F1 Blue? Red? or maybe purple

QUE EMPIECE LA TEMPORADA

Ahí estaba la pequeña idiota, la adolescente que un día decidió subirse a un carrito de carreras pensando en la posibilidad de hacerlo todos los meses o frecuentemente por diversión con un buen grupo de amigos y ahora estaba apunto de tener un ataque de pánico en la silla de su nuevo Porsche 911 Turbo s (regalo de sus mejores amigos por iniciar su nuevo trabajo) cuán idiota se tenía que ser para aceptar ser la primera mujer en un campo dominado por hombres blancos, privilegiados y en su mayoría europeos, bueno pues bastante.

   —Eres tu la idiota, así que deja el autocompadecimiento para otro momento Nour—me dije a mi misma.

Así es Ladies and Gentlemen la pobre idiota soy yo.

Tome mi pequeña maleta de lujo con mis cosas y baje del auto, al parecer no era la única que había madrugado, un hermoso Ferrari 488 Pista Spider con detalles que dejaban en claro el dueño, estaba estacionado enfrente mío, ese carro solo podía pertenecer a una persona con muy buen gusto y un toque de arrogancia perfecto, Charles Leclerc estaba en la casa.

   —Claro que sí idiota podrá ser lindo pero no tonto, crees que dejaría el camino tan libre a sus rivales—pensé mientras miraba fijamente el auto.

(admito que hace unos 3 años tenía una creciente obsesión por el monegasco promesa de Ferrari)

   —Pues el principito no sabe lo que le espera.

   —Bien dicho nena LA COLOMBIANA ESTA EN EL PADDOCK .

Mi perfecta conversación mental fue interrumpida cuando escuché que mi celular sonaba, lo busque en mi maleta pero no estaba, mi ropa no tenía bolsillos así que pensé que me estaba enloqueciendo hasta que ví la pantalla brillando adentro del carro, de reojo ví el nombre "Daniel Ricciardo" ah claro el me iba a mostrar cómo "funcionaban las cosas" (como si no me hubiera informado bien) no sé pero el piloto de reserva no me terminaba de encajar aún, esperemos que eso cambie pronto, por el momento no quiero llevarme mal con alguien que será mi rival secreto o no tanto durante toda la temporada.

Volví al carro, alcance mi teléfono y devolví la llamada, sono un par de veces (genial no había ni entrado y ya tenía que lidiar con el orgullo causado por exceso de testosterona) no atendió así que espere un momento mientras me acomodaba adentro del carro para retocar el gloss y el rubor (nunca está demas)

   —A quién tratas de impresionar babosa.

   —Con que tú estés contenta es suficiente.

   —Jamás lo será.

   —Lo sé.

(No estoy loca créanme, solo tengo buenas conversaciones con mi conciencia poco agradable)

En eso alguien golpeó mi vidrio y me dió un susto lo cual implicó soltar varias groserías que no solia decir fuera de mi país por lo ofensivas que resultaban, Landó Norris estaba en mi vidrio POORRR DIOSSSS QUE MOMENTO TAN FANGIRL, (porfavor cállate ahora eres una de ellos) abrí la puerta y me disculpé amablemente con el, realmente fui yo cuando hice eso, es decir Nour, la persona algo en el ya me agradaba (aunque no era la imagen fría y despiadada que planeaba dar)

No importa si te ganas a unos cuantos de ellos reina.

—No te disculpes en primer lugar no debí golpear tu vidrio de esa forma y en segundo esas palabras que dijiste, ¡¡Necesito que me las enseñes!! Landó Norris para lo que gustes—menciono con una agradable y calida sonrisa.

wow realmente lo único que puedo decir es wow, que persona tan encantadora, definitivamente sera una agradable adquisición para mí portafolio de amigos.

—JAJAJJAJ las groserías en español especialmente las Colombianas no son para cualquiera, debes ganarte el privilegio de mencionarlas, pero un gusto Landó, Nour Vaughan—al terminar de decir eso me acerque para darle un beso en la mejilla