Por su reacción noté que no se esperaba eso, ¿pero qué importaba? Se acomodó para no aplastarme y me abrió sus labios, dejándome el paso para explorar su boca, su textura y su sabor delicioso. Mordí su labio inferior y él gimió mi nombre despacio, sonreí y lo volví a besar, mientras el ambiente subía de temperatura cada vez más.
El celular de Jorge sonó, interrumpiendo todo. Él gruñó y tomó el celular.
—¿Diga?... Oh, mierda lo olvidé completamente... sí, ya sé, lo siento... voy para allá—Y cortó.
—¿Qué sucede?—Pregunté extrañada.
—Tenemos 3 meses de vacaciones en la universidad pero el equipo de fútbol solo tiene uno. Olvidé que hoy era el primer día de entrenamiento.
—¿A qué hora?
—Empieza en media hora.
—La universidad está como a cinco minutos, si te apuras llegas.
—No alcanzaré a calentar.
—Mejor que nada.. Oye, tengo que ir a revisar unas cosas en la universidad, ¿te importa si te acompaño?
—Por supuesto que no, solo no te demores en arreglarte.
—No hay problema.
—Quizás te puedas pasar al entrenamiento un rato
—Claro, me encanta el fútbol.
Jorge me miró con una sonrisa perfecta.
—Yo sabía que me gustabas por algo—Dijo y yo me reí. Nos levantamos al mismo tiempo pero yo me metí a mi pieza a cambiarme.
Lo primero que saqué fue una playera con la bandera de Reino Unido, así que me decidí por ponerme unos short negros y unas converse rojas. Me puse unos aros y un anillo con la bandera de Inglaterra y unas gafas porque no tenía ganas de maquillarme y aunque ni siquiera me había mirado al espejo, anoche me había acostado tarde y yo probablemente tenía unas buenas ojeras. Lo único que me maquillé fueron los labios de un color rojo que era uno de mis labiales favoritos. [http://www.polyvore.com/british_style/set?id=51610123#fans]
Cuando bajé Jorge estaba sentado en el sillón.
—¿Te hice esperar mucho?
Se veía condenadamente bien con el uniforme de fútbol puesto; Era lo que siempre me decía Lodovica cuando íbamos a los partidos de fútbol en la Universidad, y le encontraba toda la razón. Ella solía molestarme con Jorge ya que sabía que me gustaba cuando era pequeña y solía meterlo en más conversaciones de las que yo desearía.
—Te diría que te ves jodidamente ardiente, pero vas a golpearme lo sé.
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La Niñera ''adaptada''
Romansa•La niñera• 200 dólares al mes; esa había sido toda la suma que Martina Stoessel había necesitado para ser la niñera de los pequeños de la familia Blanco; Jazmyn y Jaxon. Jeremy y Pattie Blanco se iban de viaje durante tres meses y Martina era la en...