El Deseo Del Dragón.

013.

137 d.c

Vaegon se encontraba en un carruaje camino a la fortaleza Roja, acompañado por su hermana y primos.

La razón, Lord Corlys había sido herido en batalla y por esto Vaemond Velaryon estaba poniendo en duda la sucesión de Luke como el próximo señor de las mareas.

- Ni siquiera sabes que tan grave estás el abuelo y ese hombre ya quiere tomar su lugar- mencionó Rhaena.

- Hay personas que no tiene escrúpulos y solo viven por su ambición- respondió Vaegon con algo de molestia.

- Solo espero que todo esto salga bien- hablo Luke- la última vez que la familia se reunió no fue muy bonito- se notaba su preocupación.

- No pasará nada malo, tranquilo Luke- lo calmó Jace.

El carruaje se detuvo y pudieron escuchar como anunciaron a sus padres. Bajaron del transporte quedando perplejos.

-Una cálida bienvenida- mencionó Daemon con disgusto.

Se adentraron al castillo y pudieron notar lo mucho que había cambiado en su ausencia. Los emblemas de la caza Targaryen fueron cambiados por símbolos religiosos. El lugar tenía un aspecto sombrío.

- Me parece que está ya no es la casa Targaryen, ahora pertenece a los siete- dijo Vaegon con algo de diversión, intentando liberar un poco la tensión del ambiente.

- Es claro, que este ya no es nuestro hogar- respondió Rhaenyra con un toque de tristeza.

- Nosotros iremos a ver a Viserys- dijo Daemon después de un rato de estar caminando.

- Son libre de recorrer el castillo pero quiero que se comporten- advirtió Rhaenyra.

Se fueron dejando a los menores solos.

- Yo quiero ir a la biblioteca- dijo la única mujer presente- Vamos Joffrey- lo tomo de la mano y ambos se alejaron.

-Supongo que estamos solos o ¿tu también vas a irte primo?- cuestionó Jace.

- Prefiero acompañarlos.

Siguieron caminando por los largos pasillos del castillo hasta que llegaron al patio donde solían entrenar. Muchas miradas se posaron sobre ellos.

- Todos nos miran- informó Luke con incomodidad.

- No les prestes atención- dijo Jace mientras jugaba con una daga.

- Sabes a lo que me refiero, todos creen que no merezco ser el señor de las mareas. Si me pareciera más a sir Laenor y no sir Harwin Strong, mi sucesión no estaría en duda.

Vaegon lo tomó por el mento para que lo mirara.

- Eres un Targaryen, haces parte de la familia Real. Lo que estas personas opinen no tiene importancia- ambos sonrieron.

Se escuchó el alboroto de la gente y los jóvenes se acercaron para ver lo que sucedía. Se encontraron con un combate, dos guerreros muy hábiles. Pero Vaegon no pudo apartar la mirada del platinado sabía bien quien era, aunque ya casi no quedaba rastro de aquel niño. Aemond se había convertido en un hombre alto y fornido con las facciones bien definidas.

Con mucha habilidad el rubio terminó ganado la pelea.

- Excelente príncipe, está listo para los torneos.

- No me interesan esas tonterías. Sobrinos- poso su mirada en los menores para después dejarla sobre el mayor de forma intensa- Primo. ¿ viene a entrar?

No pudieren responder la llegada de Vaemond Velaryon se robó toda la atención, dándole a Jace y Luke la oportunidad de irse sin ser vistos por su tío.