Siento mi corazón en llamas, mis piernas débiles como las de un becerro aprendiendo a caminar, mi mente en otro mundo, escucho voces a lo lejos pero no sé lo que dicen.
Mi mente ha encerrado al corazón con cadenas de plata, el corazón poco a poco se va perdiendo en un sueño profundo porque hace mucho no ha sido utilizado mientras el cerebro cada vez se engrandece en su poder.
Si mi corazón no gana la batalla contra el cerebro, me perderé y será el cerebro quien me controlara, el corazón no puede dejar que eso pase, no puede dejar que el cerebro gane, el lucha contra las cadenas que lo encierran pero cada dia va perdiendo
fuerza y a entrado en un sueño en el cual está luchando por despertar y ganarle al cerebro.