Patético

CATORCE

Quizás, era por la expresión de Baekhyun, quizás era por la sensación que recorría todo su cuerpo, peo la vedad, es que ni siquiera sabía que decir, porque al final de cuentas, Baekhyun, lo único que había hecho, había sido tomarlo de la mano y llevarlo hasta el jardín trasero de su casa, hasta donde yacía ese pequeño árbol que apenas parecía haber crecido un poco, entonces Baekhyun se había mostrado mucho más deprimido, mucho más dolido, cuando comenzó a golpearse con fuerza el pecho y solo se cayó de rodillas frente al árbol, con la caja de cosas entres sus manos.

-HimChan era todo lo que me quedaba.- dijo Baekhyun sinceramente y entonces, había terminado sorbiendo su nariz. –Cuando supe que venía al mundo, quise honrar su vida con esté árbol, prometí, que mi bebé crecería tan sano como este árbol y cuando fuera mayor, este árbol y mi hijo, serían tan altos y fuertes, yo, solo estaba orando por la vida de ese niño como si fuera de mi vida entera, en verdad anhelaba...-

-¿Por qué demonios no dejas de hablar en pasado? ¿Qué mierda hiciste?- Chanyeol lo tomó del cuello de la ropa para poder sacudirlo, pero Baekhyun no dejaba de llorar, estaba llorando tanto, estaba tan desesperado porque no le decía nada. -¿Qué le hiciste a nuestro hijo? ¿Dónde lo dejaste? ¿Qué le hiciste, Baekhyun?-

-¡Yo no le hice nada! ¿Qué crees que soy? Nunca podría hacerle nada a nuestro hijo.- Baekhyun solo cubrió su rostro y volvió a llorar, entonces Yeol solo lo había soltado, porque no entendía que era lo que pasaba, no entendía porque era tan agotador poder decir algo tan sencillo, estaba comenzando a perder todos los estribos, pero Baekhyun ni siquiera podía respirar de manera adecuada. -¿Por qué eres tan cruel y no puedes esperar nada?-

-Porque no dices ninguna maldita palabra.-

-Cuando supe de él, yo estaba demasiado asustado- admitió Baekhyun, recordándose a si mismo mientras estaba mirando a su bebé en esa pantalla negra, también estaba acariciando su linda barriga, entonces iba a todos lados para poder comprar cosas para su hijo, incluso había comprado un montón de buena música clásica, porque decían que eso hacías más inteligentes a los bebés, que eso, los hacía más conscientes del mundo exterior y Baekhyun de verdad estaba emocionado por eso, no dejaba de ponerle a todas horas eso a su hijo, aunque a él le daba mucho sueño y se terminaba quedando dormido, la música clásica era lo peor, eso creía. –No sabía que iba a hacer y te busque por todos lados, te busque no para que me ayudarás o te hicieras cargo, porque ya sabía que no querrías ni verme, pero quería que lo conociera, a nuestro HimChan, que aunque era muy pequeño para su tiempo, era fuerte y me ayudó mucho.-

Chanyeol seguía mirando a Baekhyun llorando, miraba ese pequeño árbol y seguía sin entender nada, todos los escenarios posibles, eran horribles, además de que iba a terminar por volverse loco, porque Baekhyun apenas y decía cosas.

-Era tan molesto, un bebé en verdad molesto.- dijo sonriendo, mientras sus lágrimas seguían cayendo por su rostro, estaba demasiado aturdido por muchas emociones. –Siempre me estaba provocando nauseas, incluso si era mi comida favorita, no dejaba de causarme nauseas, luego, no dejo de hacerme sentir muy pesado, hacía que se me hincharan los pies y más tarde, me hizo orinar un montón, mis antojos me volvían loco, siempre me despertaba en las madrugadas, porque no podía dejar de dolor de la espalda pero lo adoraba, lo ame, incluso si nos íbamos a quedar solos, pensé que en verdad podría hacerlo bien con él, incluso, conseguí un trabajo, ¿sabes? Tenía un trabajo, en esa tienda de magia, al lado de esa guardería, a donde yo iba a clases de crianza, ya sabía que no era muy buen tipo, así que pensé, que debería ser un buen padre al menos, uno al que HimChan pudiera acudir cuando tuviera un mal día, uno al que pudiera acercarse cuando tuviera problemas y uno que pudiera golpear idiotas si lo molestaban- Baekhyun sorbió su nariz, cada vez parecía más desesperado, cada vez parecía más ansioso. –No quería que tuviera una vida complicada, de hecho, quería que tuviera una vida muy dulce, una vida muy buena, pero yo cometí errores incluso en eso.-