PLAY WITH FIRE | donde fuego y destrucción se juntan, creando al caos en persona.
Vhynera Targaryen Raknasson a escasa edad ya contenía dos grandes reliquias. Un dragón negro, con el que dominaba el cielo, y un diente de sable blanco, con el que d...
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Desembarco del Rey Año 1154
Vhynera jugó con sus dedos nerviosa, viendo como Nyx apoyaba su cabeza en su regazo.
Lessa estaba sentada frente a su hija, en un completo silencio. Su diente de sable de color canela, Nera, también estaba allí.
Tan solo se podía oír el caminar de los caballos que llevaban el transporte, y la respiración de ambos animales.
El carruaje paró de golpe, y la reina fue la primera en bajar, seguida de su diente de sable y después de su hija y su dicho animal.
Fuera les esperaba la familia de Rhaenyra, y se pudo palpar el ambiente deplorable cargado de una enorme tristeza.
Lessa masculló un insulto entre dientes al ver como Alicent tenía el descaro de no haber ido a recibirles.
Ignorando aquello, no tardó en acercarse a los hijos mayores de la familia, mostrándoles una diminuta sonrisa.
- Pero mira como han crecido los pequeños príncipes. -musitó, atrayéndoles a un abrazo.
Estos correspondieron, y la mirada de Jacaerys se desplazó hasta Vhynera.
Una chica de quince años que se había quedado mirando el suelo pensativa, sus ojos detonaban un vacío abismal. Pero aún aquello, no pudo evitar caer aún más rendido a sus pies de lo que ya estaba, desde luego que la chica ahora era más bella de lo que había sido de pequeña.
Nyx se encontraba a sus pies, rugiendo suavemente hacia su dueña y refregándose con sus piernas como si intentara llamar su atención, dándose cuenta de su estado de ánimo.
A Vhynera volver a allí le traía muy buenos recuerdos. En aquel entonces Daerys y Teron aún estaban con ellas, y eran una familia feliz y unida. Que, aunque ahora lo seguían siendo, el ambiente siempre estaba cargado de una tristeza abundante.
Lessa se separó de los hermanos mayores para saludar a Baela y Rhaena, después al pequeño Joffrey y a los más pequeños, Aegon y Viserys. Finalmente, se acercó a los dos adultos.
- ¿Cómo estáis? -preguntó suavemente Rhaenyra a la mujer, pues la ausencia de algunos miembros de la familia era obvia.
No tardó en girarse para observar a su hija, y una mueca cruzó sus facciones.
- Se sigue culpando. -contestó, apretando sus labios en una fina linea.- Frey no consiguió sobrevivir el parto, aunque apuesto a qué hubiera sido un apuesto príncipe de pelo plateado. -continuó, llevando su mano derecha a su barriga.
Vhynera levantó la cabeza al oír como unos pies se posaban enfrente de ella, se trataba de Lucerys.
Este no tardó en abrazar a la adolescente, siendo correspondido. Rápidamente, Nyx también se alzó sobre sus dos patas traseras para hacer un intento de abrazo al príncipe.
