje, sino algo mucho más hermoso.

Así pasó el resto de la tarde, entre cumplidos por parte de sunghoon y pequeños sonrojos por parte de un rojito sunoo.
-ya hoonie, la gente nos está viendo-dije algo tímido, pues desde hace unos 10 min sunghoon había comenzado a portarse un tanto más cariñoso de lo normal dejando múltiples besos en mi rostro.
-No importa pequeño, que vean lo mucho que te amo, mi pequeño sol-finalizó uniendo nuestras narices en un lindo y tierno beso esquimal.

Más tarde ya nos encontrábamos en la puerta de mi casa y ninguno tenía la intención de irse.
-Gracias por esta maravillosa tarde hoonie, la pasé muy bien - dije y posteriormente le di un beso en su mejilla, ante tal acto percibí como un ligero sonrojo aprecia en las mejillas de sunghoon.
-Lo mejor para mí pequeño y dulce sol-finalizó dando un beso cerca de mis labios. Se puso en marcha.

Esperé a que se desapareciera de mi vista para así entrar a mi casa, tan pronto entre fui recibido por múltiples gritos por parte de mi padre.

-¿Quién te dió permiso de salir y llegar a estas horas Kim Sunoo? - dijo con enojo
-y-yo b-bueno e-es que hoonie vino y me invitó a salir y como no estaban fui con el- dije, estaba temblando ante la atenta mirada de mi padre.
-Acaso no tienes teléfono, que ni un maldito mensaje pudiste enviar-
-Es que lo olvide-agache la mirada.
-Eres un-estaba a punto de golpearme pero una mano lo impidió;hyung.
-¿Qué crees que haces? No tiene nada de malo que haya salido a divertise, para que querías que estuviera en la casa si nosotros no estábamos - dijo con un tono de voz alto.
-Él no se manda solo, y mientras esté en mi casa respetará mis reglas, y no te metas que esta es discusión entre tu hermano y yo-
-Me meto porque es mi hermano y no voy a permitir que lo lastimes, vamos sunie-me tomo del brazo y me encaminó a las escaleras.
-Kim, te ordenó que vengas acá ahora mismo-
No sabía que hacer, todo me temblaba, no quería desobedecer a mi padre porque se que me irá peor, pero hyung no me soltaba.
-Kim Sunoo, te quiero aquí ahora mismo- dijo con su voz de mando, ante esto todo mi cuerpo se estremeció y mi lobo no tardó en bajar las orejas, trate de soltarme del agarre de heeseung, pero no me soltaba.
-H-hyung p-por favor sueltame, me irá peor si no voy, por favor - dije entre lágrimas.
-No sunoo, el no te hará nada mientras yo esté aquí, vamos-dicho esto me llevo arriba.
Di una última mirada a mi padre y estaba totalmente enfurecido, sabía que mañana se desquitaria por esto.

Ya arriba heeseung comenzó a hacerme preguntas, no tarde en ponerme nervioso.
-Sunie, sabes que puedes confiar en mí, dime ¿papá te a lastimado? - dijo con cierto tono de preocupación.

Si, como no tienes idea, por favor ayúdame a salir de este infierno, eso es lo que deseaba decir, pero en cambio dije algo completamente diferente - No hyung, para nada, el es muy bueno conmigo, ahorita es porque se enojo de que no le avise, y pues se preocupó, no tienes de que preocuparte- finalicé con una sonrisa, que a mi parecer fue más una mueca, pero Hee no logró notar eso.

-¿En serio pequeño? -
-Si, no tienes de qué preocuparte-
-Esta bien, te creeré- me dió un beso en la cabeza - bueno, antes de que te vayas a dormir cachorro, te quiero comentar que temprano me iré-

Dicho esto sentí como mi cuerpo comenzó a sentirse mal, muy mal, ¿Hyung me iba a abandonar? ¿Tan mal hermano soy que ya se cansó de mi? - ¿p-por qué? ¿Qué hice mal? Puedo cambiarlo hyung, pero por favor no te vayas, no me dejes-dije entre lágrimas mientras sujetaba la manga de su sudadera.
-pequeño no digas eso, no es por nada malo, además, que mal pudieras hacer tú. Me iré por la universidad, aproximadamente será una semana, ya que nos mostrarán las instalaciones que están en daegu, dije que no me cambiaría para allá, pero de todas formas me llevarán, ya sabes como son, pero no te preocupes volveré, ¿como podría llegar a ser capaz de dejar a mi lindo hermano solo? además, tu cumpleaños se acerca y no me permitiría no estar presente para tus 20 años, así que llegare lo más pronto que pueda- me dió un último abrazo.
-Esta bien hyung, te extrañaré demasiado - correspondi el abrazo.

A la mañana siguiente sabía que el verdadero infierno estaba por comenzar.