Cap 11

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La chica híbrida que hasta hace unos minutos estaba dormida se despierta perezosamente debido a un jadeo involuntario. Se encontraba completamente desnuda bajo las sábanas y la lengua de su, ahora prometido, le estaba realizando un cunnilingus que sólo un experto como él podría hacer, de algo habían servido sus años de fuck boy. Continuaba degustando de la chica con lamidas torturantes que provocaban un estremecimiento en sus piernas.

—Ahhhhh, amor.

El chico sonríe con picardía y le dedica una mirada seductora a su novia.

—Buenos días princesa.

Le dice juguetonamente justo antes de meter dos dedos en el interior de esta mientras la punta de su lengua continuaba su labor de enloquecerla con movimientos húmedos y constantes sobre su clítoris.

No hizo falta que pasara mucho tiempo, en pocos minutos ya había logrado su objetivo de llevarla al primer orgasmo del día, mientras la chica arqueaba su espalda, se convulsionaba entre su boca y sus manos. Bebió todo lo que pudo, dio un casto beso antes de arrastrarse victorioso sobre ella y al encontrarse frente a frente aún extasiada del reciente clímax pudo articular palabra, finalmente...

—Buenos días futuro esposo.

Le dijo con una amplia sonrisa. Él en cambio le dedicó una segunda sonrisa pícara y sin previo aviso se acomodó entre sus piernas y comenzó a penetrarla con estocadas fuertes y certeras. Ella al estar tan reciente de haber recibido su primera dosis de placer del día, lo recibía más que agitada y doblemente excitada, así que sus gemidos no se hicieron esperar.

El chico se encontraba apoyado de sus antebrazos, uno a cada cada lado de la cara de su adoraba novia, mientras se miraban a los ojos con veneración. Sus ojos brillaban como luces, los de ella morados, los de él azules. Él se mantenía penetrándola con movimientos desenfrenados.

Él comenzó a besar sus labios para luego bajar el recorrido de sus besos, primero a su mentón y luego a su cuello, donde dejó libres sus colmillos y los clavó con delicadeza en la suave piel.

El placer de ésta se intensificó con el acto y con un movimiento desesperado buscó el brazo del chico donde le devolvió la mordida, drogándose ambos en deseo y placer. Entregando y recibiendo todo de sí, su sangre circulando entre ambos cuerpos, como si fueran uno, dejando su alma, su espíritu y su cuerpo a merced del otro. De esa forma llegaron juntos al clímax, ella, en este caso, por segunda vez en menos de una hora.

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5 años antes...

—Mamá, de verdad que no tengo ningún interés en conocer a ese chico, ¿qué culpa tengo yo de la amistad de ustedes con su padre? Además, ¿por qué no se busca él solito sus citas? No estamos en los tiempos en que los padres deciden las parejas de los hijos, por favorrrrr... eso es muy anticuado.

—Me gradué de una excelente universidad, con los mejores resultados, soy una trabajadora brillante y encima puedo seguir con nuestras investigaciones privadas, ¿Qué importancia tiene para ustedes que tenga o no pareja?

—Oh, cariño mío, dale una oportunidad al chico, sabes que es muy difícil para nosotros encontrar pareja, ¿cómo le explicas a un humano que en un punto de tu vida dejarás de envejecer?, no podemos relacionarnos mucho con ellos debido a eso, además es un riesgo muy alto. ¿Qué te cuesta conocerlo? No vamos a forzarte a que te cases con él, pero podrías estarte negando al amor de tu vida ¿Quién sabe? Por favor cariño, su padre me llamó muy preocupado, ya él tiene 30 años y encima no quiere asumir la empresa, ha decidido ser profesor de Educación física en la universidad, por suerte tiene un sobrino menor que se hará cargo de todo, pero me asegura que su hijo es un hombre muy inteligente, preparado y apuesto.

Déjame saborearte (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora