capítulo 8

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Los rayos del sol apenas y comenzaban a alumbrar al campamento cuando despertaron a todas las niñas para dar un largo paseo por el bosque y por supuesto que entre esas niñas estaban la linda y dulce Nirin y la refinada y vengativa Nini.

Todas caminaban como soldados y adelante junto a las guia estaban caminando con sus maletas la pelinegra y la castaña, la primera caminaba lento por el peso de sus dos grandes maletas y su pequeño bolso, mientras la castaña cargaba su gran maleta naranja y su pequeña mochila, ninguna se había dirigido la palabra durante todo el recorrido, en serio que el ambiente era tenso, es decir era normal que la pelinegra no hablara pues no era la persona más sociable del mundo pero la castaña que podía hacerse amiga hasta de una cebolla tampoco se había dignado a hacer el más mínimo sonido o estaba apenada o muy molesta o simplemente no sabía que decir aunque cualquiera que fuese la respuesta igual todas eran malas.

Las demás implicadas también caminaban en silencio, después de todo ninguna quería el castigo que había sido impuesto para las dos niñas idénticas.

Bien niñas y niños pueden regresar a sus actividades - dijo la pelirroja por el altavoz, aún estaba molesta así que ni se inmuto por el griterío que armaron los niños, simplemente bajó su vista y miró fijamente a las únicas que no se fueron, la adorable niña de colitas y la seria niña de una sola coleta, suspiró, ambas eran un desastre viviente en todos los sentidos - y ustedes dos...

Ambas se miraron y luego volvieron a ver a la pelirroja que junto a la rubia las miraban fulminantemente.

A la cabaña de aislamiento - gritó mientras cruzaba los brazos y la rubia con un gracioso movimiento señalaba hacia una cabañita alejada de todo y todos que se veía deteriorada y en muy malas condiciones, sería un largo campamento de eso no cabía duda al respecto.

Las paredes de madera se veían antiguas, por Dios!! quien sabe que insectos estarían viviendo ahi, el techo tenía algunos agujeros que seguro eran goteras, estaba vacio, apenas y tenía dos armarios y dos camas, pero a parte de eso no se veía muy mal, tenía ventanas y luz suponían que era lo que ellas consideraban necesario.

La castaña no dejaba de moverse en la cama y quejarse, no le gustaba la cabaña, era tan fría que sentía que los huesos se le congelaban, se movía y se movía sin dejar de quejarse mientras sentía para su molestia que la luz aún estaba prendida, cerró con fuerza los ojos mientras aferraba a su cuerpo a su linda perrita de peluche, dormía con ella desde siempre, su bisabuela la había hecho para ella y la idea de desecharla le daba horror.

No me gusta nada - gimoteó mientras se tapaba con la sábana

Aisshhhh - dijo la pelinegra

La castaña se destapó y vio como la pelinegra estaba sentada escribiendo algo en un cuaderno, eso la enfureció más y sin pensarlo más apagó la luz de un rápido movimiento.

Aissshhh "respira ninii cuenta hasta 10" - se dijo mientras prendía la luz y miraba fríamente a la castaña, la odiaba, la detestaba como nunca lo había echo con alguien.

La castaña se destapó y la miró molesta mientras apagaba de nuevo la luz

La pelinegra volvió a bufar prendiéndola

La castaña la volvió a apagar

PRENDE... (El tic de la pelinegra se avecina)

APAGA (la castaña disfrutando viéndo enfurecer a la pelinegra)

PRENDE (el tic aparece en el ojo derecho)

APAGA (risa malévola marca Nirin)

PRENDE (venita palpitante en la cien)

Coincidencia •Off-Gun•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora