Capítulo II

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Hola a todos! Acá otro capítulo , esta vez requerí bastante ayuda para escribirlo jaja.

Acepto ideas tambien :V

El capi está demasiado dramático y fuerte para mi gusto, pero eso fue lo que me mandaron a escribir asi que a ver que procede jaja.

Spoiler grande: recuerden que todas mis historias tienen final feliz, es mi lema jaja.

Como lo haré con esta es el gran dilema que tengo, pero a ver que pasa. 

Besos y abrazos y si pueden comentar se los agradezco jaja.

- No pensamos bien esto- dijo Aegon casi temblando de miedo y sujetando a Rhaenyra que iba frente a él- Nos va a matar, nos matará- dijo Aegon y Rhaenyra negó.

- ¿Por qué piensas que él te matará? - preguntó Rhaenyra sin entender por qué Aegon le tenía tanto miedo a Daemon.

- Si el hecho de que mató a mi madre no te parece suficiente- dijo Aegon mirando a Rhaenyra- Mamá dijo que tú y él me matarían por ser un posible heredero al trono.

- Y sin embargo aquí estás- dijo Rhaenyra mirando a Aegon- No te mató él cuando tuvo la oportunidad, y no te maté yo, que también tuve la oportunidad- dijo Rhaenyra y Aegon asintió.

- Si, pero ahora nos matará a los dos, porque la serpiente de sangre nos está siguiendo- gritó Aegon aterrado- ¿Has visto a algún dragón capaz de ganarle a Caraxes?- preguntó Aegon y Rhaenyra negó.

- No, y dudo que Vhagar nos quiera ayudar- dijo Rhaenyra sintiendo los silbidos de Caraxes tras ella.

Si los atrapaban estaban muertos, eso era claro. A menos que, pensó Rhaenyra.

- Hicimos mal este plan- dijo Rhaenyra mirando a Aegon- Salimos demasiado deprisa, si nos encuentran en el palacio, no nos podrá acusar de haber escapado- dijo Rhaenyra y Aegon la miró aterrado.

- ¿Quieres que nos entreguemos? Olvídalo prefiero morir como un cobarde- dijo Aegon que no iba a entregarse a la furia del rey.

- No digo que nos entreguemos- dijo Rhaenyra mirando a su hermano- Digamos que solo salimos a dar un paseo, yo no puedo volar en Syrax- dijo Rhaenyra- Di que me quisiste sacar del palacio, que yo te lo pedí- dijo Rhaenyra y Aegon comenzó a pensar que tenía sentido.

- Te saqué del palacio porque querías conseguir un regalo para Visenya- dijo Aegon y Rhaenyra asintió.

- No lo pudimos conseguir porque Caraxes comenzó a seguirnos y nos asustamos- dijo Rhaenyra y eso claramente no era mentira del todo.

Aegon voló tan rápido como pudo en Fuego sol sabiendo que Caraxes lo alcanzaría en cualquier minuto.

Apenas estuvo en el palacio bajaron de Fuego Sol y corrieron por los pasadizos secretos. 

Aegon la tomó de la mano cuando Rhaenyra pensó correr hacia su cuarto en la torre.

- Debemos regresar- dijo Rhaenyra pero Aegon negó.

- Al salón del trono, que parezca que lo esperamos- dijo Aegon y Rhaenyra asintió.

Corrieron tan rápido como pudieron y cuando la guardia real los vio avisó de inmediato al rey que ellos ya estaban allí.

Rhaenyra y Aegon respiraban agitados. Ambos habían traicionado de muchas maneras al reino alguna vez.

Aegon usurpando la corona de su hermana por órdenes de su madre y su abuelo, a pesar de que Rhaenyra se la cedió después. Y Rhaenyra traicionando al actual rey con la reina viuda poniendo en riesgo no solo a todos sus hijos, sino a todo el reino porque Otto ya había ordenado su ejecución. 

Una historia de traiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora