BRATT LEWIS
Savannah amaba su trabajo, por algo había escogido ser parte de esa institución, pero aún así no estaba contenta con las personas que debía relacionarse día a día. Muchos eran engreídos, otros increíblemente irrespetuosos y la mayoría ansiosos por poder, era irritante, molesto y desagradable. Igual que la llegada y presencia del capitán Bratt Lewis. Savannah no quería verlo, no planeaba darle la bienvenida, ni acercarse a mantener algún tipo de conversación, lo quería evitar a toda costa, pero él tenía otros planes.
Estaba sentado en los sillones frente a su escritorio, mientras tomaba un café preparado por la asistente de la alemana. No era correcto que estuviera ahí sin la presencia de Savannah, pero la pobre mujer no encontró las palabras para prohibirle el paso, después de todo él tenía mucho más poder que ella y realmente no valía la pena entrar en una discusión, sabiendo que perdería.
— Es un gusto tenerlo de vuelta, Capitán. Pero me hubiese gustado ser avisada de su repentina visita — La castaña explico, manteniendo un tono de voz cordial
El papel de falsa le quedaba bien.
Bratt asintió y dejó su taza sobre la mesa — Oh, mis disculpas, Capitán. No pensé que sería un problema, después de todo soy un conocido.
Savannah se tensó al escucharlo, por supuesto que era un conocido, era imposible olvidarlo.
— Una cosa no quita la otra, pero bueno, estoy segura de que no volverá a repetirse — Contestó sonriente, antes de preguntar — ¿De que necesitaba hablar conmigo?
El ojiazul pareció recordar el verdadero motivo de su visita y se acomodó en su asiento — Estuve con Rachel ayer por la noche y aprovechó de comentarme que estaba entrenando el equipo de Dominick, en reemplazo del Capitán Thompson.
— Si, eso es correcto — Savannah respondió, haciendo evidente su confusión
Bratt rió con nerviosismo — Creo que ambos sabemos que no es conveniente que trabajen juntos.
— No entiendo de qué estás hablando.
— Vamos, Savannah. No sabía que sufrías de demencia, sabes perfectamente de lo que hablo.
La castaña tensó su espalda — Ten cuidado con los temas que decides sacar en el trabajo y también con tus palabras, te recuerdo que estás en mi oficina y las faltas de respeto no te las aguanto ni a ti, ni a nadie.
— ¡¿Qué saca teniéndola cerca?! — Exclamó molesto — Cámbiala de lugar y evitémonos problemas.
Savannah se levantó de su silla y se inclinó sobre la mesa — El que debe evitarse problemas eres tú, estás recién llegando y al Coronel no le gustará saber que estás demandando cosas para hacer el trabajo de tu novia más fácil. Madura y aprende a separar las cosas.
El rubio pasó una mano por su cabello, estaba furioso por las palabras de la alemana — No me amenaces.
— Yo no amenazo, sólo advierto. Si quieres seguir insistiendo en el cambio de Rachel, ve y habla con Christopher por que mi respuesta no cambiará. Ahora retírate de mi oficina, tu presencia me agota y por lo que veo no tenemos nada más de que hablar.
Incrédulo, Bratt camino hasta la puerta y se encargó de cerrarla con un fuerte portazo.
« Ahí se le ve lo educado » Pensó la castaña, mientras apoyaba su cabeza en ambas manos. ¿Como lo haría para aguantarlo todos los días de ahora en adelante?
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𝗟𝗼𝘃𝗲 𝗵𝘂𝗿𝘁𝘀 - 𝗖𝗵𝗿𝗶𝘀𝘁𝗼𝗽𝗵𝗲𝗿 𝗠𝗼𝗿𝗴𝗮𝗻
Action୮ 𝗘𝘀 𝗱𝗶𝗳𝗶𝗰𝗶𝗹 𝗿𝗲𝘀𝗶𝘀𝘁𝗶𝗿𝘀𝗲 𝗰𝘂𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗮𝗺𝗯𝗼𝘀 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗿𝗲𝗻 𝗹𝗼 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼. 𝗖𝗵𝗿𝗶𝘀𝘁𝗼𝗽𝗵𝗲𝗿 𝗠𝗼𝗿𝗴𝗮𝗻 𝗳𝗮𝗻𝗳𝗶𝗰 𝗟𝗮 𝘀𝗮𝗴𝗮 𝗱𝗲 𝗹𝗶𝗯𝗿𝗼𝘀 "𝗣𝗲𝗰𝗮𝗱𝗼𝘀 𝗣𝗹𝗮𝗰𝗲𝗻𝘁𝗲𝗿𝗼𝘀" 𝗻𝗼 𝗺𝗲 𝗽𝗲𝗿𝘁𝗲𝗻𝗰𝗲 𝘁...