Capítulo 21

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Odio esto, odio sentirme tan a la defensiva incluso de mí mismo, pensar en posibles opciones aunque claramente era la más irreal.
Esto no se trataba de clones, era obvio, Alison tenía una hermana gemela. De la cuál yo sabía ¿Por qué no lo había comentado? Porque estaba muerta o eso creía.

Mí vida se había puesto rara y sin sentido, solo quería tener a Scott entre mis brazos e irnos, odio esto, odio está impotencia.

Odio éste miedo miedo constante de que él me deje, quizás es la razón por la cuál hasta ahora no le haya dicho más que te amo, quizás es la razón por la cuál, no he profundizado en mis sentimientos para confesarme.

Verlo ahí completamente recuperado me tenía en completa paz, verlo ahí junto a Alison, la cuál justamente había comentado que había desaparecido cuando Gerard había llegado la primera vez, me asustaba.
Me asustaba mucho, habíamos estado conviviendo con una Alison falsa, y me dolía ver como ella lo abrazaba fuerte a él, cómo decía que lo extrañaba y que lo amaba, quería gritarle que se apartara que ahora Scott no le debía nada y que era mí esposo.

Pero no podía, porque entendía y comprendía que para ella Scott era su novio todavía, pero los años habían pasado y ella se veía diferente, pero feliz de estar allí. Su papá, Chris Argent miraba a sus hijas y no lo podía creer

¿Por qué había mentido? ¿Por qué lo hizo por tanto tiempo?

Me daba tan mala espina, sentía que algo se escapaba.

Mire a Jackson y Ethan, los dos estaban parados sin entender. ¿Debía mentir? Bueno ya lo había hecho todo esté tiempo, pero... ¿estaba bien ocultárselo a Alison? No.

Mire todos los papeles en la mesa, me levanté al baño y sacudí los pantalones, cuando sentí algo dentro de el bolsillo, busque dentro de esté encontrando un papel y comencé a desdoblar lo era una carta para mí.

Buenas noches, joven Mieczyslaw para éste momento ya debes de estar en la clínica veterinaria del señor Deaton, ya escapaste, ya salvaste a tu amiga y ya descubriste que falta una pieza por encajar.
Me complace informarle que todo esto fue planeado de antemano, todo, desde tu casamiento  con tu mejor amigo, hasta que estuvieras en el baño ahora leyendo.
A veces las cosas deben planearse con anticipación.
Me recuerdas Stiles solía enviarte cartas hace unos años, solía decirte lo hermosa que era tu piel blanca, lo bonito que era dormir contigo.
Y solía contarte lo que tu papá te hacía por las noches mientras dormías.
¿Me olvidaste? Es una tristeza, pero tranquilo que yo se dónde todo está escondido, luchaste muchísimo desde el inicio de la primera carta para saber quiera yo y lo conseguiste.
No soy quien a secuestrado a tu amiga, jamás haría algo como eso.
Pero soy quien te había protegido a través de cartas que luego se te fueron privadas.
Es hora de empezar con lo más horrible Stiles, entonces solo así sabrás que no quiero hacerte daño, quiero salvarte para que al fin puedas estar en paz tu y tu manada, tu y tu esposo; por cierto felicitaciones por eso.

Tengo una tarea para ti: dirígete a la salida del fondo de la veterinaria y toma la caja que está nada más tomar.

Ahí dentro encontrarás la clase de monstruo con la que has convivido por tantos años.

Se fuerte niño.

Tomé el pomo de la puerta con susto y me dirigí hacía el fondo de la veterinaria, sentía como si tuviera un deja vu

, pase por al lado de Derek, Chris y Deaton, notando como los tres me miraban.

Mire la puerta que estaba en el centro de la pared, estaba nervioso. Por alguna razón sentía que todo esto era completamente real y no una broma.

Tomé el pomo y abrí la puerta, la caja estaba allí a mis pies, Jackson se acercó mirando la caja

¿Qué es eso? – ni siquiera tuve el valor de levantarla, simplemente me senté en el piso y la abrí.

Eran fotos.
Fotos mías.
Fotos de mí papá.
Fotos del papá de Scott.
Fotos en la que yo estaba desnudo.
Fotos en las que los dos hombres estaban desnudos.

Fotos en las que tenía 5 años
8 años.
12 años.
15 años.
17 años.
Una foto que fue tomada recientemente.
Una foto que fue tomada el último día que dormí en casa.

Mí papá había estado abusando de mí, por años.

Cerré la caja y note la respiración de  Jackson, él estaba viendo todavía hacía la caja cerrada. La tome y me adentré a la clínica, los agentes habían vuelto y comenzaron a hablar de lo que ahora debíamos hacer, mí papá entro un rato después y se paró a un lado mío.

Lo único que podía pensar era en las ganas que tenía de morirme justo ahora.

oye hijo ¿Quieres que sostenga esa caja? – mi cuerpo se tenso y solo negué saliendo fuera de la veterinaria.

– ¿Por qué...?

New York - SCILESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora