Wishes
Ya eran las 11:59 PM y no había rastro de la rubia, eso empezó a preocupar a la Addams. Estaba decidida a buscarla, al igual que Dedos se paró, este se puso en el hombro de la chica.
Y cuando iban a salir a buscarla está abrió la puerta de golpe golpeando en la nariz a la pelinegra. —¡Mierda lo siento! — Se disculpó la rubia cerrando la puerta y yendo a ver si estaba bien la pecosa.
"Debo admitir que eso dolió.." Pensó la pelinegra sobándose la nariz.
—Perdón.. Dios, se que te dije que no te iba a molestar ¡Pero esto es importante! — Explico la rubia quitándose el suéter que llevaba.
—Será la última que te escucho, Sinclair. — Dijo con molestia por lo de su nariz.
Enid sonrió y fue a sentarse en la cama de la pecosa. — Bien, verás.. Ajax me dejó plantada. — Dijo dando un suspiro pesado.
Merlina se sentó en su silla y se quedó sorprendida por lo dicho, se sintió enojada por lo que le hizo el chico a la rubia. —Al menos no te rompió el corazón, sabes lo que te dije. — Respondió la pelinegra sonriendo un poco por tener una imagen del chico muerto.
—Esa sonrisa lo dice todo, Mer.. — Dijo un tanto desanimada la rubia acostándose en la cama.
—Salte de mi cama, Sinclair. — Dijo levantnadose para ir a acostarse.
Enid se negó y se quitó los zapatos para acostarse bien. —¿Puedo dormir contigo hoy? Prometo dejar de hablarte mañana.. — Dijo sonriendo de manera forzada.
La pelinegra no podía evitar sentirse mal por la más alta. —Sin.. — No termino la frase porque la rubia la termino por ella.
—Sin contacto físico, entiendo... — Dijo haciéndose a un lado.
Merlina apago las luces y se acostó al lado de la rubia. Aún podía sentir el roce de sus manos, la cama era muy pequeña para las dos. —Tus manos están frías. — Hablo la rubia mientras se volteaba a ver a la pecosa.
—Y las tuyas están calientes. — Respondió viéndola igual.
La rubia sonrió y se acercó a la pecosa. —Gracias por todo, Mer. — Dijo en un susurro para luego besar a la pelinegra.
Merlina se sorprendió por eso y trato de alejarse, pero no podía hacer tal cosa. Poco a poco sintió como la rubia se subía encima de ella y seguía besándola. —E..Enid, espera... — Hablo la pecosa entre los besos.
Enid se separó con los ojos cristalizados y con un rubor en su rostro. —¿No soy lo suficientemente buena para el? — Pregunto la rubia escondiéndose en el cuello de la pecosa.
La pelinegra trato de procesar lo que pasó.. Enid la beso, se veía tan linda con la luz de la luna y lo otro fue que aún pensaba en el chico, ¿Será que solo la usaba para olvidarlo?
Aún así con un nudo en la garganta trato de hablar. —El.. El simplemente no te merece, Enid. — Respondió y con la mano temblando acaricio la cabeza de la rubia.
La rubia alzó la cabeza y miro a la pelinegra fijamente. —¿Tu crees? — Pregunto un tanto desanimada.
—Si yo fuera el.. yo mataría por ti, me moría por ti y no te dejaría plantada, pero tú sabes que no me gustan esas cosas. — Dijo tratando de sonar asqueada, pero ya no sé sentía así. Quería tener algo con la rubia.
Enid se rio a lo bajo por lo dicho.
—Realmente tengo que dejar de molestarte... Algún día me odiaras. — Dijo la rubia mientras sonreía.
—Ya te odio, Sinclair. — Expreso suavizando su rostro.
—Yo también te odio. — Dijo volviendo a besarla, pero este bese tenía más sentimientos que cualquier otra cosa.
Merlina no se negó al beso, no le importaba ser usada para los fetiches de la rubia, incluso quería ser usada para los deseos más oscuros de esta.
La pelinegra agarro de la cintura a Enid y la acercó más, mientras que la más alta agarro sus mejillas. Sus labios se movía al mismo ritmo y la luz de la luna lo hacía aún más bello.
Se siguieron besando, y cuando se separaron está vez fue la rubia quien empezó a besar su cuello, dejando algunas marcas en este y recibiendo algunos gemidos ahogados de la contraria.
Y pararon ahí, no iban a llegar más lejos. No es lo que hacen unas amigas o compañeras de cuarto, amigas y compañeras de cuarto, solo son eso. No son amantes.
—Enid.. Usame para tus deseos más deseados. Quiero ser esa persona que te haga sentir bien. — Hablo la pecosa en su oído.
Enid sintió un escalofrío recorrer su cuerpo y simplemente asintió sonrojada. —¿No se supone que tengo que dejar de molestarte? — Pregunto riéndose.
Merlina se avergonzó por lo dicho.
—No hagas que me arrepienta. — Dijo empujando a la rubia y dándole la espalda.
—Lo siento, lo siento. — Pidió perdón la rubia y al ver que la pelinegra la ignoraba se acerco, y le susurro en el oído.
—Lo tomaré, tengo un deseo que quiero intentar, es algo que me hará sentir en el cielo. — Dijo de manera juguetona.
La pelinegra se sonrojo y se volteo rápidamente. —Un peluche. — Dijo la rubia sonriendo de oreja a oreja.
La mente de la pecosa era demasiado sucia y eso le gustaba, aún tenía su antigua mente. —Ya duérmete, Sinclair o quieres que yo te lleve a dormir? — Dijo la pelinegra algo molesta.
—Que mala.. — Dijo la rubia acomodándose.
"Y así me quieres.." Pensó la pelinegra sonriendo un poco.
Realmente la rubia la estaba cambiando. Aunque seguía teniendo la misma mente perversa y es un Addams. No pueden cambiar eso, no pueden cambiar que le gusta matar, no pueden cambiar el echo que le guste la sangre.
Sigue siendo la misma aún.
"Mi deseo es poder estar contigo siempre.." Pensó la rubia mirando a la pelinegra que ya se estaba dormida.
"Wishes" finished chapter
Estoy viendo si poner a una Enid que entre en celo, pero eso ya sería muy omegaverse ¿No? 😿
—Matxz
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Feelings -WenClair-
FanfictionMerlina se transfirió a una nueva escuela, pero está era diferente a las demás. Era mágica.. por así decirlo, estando en su habitación se encontró con su compañera de cuarto, Enid Sinclair. Eran polos opuestos, pero los polos opuestos se atraen ¿no...
