11. Carlos me hizo entrar en razón

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Esa mirada. No era la primera vez que Carlos veía esa oscuridad en los ojos de Soul, los cuales lo atravesaron de forma violenta como si se tratasen de dagas. Luego de crujir los nudillos, se acercó a él para ponerse a su lado.

-¿Eres gilipollas?-Soltó el moreno.- Está claro que el culpable de las lágrimas de Helen eras tú.

Soul torció los labios en una sonrisa burlona.- ¿Crees que me importa? Que culpa tengo yo de que esa estúpida sea tan débil.

-¿Te estás escuchando Soul?

-Se lo que estoy diciendo.

-Deja que lo piense...No.

El albino cortó el contacto visual con los ojos oscuros de Carlos.

-Si has venido a molestarme puedes largarte.-Dijo Soul.

-No me voy a ir hasta que me digas que hiciste.-Contestó Carlos.

Soul golpeó la cama con fuerza y se levantó. Ambas caras de los chicos estaban muy cerca una de la otra.

-¿Quieres que te lo diga? ¿Eh, Carlos? ¿Quieres que te cuente que casi me la follo contra la pared? ¿Quieres que te cuente como esa estúpida se dejaba hacer?-Decía el albino mientras empujaba a Carlos cada vez más fuerte.

Carlos le contestó con un derechazo en la nariz.-Desgraciado...

Soul se lo devolvió con más fuerza provocando que Carlos tropiece y caiga al suelo. El albino se tiró encima de él golpeándolo varias veces causándole un corte en el labio y varios moratones por la cara.

Carlos consiguió sacarse de encima el cuerpo del chico con un puñetazo en el ojo. El moreno aprovecho su aturdimiento para posicionarse encima de él. Lo agarró por el cuello de la camisa mientras Soul intentaba que Carlos aflojara el agarre. Carlos lo miraba enfadado, con las cejas juntas y Soul se resistía rabioso y gruñía apretando los dientes.

-¿No te das cuenta Soul?- Habló Carlos jadeante, sacudiéndolo.- Te has desmayado, no dabas signos de despertar y ¿sabes quien fue a ti? Helen. Joder Soul, ella te salvó de darte un buen golpe contra el suelo. Si no fuera por ella ahora mismo estarías postrado en una camilla, aún dormido, dentro de una habitación gris de hospital. ¿Es donde quieres volver a estar? ¿En un hospital?

El albino abrió los ojos desmesuradamente y tensó la mandíbula. Odiaba los hospitales.

Carlos notó como el albino relajaba las manos y lo soltó separándose de él.

Soul se levantó horrorizado, mirando un punto fijo en el suelo. Retrocedió unos pasos hasta que su espalda chocó contra la pared y se deslizó hasta quedar sentado en el suelo. Sus ojos ámbar se cristalizaron y escondió su cabeza entre las rodillas y con los brazos se cubrió la cabeza. Soltó un lastimoso suspiro para no ponerse a llorar.

-Estoy jodido...Descargué toda mi rabia contra ella sin tener ninguna culpa.-Gimió Soul.- Fue la única que se quedó conmigo en la enfermería pudiendo hacer otras cosas...y así es como se lo agradezco.

Levantó la cabeza y la apoyó en la pared. Se mordió el labio con fuerza. Miró a Carlos desesperado. Devastado. Cansado.

-No se si voy a poder aguantar con esto.-Confesó el albino.

Carlos se sentó a su lado.

-¿A qué te refieres?-Preguntó el moreno.

Carlos examinó el rostro de Soul. Sus ojos totalmente rojos miraban un sobre arrugado encima de la cama. Se quedaron en silencio un buen rato hasta que Soul, con valor, decidió hablar:

Unidos por sorpresaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora