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Hace un año

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Hace un año.

Jaeyoon creyó haber encontrado al amor de su vida, su futuro esposo y padre de sus hijos. Ahí podemos comprobar hasta donde llega la imaginación del chino.

Park Sunghoon era un chico muy apuesto, estudiante de ingeniería y conocido por varios profesores, con buenas notas y un perfil limpio.

Se conocieron en la cafetería de la forma más cliché posible, Shim había derramado su bebida sobre la blanca camisa del más alto.

Desde aquel torpe encuentro comenzaron a lanzarse pequeñas miradas y sonrisas cada vez que se veían.

Luego pasaron a citas y pequeños roces accidentales, todo romántico y digno de ser película.

Los besos y los te quiero no tardaron en parecer. Y en menos de un año ambos decidieron comenzaron una relación.

Jaeyoon estaba muy feliz de tener alguien con quien pasar el resto del día, pues así lo planeaba.

Sus padres lo conocieron y le dieron su aprobación.

Todo romántico y casi imposible de creer. ¡Tenía al chico más lindo e inteligente entre sus brazos! Simplemente mágico.

Sunghoon siempre fue alguien de “cuidar su perfil” cada vez que Shim corría a abrazarlo, se separaba de la forma más disimulada posible.

Al inicio como cualquier relación iba muy bien. Los días y meses transcurrieron junto a ello su relación, que en ves de crecer se iba marchitando.

Jaeyoon noto la indiferencia que Sunghoon tenía cada vez que se acercaba para abrazarlo y besarlo. ¿Porqué hacía eso? ¿No lo amaba?

Se corrió el rumor de que un alumno y profesora tenían encuentros amorosos luego de clases o medio de ellas.

Meses después se filtró una foto de la maestra y alumno en plena acto erótico, aquella fotografía se difundió por todas las redes sociales asociadas con la universidad.

Shim se dio cuenta que aquel chico se parecía mucho a Park ¿Qué si es el? Pff, claro que no, ellos eran pareja y no sería capaz de hacer algo así.

En ese tiempo de controversia universitaria llegó un nuevo alumno. Nishimura Riki estudiante de arquitectura, carrera la cual el también estudiaba.

Al inicio noto como el más alto lo miraba extraño, pues no era nada normal ver a cierto chino sobre la mesa riendo de forma escandalosa.

El chino fue el que dio el primer paso para entablar una conversación.

—Eres muy gruñón, si sigues así te convertirás en un ogro muy malo.

—Y tu eres tan pegajoso que pareces un chicle.

Se convirtieron en amigos, unidos, que caminaban juntos a cualquier lado.

Sunghoon no estaba de acuerdo con esas cosas, solo quería a Jaeyoon para el, no quería que nadie arruine su plan.

Por que si, era el que se acostaba con la maestra de química.

Pero hasta ahora nadie sospechaba y para no levantar falsas acusaciones en su contra ¿Porque no meterse con el niño bonito de arquitectura?

Amenazó a Riki con el “Si no te alejas de mi novio te golpearé”. Algunos dirían que está bien querer proteger a su pareja pero este no es el caso.

Nishimura no hizo caso y con más razón se apegó al chino.

—Abre los ojos Jaeyoon, el no te ama.

Pero Shim siempre decía que si y de paso todo su futuro planeado.

Veintidós de noviembre ; decidió hacer una reunión con sus conocidos, amigos y el principal, su novio.

Más este no se presentó con la excusa de que tenía muchas tareas que hacer, vaya excusa que se inventó para ir a coger con la maestra.

Esa misma noche, cuando Nishimura y Shim decidieron hacer una pijamada, llegó un vídeo al teléfono del mayor.

Un vídeo que le partió el corazón, que lo destrozó emocionalmente.

Solo recuerda aquellos brazos que lo abrazaron toda la noche, aquella persona que soportó todos sus benditos berrinches.

Park trató de buscar otra excusa para esto pero antes que dijera algo ;

— Terminamos — Pronunció Shim.

Sunghoon dijo que era imaginación suya, que era falso y que todo eso se lo estaba inventando, pero en el vídeo se veía claramente que era el.

— ¿Sabes qué? Ni me importa, eres un meloso iluso, creaste una vida conmigo llena de tu mierda, no sé cómo te aguanté. Porque yo odio a los melosos.

Y así es como terminó su relación de un año y cuatro meses. Todo se fue a la basura.

Volvió a llorar en los brazos de su mejor amigo y posiblemente lo haya besado también.

Decidió darse su tiempo a solas patada poder estar tranquilo emocionalmente.

El como llegó a enamorarse de Riki... Esa era otra historia.

 Esa era otra historia

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𝐕𝐄𝐑𝐘 𝐒𝐓𝐈𝐂𝐊𝐘 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora