Baekhyun quiere a Chanyeol más de lo que se quiere a sí mismo, pero nunca lo ha dicho en voz alta.
Chanyeol quiere a Baekhyun más a su colección de cartas deportivas, su posesión más preciada, él sí lo ha dicho en voz alta, pero Baek no le cree.
De...
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-Tú madre dijo que estabas en la competencia deportiva, ¿cómo ha ido eso?- Como el padre de Chanyeol trabajaba lejos, básicamente solo podía llamarlo cuando había tiempo, lo que en realidad no era mucho, él nunca había sido un mal padre y Chanyeol tampoco lo quería tachar de ausente cuando se daba el tiempo de llamarlo a pesar de estar muy ocupado.
-Me fue genial, todo el mundo estaba feliz porque gané en todo lo partícipe, entonces mi clase ganó algo de dinero y un día libre, todos fuimos a comer.- le contó Chanyeol, sentado frente a su computadora mientras veía a su padre, que parecía haber llegado de una junta recientemente, y estaba sin corbata, y se veía agotado, al menos su madre le ayudaba también a ponerlo al día con un par de cosas.
-¿Enserio? Vaya, seguro que fue un gran suceso.- le dijo su padre y Chanyeol asintió muy emocionado.
-Claro, ¿qué esperabas de tú hijo? Yo...-
-Aguarda un segundo.- Su padre le hizo una seña para que se quedará callado un segundo, apagó su micrófono y entonces Chanyeol vio que tenía la llamada de alguien, seguro de uno de sus jefes o colegas, así que lo vio hablar un corto periodo de tiempo, hasta que solo volvió a él para decirle que se tenía que ir, que acababa de surgir algo y antes de que Chanyeol le pudiera decir algo, simplemente su padre se fue, pero aun así, no se sintió triste para nada, solo sonrió y terminó cerrando su computadora, a la vez que pensaba que al final, su pasión por las cosas, venía de familia.
Chanyeol siempre había recibido un montón de amor de sus padres y ellos siempre querían darle atención, por lo mismo, Chanyeol siempre pensó que tenía que ser el mejor, para que ellos pudieran sentirse orgullosos, aunque ellos no se los estaban pidiendo directamente, pero Chanyeol había aprendido que mientras él estuviera logrando cosas, sus padres podrían ir a verlo, así que estaba feliz siempre que ellos estaban juntos, cuando era pequeño, tenía esos pensamientos, por eso temía tanto fallar y no ser, perfecto, él al final de cuentas era el hijo del directivo Park, no se suponía que tuviera que ser malo.
Una serie de pensamientos y vida como esa, era lo que lo había llevado a tener un montón de incómodos momentos, a veces no quería hacer cosas, pero las personas no se podían creerlo, siempre querían algo de él, como Chanyeol no podía decir que no, todo el mundo estaba buscándolo siempre, quizás por eso era tan popular también, todo el mundo estaba esperando siempre que dijera que estaba bien.
-Chanyeol, ¿puedes ser el representante escolar de este año también?- le preguntaban los profesores a pesar de que no era el promedio más alto, ahí estaba KyungSoo, pero seguramente todo el mundo lo creía demasiado callado, así que Chanyeol sonreía y decía que estaba bien con todo eso.
-Chanyeol, ¿crees que puedas venir a ayudarnos para el festival?- las chicas especialmente le pedían cosas, incluso desde que estaba en el jardín de niños, todas querían que fuera el único chico que pudiera estar en sus juegos, en sus cosas, en todo eso, eso lo entendía más, ellas lo veían muy atractivo, así que le tenían expectativas y Chanyeol de nuevo, no quería ser grosero, así la fantasía se mantenía todavía.
