Lee el nombre escrito una y otra vez, pues sabe perfectamente quién es Deku, con la respiración agitada y el corazón retumbando en sus oídos, corre escaleras arriba, sin preocuparse por apagar la luz ni cerrar la puerta.
Va hacia el teléfono, y rápidamente marca un número telefónico que sabe prácticamente de memoria, más que nada habla con él varias veces a la semana, de hecho, diría que conoce muy bien a ese tal Deku, pues había estado hablando con él hacia escasos minutos. Espera impacientemente hasta que nota que por fin la llamada es respondida.
-¡Eijiro! ¿Que fue lo que pasó? Al final no me has dicho si estás disponible este viernes.-Habla Midoriya desde el otro lado, pero apenas presta atención a sus palabras, está inmerso en su propio mundo.
-¿Tú lo conocías Izuku?
Su voz se quiebra durante el camino, pero no es para menos. Está muy asustado, siente que está alucinando o que está perdiendo la cabeza, tal vez todo está en su imaginación y en realidad no está pasando nada, ojalá esa fuera la realidad y no un simple deseo que él tiene.
-¿De que hablas Ei? ¿Estás bien? Puedo ir a tu casa y me puedes contar que es lo que te ocurre.
-¡No!-Su voz suena más fuerte de lo que él hubiera querido, pero la alteración domina sus cuerdas vocales.-Necesito saber si lo conocías, Izuku, ¿tú conocías a Katsuki? Por favor dime la verdad, necesito saberlo si no siento que moriré.
-Ei, cálmate, ¿si? Entiendo que el tema de Katsuki sigue siendo un tema tabú y doloroso para ti pero tienes que tranquilizarte, ¿está bien? Tómate una infusión para calmar tus nervios y más tarde hablaremos.-Deku está esquivando su pregunta, sabe que Izuku quiere terminar la llamada de una vez por todas pero Eijiro es más rápido.
-¡Joder Izuku! Estaré más tranquilo cuándo me cuentes la verdad, sólo así podré tranquilizarme, no tomando una estúpida infusión.
Silencio. Desesperante para él la forma en la que últimamente todo lo que recibe cómo respuesta es el silencio. Izuku sabe algo, y tiene que ser algo malo para no querer decírselo, se supone que ellos tienen mucha confianza, pero ahora mismo sólo parecen un chico demasiado histérico y el psicólogo que trata de ayudarlo. Tras unos segundos, por fin Izuku se digna a hablar.
-La verdad, sí lo conocía, demasiado de hecho.-Admite por fin, y Kirishima suelta un suspiro, en realidad lo esperaba.
-¿De que lo conocías? Izuku, necesito que me cuentes todo lo que sepas sobre él, por favor.
-Bueno, estoy convencido de que todo lo que yo sepa tú también lo sabrás, más que nada eras la persona más cercana a él, tú sabrás el doble de cosas que yo, pero si realmente quieres saberlo...
-Claro que quiero saberlo, absolutamente todo. Necesito saber todo.
-Está bien. Te contaré todo, tan sólo promete que esto quedará entre nosotros.
-Sí, sí, te prometo que no se lo contaré a nadie. Ahora, habla.
-Conocí a Katsuki hace muchos años, cuándo éramos bastante pequeños, unos cuántos años antes de que tú lo conocieras, nuestras madres eran vecinas. El caso es que con el tiempo, aproximadamente cuándo ingresamos en la secundaria él cambió drásticamente su carácter, siendo tal y como tú lo conociste.-Izuku hace una corta pausa antes de continuar con su relato.- Él me trataba mal y yo le tenía un rencor inmenso, y al obtener un puesto de trabajo en el mismo lugar que él tengo que admitir que estaba pensando seriamente cómo vengarme de él por los años de maltrato por su parte.
-¿Eso es todo?-Pregunta, pues siente que hay algo que falta, algo que Midoriya ha decidido no mencionar, y siente que es algo crucial.
-Sí, eso es todo. Con vengarme de él no me refiero a asesinarlo ni nada por el estilo, tan sólo hacerlo probar un poco de su propia medicina. Eijiro, sé que tu cabeza debe estar hecha un lío ahora mismo, pero no quiero quedar como el malo de la historia, o al menos no ante tus ojos.
Ni siquiera responde, tan sólo cuelga el teléfono, dejando zanjada así la conversación. Izuku tiene razón, su cabeza es un terremoto en este instante, más que nada porque sabe que un fantasma no le habría hecho bajar a su oscuro, polvoriento y deprimente sótano para que Izuku le contara cómo Katsuki lo trató mal en sus años de secundaria. No puede ser algo tan simple como eso, tiene que ser algo más grande y fuerte. Falta una gran parte de la historia por conocer, él lo sabe, Izuku lo sabe.
Está dispuesto a descubrir todas las lagunas, y atar todos los cabos sueltos.Se va a trabajar, por suerte no hay muchos clientes y puede estar sin preocuparse por ellos durante un rato. Está intranquilo, su mente no ha dejado de pensar, una y otra vez, dando vueltas sin cesar. Sabe que eso no ha hecho más que empezar, cómo también sabe muy bien que hay más cosas sospechosas en la muerte de Katsuki de las que creía en un principio. Tal vez lo más sensato sería llamar a la policía y pedirles que investiguen, pero, ¿cómo lo explicaría? Si relata que ha vivido experiencias paranormales quedaría cómo un estúpido y nadie le creería.
La policía tiene cosas más importantes que hacer, eso sería lo que le diría la gente.Pero la familia Bakugou merece saber que fue lo que ocurrió con su hijo.
Ahora que piensa en los padres de su difunto novio, no ha hecho su llamada mensual a los padres de Katsuki, tal vez ellos le creerían, tal vez la policía los vería con más credibilidad, al fin y al cabo serían tres personas, no sólo una.-¡Eijiro!-El repentino llamado lo sobresalta, y lo saca de sus pensamientos. Su compañera Mina lo mira algo enojada, probablemente porque han entrado más clientes y él sigue en su mundo.
-¡Lo siento, en seguida los atiendo!
-Oye, Ei, ¿Te encuentras bien? Tienes mala cara.
-Sí, estoy perfecto.-Dice algo brusco y rápido, cómo si estuviera apurado.
Se levanta de forma rápida de la silla y agarra un bolígrafo y una pequeña libreta y a paso rápido va hacia la mesa para atender a los nuevos clientes. Decide que durante su jornada laboral no pensara demasiado en el tema, charlar con sus compañeros y atender a los clientes, enfocándose tan sólo en los pedidos le vendría bien para distraerse.
Estuve planificando el final de esta historia y me di cuenta de que no puedo hacer todo lo que quiero en siete partes o menos, por lo que he decidido hacer más capítulos, no sé cuántos, probablemente unos diez o así, es que aún hay historia para rato. Bueno tan solo quería decir eso, espero hayan disfrutado del capítulo.
Adiós <333
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Your Ghost
FanfictionTras el fallecimiento de Katsuki hace un año, Kirishima comienza a experimentar varias cosas paranormales, cree que algún fantasma está tratando de decirle algo, y quiere saber quién y que es lo que quiere.