Aunque No Puedas Verme. Junghope.

FINAL

Y quizás, solo así, yo pueda olvidarte.
—MelDragon.

💜

Jungkook se acercó a Hoseok lentamente, el castaño tenía sus ojos rojos por las lágrimas que se aproximaban, y él se sentía tan mal por hacer que Hoseok estuviera así.

Lo vio dirigirse a su cama, donde su cuerpo se encontraba acostado conectado a la máquina que indicaba cosas que no lograba entender. 

—Espero que no te pongas celoso contigo mismo.—Mencionó antes de sentarse en la cama, con su mano acarició el cabello del cuerpo de Jungkook, una sonrisa se dibujó en sus labios.—Extrañaba mucho verte, y ahora es algo extraño por que la misma persona está dos veces aquí y a los dos los amo demasiado.— Siguió riendo aunque con algo de tristeza, su cabeza se inclinó un poco y siguió tocando su cabello. Sus ojos se veían cansados, como si algo los obligara a cerrarse y el luchara con mantenerlos abiertos.— Algunas personas dicen que hay puertas que se cierran para que otras se abran.—Soltó un suspiro.—No creo mucho en eso, pero creo que hoy se ha cerrado una, te perdí y ahora has vuelto.—Se quedó callado unos segundos, tomó aire y siguió hablando.—Esta quizás es la nueva puerta. 

Era raro para Jungkook ver a Hoseok mirar su cuerpo, y como Hoseok había dicho, se sentía celoso de él mismo, porque él podía sentir por completo a Hoseok, aunque no estuviera consiente, por lo menos Hoseok lo miraba ahí, por lo menos sonreía con ese cuerpo. 

Se acercó hasta llegar al lado de la cama, miró cómo Hoseok se acercaba a su rostro y sin dudarlo juntaba sus labios con los de él, podía sentir su corazón acelerarse al ver a Hoseok besarlo de esa manera. Algo que nunca le había podido confesar a Hoseok era lo mucho que le gustaba que lo besara, casi siempre era él quien empezaba el beso, ya que Hoseok era muy tímido a veces, pero ver que estaba tomando la iniciativa y lo besaba fue increíble.

El sonido de un pitido llenó por completo la habitación, Hoseok se alejó de él y pronto un Doctor junto con tres enfermeras entraron corriendo. No sabía qué estaba pasando, solo veía a un Hoseok completamente asustado que miraba cómo los doctores se hacían cargo de él. —¡¿Qué hace usted aquí?!—Le gritó le Doctor a Hoseok, él comenzó a negar con la cabeza, sus mejillas estaban llenas de lágrimas porque ya habían rodeado al cuerpo Jungkook para empezar a salvarlo. Lo sacaron de la habitación para ponerlo en una continua, pero él seguía viendo por una pequeña abertura de la puerta. 

Jungkook se acercó a Hoseok y aunque sabía que no podía escucharlo, aún así comenzó a hablar.—Tranquilo, mi amor, todo va a estar bien, van a ayudarme.—Lo abrazó como pudo y él se sobre saltó, pero pronto se pegó más al toque y comenzó a desahogarse.

—No quiero que te pase nada Jungkook... no quiero que te mueras, no podría soportarlo de nuevo.—Dijo Hoseok entre sollozos mientras prácticamente se desparramaba en los brazos invisibles de Jungkook.

—¡¿Qué hacemos, Doctor?, no reacciona!—Vio a uno de ellos inyectar algo en su brazo, el Doctor se veía desesperado mientras hacía algo nuevo.

Hoseok sentía su corazón latir con fuerza, no quería que nada malo le pasara, ya había sufrido esto una vez y no quería volver a pasarlo, no cuando resultó que estaba en coma.

Jungkook lo abrazaba con fuerza y era lo único que lo mantenía coherente. 

Se escuchó otro pitido provenir de la máquina, pero esta vez más extenso y fue cuando la respiración se le detuvo.—El joven no despierta.— Escuchó las palabras de la enfermera. Sintió el abrazo de Jungkook deshacerse, ya no lo sentía rodearlo y eso lo hizo derrumbarse.

Entró de nuevo a la habitación donde estaba Jungkook, pero no lo dejaron acercarse, un doctor lo sujetó del brazo mientras intentaba sacarlo de la habitación y por más resistencia que puso no pudo zafarse. Se dejó caer en el suelo y siguió llorando, no podía estar pasando esto, no de nuevo, no frete a sus ojos. 

Ya había aceptado el haber perdido a Jungkook, su muerte fue lo peor que le pasó en toda su vida, y la única puerta que ahora podía ver, estaba cerrada. 

💜

Hoseok respiraba lentamente intentando entender lo que los doctores le decían.

—Así se les dice cuando llega a ocurrir un problema, no creo que sea el momento indicado para explicárselo, pero veo que está muy mal por creer que Jungkook podría morir .—Hoseok se sentía muy aliviado y todavía confundido.

En verdad se había asustado al creer que Jungkook había muerto.

—Afortunadamente Jungkook despertó del coma, fue complicado y casi pierde la vida, pero afortunadamente todo está bien, ahora mismo está dormido, en cuanto despierte podrá visitarlo.— Hoseok asintió y el doctor se retiró.

Hoseok se puso de pie y pasó una mano por su cabello e  intentó pensar de manera correcta, estaba muy contento porque ahora Jungkook había despertado, pasó de estar destruido a estar completamente feliz. Porque ahora todo estaba bien. 

—¡¿Qué haces aquí?!, no tienes permitido entrar.— Hoseok se giró a su lado, era la señora Jeon, se acercó a él con largas zancadas y Hoseok se puso a temblar, realmente sabía que no era del agrado de ella, pero él esperaba que lo aceptara, porque no planeaba alejarse de él y todo esto lo complicaría. 

Ella lo tomó de la camisa, lo miró con furia.— ¿Cómo te enteraste? ¿Cómo supiste que Jungkook despertó? que seguía vivo.— La señora parecía asustada y Hoseok no sabía por qué. 

—Y-yo...—Ella resopló molesta.

—Déjalo en paz, mamá.— Jungkook salió por la puerta de la habitación, su cabello estaba algo revuelto, su piel estaba pálida y se lo veía débil. Hoseok sintió su corazón brincar con fuerza y sin poder evitarlo se soltó del agarre de la madre de Jungkook y corrió hacia él. 

Fue muy bien recibido pues Jungkook lo sujetó con fuerza y acarició su cabello cuando sintió a Hoseok volver a llorar. 

—Estoy bien, ya estoy de nuevo aquí, contigo, nunca me fui.—Susurró en su oreja. 

Los ojos de Jungkook se dirigieron a su madre que los miraba con los brazos cruzados, molesta con todo esto. Alejó un poco a Hoseok de sus brazos y habló con dureza.— No quero que te vuelvas a acercar a nosotros, Hoseok es la persona que más quiero en este mundo.—Su madre lo miró sorprendida, Jungkook no era de hablarle de esa manera.— Porque tú y mi padre no han hecho nada más que destruirme. Sé muy bien lo que tienes con el Doctor y no te juzgo, pero deberías decírselo a mi a mi padre, también sé del trato que tenías con él, prácticamente apostaron con mi vida.— Su mamá desvió la mirada, no sabía cómo Jungkook estaba enterado de esto.— Y eso es algo que tampoco puedo perdonar, mucho menos que le hayas mentido a Hoseok de esa manera, que le hayas dicho que morí, cuando no era así.— Tomó aire y miró por última vez a su madre antes de dar un paso atrás de nuevo a la habitación con Hoseok a su lado.— Hasta luego, mamá. 

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El siguiente es el Epílogo.