Unidos por sorpresa

4. Pelea de coros. Alex sale herido.

-Guau...Menuda sala de actos...-Silva Carlos.

-Esto es más amplio que la lista de conquistas de Soul.-Bromea Aitor.

-Yo creo que las conquistas de Soul superan esto.-Opina Alex.

-¡Dejarme en paz, pesados!

Es la hora de la clase de música. El aula 18 se encontraba en un gran salón de actos, lleno de butacas y en frente un enorme escenario. Los chicos de Pontedourada miraban extasiados y con la boca abierta todo lo que les rodeaba. En cambio, las chicas más que acostumbradas a este sitio atinaban a reírse de ellos. Uno a uno, subieron al escenario. A lo lejos, una mujer hace su aparición. Tenía el pelo negro corto hasta el mentón. Su mirada estaba oculta tras unas gafas granates de montura mariposa, estas estaban sujetas por dos cuerdas de perlas que rodeaban el cuello de la mujer. Sus tacones oscuros resonaban por todo el salón y su libreta de tapa dura color blanca se balanceaba con el movimiento de sus brazos. Sube los peldaños con elegancia y deja encima del piano su inseparable libreta y, con cuidado, cuelga su abrigo de piel marrón en una silla.

-Buenos días, alumnos.-Saluda mientras se saca sus gafas para limpiarlas. Su mirada recorre el grupo que tiene enfrente, entrecierra los ojos para ver mejor.-Pe...¡¿Pero qué?!-Se las pone rápidamente.-¡Que horror!¡Que catástrofe!-Tanto chicos como chicas se miran entre ellos confusos.-¿Como puede existir algo tan...tan...tan asimétrico? -Dice la mujer escandalizada. Con pasos veloces se acerca al grupito de los chicos.

-¿Se puede saber qué es lo que llevas en la oreja jovencito?

-¿Esto?-Pregunta Carlos señalando su oreja.- Es un pendiente.

-Un aro para ser exactos.-Dice Edmundo saliendo de no se donde.-Y lo del cartílago es un piercing a presión, no hay agujero ni nada.

-Exacto. ¡Ayy ayy ayyy!.-Exclama el moreno al ser tirado de la oreja por la mujer.

-¡Eso es inaceptable! En este centro hay que estar siempre impecable y...¡Jesús María y José¡ ¿Te has teñido el pelo?-Acusa horrorizada al ver a Soul. Suelta la pobre oreja de Carlos para plantarse delante del albino.

-No es teñido señora, es natural.-Dice Soul irritado.

-¿Natural? Sobrenatural diría yo. Y usted, quítese el gorro.-Dice dirigiéndose a Alex. Él se lo quita sin ganas.-Espere un momento... ¿lo que le transparenta en la camisa...es un tatuaje?

Alex la mira confuso. Baja sus ojos azules a su hombro izquierdo y ve como su tribal se transparentaba un poco.- Apenas se ve.

-¡¿Cómo que apenas se ve?! En el centro no esta permitido llevar tatuajes. Por favor, como pudo el consejo decidir unir el perfecto instituto Claytonross con el asimétrico instituto Pontedourada.-Dice cerrando los ojos y lamentándose.- A ver, el siguiente ¿Tu también tienes un piercing?

-No.-Contesta Aitor sonriente.

-¿Algún tatuaje?

-Negativo.

-¿Te has teñido el pelo?

-Pelirrojo desde que nací.

La mujer levanta la vista y se queda pálida.- ¡Ahhh! Ohh por dios, tú eres peor que los otros.

-¿Qué?-Pregunta Aitor.

-¿Qué forma es esa de ponerse el uniforme? Súbase los pantalones, abróchese los botones de arriba, póngase la corbata, no remangue las mangas de la camisa y péinese esos pelos, parece que se haya electrocutado.

-¿Qué?-Vuelve a decir.- Lo siento señora pero yo me quedo así. Es mi estilo.

-Pues ese estilo le va a costar la nota de la asignatura.-Dice la mujer enfadada. Se da la vuelta y coge su libreta.