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Mira en silencio la habitación de invitados, miraba al gato dormido en su cama, le gustaba, era adorable, aunque al final escuchaba de fondo a sus hijos hablar seriamente con el ucrariano y sovietico.

En si, sentía su cabeza llena de recuerdo en un breve momento pensó algo serio sobre algo, un recuerdo que apareció en su mente.

...

—Reich, ¿cuantos años tienes?

—Tengo 14 años

—Oh, estas en la edad de casarte, ¿Te casarias conmigo Reich?

—Tengo..tengo que preguntarle a mi hermano señor Israel, yo....oh, la Biblia, dijiste que están mal los matrimonios de ambos géneros, estaríamos pecando, no...no quiero irme al infierno... -sus manos se movían inquieta, se sentía incómodo y más al estar sentado en las piernas de aquel hombre.

—Oh, pero...tu aún eres un niño, si nos casamos y tenemos nuestra Luna de miel te volverás es una bonita niña -levanto levemente la camisa del menor para posar sus manos sobre el estómago de este tocaba su manos hiba desde el pequeño pecho asta la estrella pierna del joven que temblaba ante aquello. —Te compre un bonito vestido blanco, quiero que luego te lo pruebes, de seguro te veras muy linda, digo lindo

Sonrió de forma dulce, mientras seguía tocando el estómago del pequeño, apretaba y pellisqueaba la suaves y delgada piel, lastimando de forma inconsciente al infante.

Reich no decía nada, no quería otro golpe por portarse mal, el moretón en su ojo izquierdo le dolía, claro que ese golpe no tenía relación con los toques de cariño, al menos eso llamaba en mayor.

El golpe fue más a preguntar sobre la existencia de Dios, sobre Jesús, sobre las otras religiones que decían otras cosas, iso tantas preguntas que mereció el golpe, siendo también regañado.

El señor Israel le dijo que si no obedecía ya no dejaría que enviará cartas a su hermano, incluso si su hermano no respondía sus cartas le gustaba mandar las, lo más probable estaría ocupado en el trabajo.

...

Sentía náuseas, un ardor en su estómago, sentía ese extraño ardor que hiba de su pecho asta su entrepierna.

¿Por que recordó eso?

No tenía idea, pero simplemente cubrió su boca con sus manos evitando gritar, mientras trataba de calmarse lentamente.

...

—¿Que es el sexo?

—Oh, es algo cuando dos personas unen su cuerpo tornado lo uno mismo, ¿Quieres tener sexo? -mostró una suave sonrisa mientras dejaba el cuchillo a un lado del mesón.

—No, suena raro, ¿como dos cuerpos se unen en uno?, eso es imposible -comentó, escucho la suave risa de su cuidador

—Tienes 15 años, podemos intentarlo, te recuerdo que tu hermano si dejó que nos casemos, podemos tener un lindo bebé

—¿Bebe?, pero tenemos a Alan y Ale, no existiera bebés más lindo que ellos

Esto era extraño, apenas se casaron, no le gustaba la idea, además era raro que su hermano si respondía la carta donde hablaba del matrimonio, pero confiaba en su hermano, aunque le hubiera gustaba que estuviera presente en su pequeña boda.

Camino con su esposo asta la Sala, donde ambos se sentaron sus labios fueron tomados de manera sorpresiva en un beso, para luego separase con hilos de saliva que los unía, se alejó y evitó limpiarse la boca, no quería enfadar a su esposo.

ᦗ𝕴𝖓𝖈𝖚𝖇𝖔ᦗDonde viven las historias. Descúbrelo ahora