R E D Scaloneta X Messi VIOLENTO-METRO

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— ¿Lo vas a despertar?— Pregunto  Lautaro, o también conocido como el “toro Martínez”.

— Uhm... — musitó Rodrigo un poco dudoso, tenía intenciones de cargar en brazos al Omega y llevarlo a la habitación en la que se quedaría o la que estaba designada para el.

— ¡Eu, bajence ya! —

Llamo el número 23 de la selección luego de a ver bajado algunas maletas, así ayudando a algunos encargados.

— ¡Shh! Cállate... — chito haciendo una seña con el dedo en medio de sus labios, cosa que extraño un poco al arquero.

— ¿Qué tenés Lauti? —

— Leo está dormido, y no queremos despertarlo... — explico el “guardaespaldas" del mencionado, es decir Rodrigo.

Hablaron los dos alphas que estaba dentro del bondi, mientras que el guardameta de la selección estaba afuera, y ya había comprendido el asunto.

— ahhh —

Dijo ya al entender, dando asentimientos unas repetidas veces. Para luego volver a abrir la boca.

— Pero... —

De repente algo hizo click en su cabeza y entro a aquel medio de transporte, sin titubear se acercó a aquellas tres personas allí dentro.

— Deja lo cargo y lo llevo a donde va... a dormir— no tardo mucho en acercarse al cuerpo inconsciente del Omega e intentar tomarlo para cargarlo, aunque fue detenido.

— Oe, lo llevo yo, no te hagas bardo — le dijo De Paul al haber agarrado el brazo del alpha antes de que toque al dormido Omega. Aun que trato de que no sea notorio su notable enojo en ese momento, aunque parecía que el Dibu ya lo habia notado.

— Están acá ya mucho tiempo — atacó mirando lo en dirección a los ojos.

— Pero no estamos gritando — contrataco sosteniendo le la miraba a su ‘compañero’.

Estuvieron mirandose directo a los ojos por unos pocos segundos, incluso se podía sentir el ambiente un poco tenso y con un aroma algo agrio y pesado.

Por un momento dejaron de lado al Omega para “concentrarse” en su pequeña disputa, y cuando iban a lanzar otro comentario fueron interrumpido por uno de los presentes.

— Eh boludos, tranquilos, no hay por qué... — sin lograr acabar su discurso o lo que iba a decir, se escuchó la voz enojada del director técnico, Lionel Scaloni, quien por la tardanza de sus jugadores los fue a buscar.

— ¿¡Que están haciendo!?— alzó la voz para los presentes lo escucharán — ¡Tenían que estar adentro hace un buen tiempo, ¿Por qué tardan?!— exclamó furioso adentrándose a aquel micro.

De la nada se escuchó un bosteso seguido de unos cuantos murmuros.

— Awh... — se escuchó aquel pequeño suspiro por parte del Omega que se había despertado por los gritos del recién llegado — ¿Qué pasó?— susurro pequeñito mientras frotaba sus ojos con una de sus manos.

— ¿ah?— espetó algo dudoso y se acercó hacia allí, al acercarse pudo notar como había un ligero aroma agrio, llegando a la conclusión de que hubo tal vez una posible pelea o alguna discusión.