Extra

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Pasado

Jungkook

Hoseok por fin le había aceptado una cita. Jungkook mentiría si dijera que no estaba nervioso. Le había rogado mucho para que lo aceptara.
Luego de que salió del hospital, Hoseok había estado distante con él, apesar de haberlo dejado ayudar con el tema de su intento de suicidio, parecía no querer relacionarse más allá. Pero entendía por qué y no iba a presionarlo.

Hasta que el día de ayer, cuando por milésima vez Jungkook le preguntó si quería ir a comer, éste había aceptado.

"Solo una hora, yo decido lo que comemos, el lugar y no tienes permitido propasarte conmigo"

Fueron las palabras que le dijo justo después de aceptar.

A Jungkook le parecía tierna la forma de ser de Hoseok. Era muy cortante y serio. Pero sabía que en el fondo, Hoseok era una maravillosa persona escondida entre tanto dolor.

Pasaría a recogerlo a su casa en unos minutos, así que decidió salir antes, no quería que se le hiciera tarde y perdiera la única oportunidad que tenía.

—Quiero ir al festival que está a unas calles de aquí. Dicen que dan buena comida —Hoseok salió de su casa en cuanto tocó la puerta.
Fue lo primero que le dijo, ni siquiera lo saludó.

—Está bien.

Ambos subieron al carro y llegaron al festival que Hoseok le había dicho. Se detuvieron en un puesto donde daban pruebas de brochetas.

—¿Sobre qué es el festival? —le preguntó a Hoseok quién probaba una brocheta con tranquilidad.

—¿Eso importa?

Jungkook sonrió.

—Por lo menos deberíamos saber sobre qué es, estamos comiendo su comida.

Hoseok rodó los ojos.

—Creo que es de carne. Supongo —Hoseok miró al rededor y encontró un restaurante—. Quiero ir allí.

Señaló con su dedo y comenzó a caminar. Pero Jungkook lo detuvo con una mano.

—Espera, tienes un poco de comida en el cachete.

Se acercó a Hoseok y le limpió la comida con una servilleta. El contrario se quedó muy quieto con la acción de Jungkook.

Los ojos de Hoseok se quedaron pegados a él. Jungkook suponía que era porque Hoseok no estaba acostumbrado a que lo trataran así, su antiguo novio no tenía esos pequeños detalles con él.

—Bien, ya está limpio. ¿Vamos? —Hoseok asintió todavía aturdido por lo ocurrido.

Comieron con tranquilidad, al parecer la comida ponía de buenas a Hoseok pues se puso solo un poco de mejor humor.
Aunque también el alcohol ayudó.

Agarró de la mano a Hoseok y lo ayudó a bajar las escaleras que estaban saliendo del restaurante.

—Yo puedo solo.

Le dijo, pero tenía las mejillas sonrojadas y se tambaleaba por estar algo borracho.

Jungkook lo ignoró y lo tomó de la cintura para poder sujetarlo mejor. Al llegar abajo, Hoseok le pegó en el pecho con su mano.

—¡Ah! ¿Por qué hiciste eso? —le reclamó a Hoseok, sin soltarlo.

—Porque te estás aprovechando de mí.

Jungkook lo soltó y Hoseok sonrío complacido.

Condujo hasta la casa de Hoseok y lo acompañó hasta la puerta. Parecía ser que ya estaba un poco más consciente que antes y ya no caminaba tan mal.

Abrió su puerta y se dio la vuelta para hablar con él.

—No estuvo tan mal.
Dijo.

—Gracias, supongo.

Hoseok sonrió y miró sus labios.

Fue una mirada rápida, menos de un segundo. Pero Jungkook entendió la señal.

Se acercó a Hoseok hasta que sus cuerpos se tocaban por completo. Su mirada en los labios contrarios.

Hoseok puso una mano en su pecho cuando se acercó demasiado a su boca.

—Te estás propasando de nuevo —ambos se miraron fijamente.

—No veo que te esté molestando mucho.
Le dijo Jungkook. Sus respiraciones algo alteradas por la cercanía.

—¿Ah no? —le sonrió de lado—. ¿Estás seguro?

Puso una mano en la cintura de Hoseok y lo pegó más a él.

—Muy seguro. Puedo sentir que estás temblando, amor. Quieres esto tanto como yo.

Hace un tiempo que había notado que a Hoseok le gustaba cuando actuaba de esa manera con él y era momento de aprovecharse un poco de eso. Recorrió el rostro de Hoseok de nuevo, podía notar el deseo por todas partes.

Se acercó por fin a sus labios y lo besó con desesperación. Hoseok suspiró y llevó sus brazos a su cuello y los enredó.

La otra mano de Jungkook subió hasta la mandíbula de Hoseok y la sujetó para poder tomar el control del beso.

Sus lenguas se juntaron y ambos jadearon.
El beso fue largo, húmedo y desesperado.

Se separaron para tomar aire un par de veces pero terminaban besándose de nuevo.
A Jungkook le encantaba lo bien que se sentía que el contrario se derritiera con un beso.

Hasta que decidieron detenerse. Ambos con sus corazones latiendo rápido.

—¿No que no querías? —le dijo a Hoseok.

—Te estaba probando.

Jungkook soltó una risita.
—¿Probando qué?

—Si entendías que quería que te propasaras.

Esta vez soltó una carcajada.

—Te veré mañana, Hoseok. Buenas noches.

Se alejó de él y caminó hasta su carro.

Esperaba que Hoseok aceptara salir con él otra vez. Estaba muy embobado con Hoseok y realmente quería que lo aceptara.
Pero con el beso anterior podía tener más esperanza. Porque Hoseok había sido tan sensible y receptivo a su toque que lo dejó deseando más.

Él podía hacerlo feliz, él podía hacer todo lo que su exnovio no hizo.
Él, verdaderamente podía amarlo.

❤️

Feliz Navidad

Un poco tarde.

Aunque No Puedas Verme. Junghope.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora