Quiero el P#TO divorcio✔

Capítulo Final

Era sábado y recién nos levantábamos, pero no tenía ganas de salir de la cama, así que solo me corrí contra Tomás y recosté mi cabeza en su pecho, para que se quede conmigo. Él solo movió su brazo, para abrazarme y me besó la cabeza.

—¿Qué pasa? —Preguntó.

—No quiero salir de la cama, así que te quedas acá conmigo de rehén.

—¿Ni siquiera puedo ir al baño?

—No.

—¿Y si hago el desayuno y nos lo traigo a la cama?

Lo pensé y era buena idea... aunque seguía queriendo que se quede conmigo...

—No sé. —Respondí.

—Mi brujita anda muy cariñosa estos días ¿No quiere dejar que su esposo se le escape?

—Tal vez.

—No te preocupes, me voy unos minutos y vuelvo ¿Querés algo con el desayuno?

—... Quiero tomar... una cerveza.

—... Mejor no, Ele, ya sabes que no quiero que tomes.

—¿Vamos a volver a tener esta conversación? No hay bebé.

—... ¿Cuándo te hiciste el último test?

—Hace un poco más de un mes .

—Voy a comprar uno, si sale negativo nos ponemos en pedo.

—¿Puedo tener la cerveza antes?

—No, Ele. La cerveza después.

—Es negativo, hace un año y medio es negativo.

Sé que tal es medio horrible, pero hay que afrontar la verdad y no, no quiero que mi esposo vea otro test negativo, porque sé que le pone mal. Sé que espera con ansias el positivo... No creo que haya suficientes palabras, para explicar el rostro de mi esposo cuando ve el test negativo en sus manos... Algunas veces, parece que el brillo de sus ojos se extinguiera... Otras veces parece que el brillo se acrecienta tanto que va a llorar...

Todavía recuerdo que los primeros meses él no estaba tan seguro de si iba a poder ser un buen padre o si tal vez no era mejor esperar un año mas... pero de algún modo lo convencí y ahora me arrepiento...

—Tal vez no me creas... pero siento que esta no va a ser negativa... Hay algo en mi que me lo dice.

Se levantó a vestirse y lo miré mientras se ponía un jean y sus zapatillas. Admirando las pequeñas cosas que hace, como ponerse mis medias porque le gustan más o hacerle el doble nudo a sus cordones... Me agarró para darme un beso en los labios y salió de la habitación, dejándome sola.

Me senté y solo esperé hasta que volvió con una bolsa llena de medialunas, café y la cajita del test de embarazo. Me la tendió y lo miré indecisa, pero fui al baño, con mi celular.

Leí todo, aunque ya creo que me lo sé de memoria. Hice pis donde está indicado y puse el cronometro.

Tomás pasó al baño y se sentó en el bidet a esperar conmigo.

—Sea lo que sea, está bien ¿Si, Ele?

—... Si. —Contesté y le pasé el celular con el test, para poder limpiarme y lavarme las manos.

Le puse la tapa al inodoro y volví a sentarme a su lado, hasta que se escuchó el sonido de la alarma, que Tomás se encargó de apagar.

Él miró el test y no decía nada, así que se lo saqué de la mano y lo miré yo...