El abogado So veía de forma nerviosa las dos rosas que le habían entregado en su oficina, no estaba muy seguro de qué significaba que fueran disminuyendo, pero pensar que pronto serían 0 de alguna forma instalaba una opresión en su pecho.
Lo más inquietante era la nota que las acompañaba: "Hola querido, ya casi llegamos al final, ha sido lindo divertirme contigo, pero lamentablemente nada es para siempre y ciertamente tu vida tampoco lo es, estuve pensando que sería muy egoísta de mi parte dejarte ir sin un poco del éxito comunicacional que mereces, por eso voy a darte el placer de vivir en carne propia un poquito de fama con lo que sembraste, antes de dar tu último adiós. Que te diviertas perra. Tu peor pesadilla ".
Por más vueltas que le daba no entendía nada, en esos días se encontraba en un conflicto emocional enorme por un lado esas rosas que no tenían sentido para él, en ocasiones las que recibía su esposa, esas amenazas constantes. Sentía que era observado cuando salía a la calle, a veces escuchaba pasos tras él, pero al voltearse no lograba ver a nadie, incluso juraría haber sentido una respiración en su nuca una noche, luego de haber tenido una reunión laboral con aquel chico precioso que le estaba nublando el juicio considerablemente con su belleza y sus coqueteos.
Lo cierto es que el joven de sonrisa peculiarmente cuadrada lo hacía olvidar todos sus problemas y hasta su nombre, en esos días se veían a diario, siempre reuniones en restaurantes de altura, finos y caros, él no veía la hora de tener un contacto más privado con aquel ángel caído del cielo, (o eso pensaba). Moría por probar esos labios, esa piel, su mirada lo dejaba embobado, ese era el único instante del día en el que no sentía la ansiedad de aquel acosador, sin embargo cada vez que terminaba su reunión y se dirigía al estacionamiento aquella sensación volvía, escuchaba risas burlonas o sentía toques sutiles en su hombro, en alguna que otra ocasión sintió que le susurraban al oído "tú sí que eres una perra", esos eventos para él solo podían significar algo:" estaba perdiendo la lucidez y ahora tenía alucinaciones", a esto sumarle que tenía pesadillas que lo hacían despertar en las noches constantemente con la respiración agitada y sudoroso. Aquel acosador estaba logrando enloquecerlo de tanta presión psicológica.
Una llamada en la oficina lo hizo salir de sus pensamientos.
—Abogado So, disculpe que lo moleste sin previo aviso, sé que nuestra cita de hoy es en la noche, pero creo que deberíamos vernos antes, dadas las circunstancias, perdone mi falta de tacto, debí preguntarle antes, ¿Está usted bien? Quiero que sepa que cuenta con mi apoyo absoluto, que no pienso abandonarlo a su suerte, ni cerrar nuestro contrato, yo creo en usted, todo se va a solucionar, ánimo.
—Señor Kim, usted jamás sería inoportuno no importa la hora, ni el momento, usted puede llamarme cuando sea, pero sinceramente no sé de qué habla, gracias por el apoyo, pero no entiendo por qué habría de necesitarlo.
—Oh, dios, no me diga que he tenido la mala suerte de ser yo quien porte malas noticias para usted. ¿Cómo es posible que aún no sepa nada, si está en todo internet e incluso en el diario? De seguro alguien quiere ganar dinero desprestigiándolo, no encuentro otra justificación posible.
—Sigo sin enterarme de que habla señor Kim.
—Bueno abogado So, creo que debería ver las noticias y luego me llama, recuerde contar conmigo siempre.
No había terminado la llamada con Taehyung cuando la secretaria del abogado, tras tocar solamente para que el abogado supiera que iba a irrumpir en su oficina, entraba con una cara de horror y los teléfonos comenzaban a llamar sin cesar.
—Abogado So, sucedió algo terrible.
El abogado la miraba atemorizado, ¿Qué diablos podría estar sucediendo?
Observó las manos temblorosas de su secretaria entregarle un tablet con un artículo que decía "¿Abogado o pederasta? La verdadera cara de So Ji Sub el abogado que abusa de menores...."
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Déjame saborearte (Kookmin)
Hayran KurguLa guerra entre los vampiros y hombres lobos está a punto de estallar nuevamente, solo pocos humanos conocen de la existencia de esas especies entre ellos y les dan caza en silencio para mantener la paz. Jungkook es un hombre lobo y no lo sabe, Jimi...