R E D Scaloneta X Messi VIOLENTO-METRO

05 Celar.

Durante todo el tiempo que duró el entrenamiento y aquel frote de piel que hacia o cuando chocaba con sus compañeros, todo, absolutamente todo hacía que su rostro enrojeciera y que quemara. Diablos, necesitaba otra vez aquello que le fue dado anoche. Lo necesitaba.

Al final hubo un pequeña reunión entre el personal técnico y los jugadores, respecto a sus jugadas, cosas que los hacía resaltar y su estado físico.

Al finalizar todos fueron a los vestuarios, algunos se cambiaban de ropa, otros se bañaron y en caso de Leo, permanecer quieto y en silencio en una de las bancas blancas.

Rodrigo le daba pequeños empujones a manera de broma y algunos chistes que ahora eran relajados y sin tanta intensidad como el día anterior. Aunque el amigo de Rodrigo no, y con eso, era uno de los más cercanos al mismo. Leandro. El mismo había pasado por la mañana a la sala de juegos, por instinto, algo lo llevo allí, y sorprendentemente se encontró con un atoma a coito disimilado con un perfume y aromatizante.

Lo hubiese pasando desapercibido de no ser porque había encontrado debajo del pequeño sillón frente al televisor, una cadenita dorada, la misma que Leo siempre llevaba, además aquel aroma se parecía bastante al Omega, dulce, chocolate era Leo. Que irónico.

Iba a esperar a que todos se fueran o en tal caso irse con el Omega para poder hablar y así encararlo, pero no conto con que sus amigos se lo llevarían del lugar. Apenas termino de bañarse.

— Lean, vení vamos a jugar Play — le llamo De Paul con una sonrisa, junto a Cristian.

Volteo a mirar a su amigo mientras se secaba su corto cabello, hizo un gesto de "oh no" y contesto:

— uhh te voy a fallar — le dijo mientras se secaba.

— Dale, no seas cagón — insistio Rodrigo.

— Dale Lean vení — Está vez era Cristian.

— Eso, hacele caso al Cuti — apoyo.

Suspiro por lo bajo.

— Chicos no, tengo que hacer algo — se excuso mientras dejaba la toalla a un lado y se ponía una polera de tono gris.

Aquellos dos comenzaron a hablar bajito entre ellos, el ojo verde casi gris, aprovecho y termino de vestirse, todo bien hasta ahí, pensó que se irían y lo dejarían. Más no fue así.

— Lean... — llamo el Cuti.

El nombrando alzó la vista para verlo y solo se le quedó viendo.

— Dale vamos — insistio juntando sus dos manos haciendo una seña de suplica.

Suspiro. A veces tenía poca paciencia, pero era Leo, debía hablar con el. Aunque ya tendría la oportunidad.

— Ash, dale vamos, anda — se levantó, y llevo a empujones hacia aquel lugar al Cuti, quién sonreía triunfante.

— Re rápido aceptas he— le dijo De Paul con una sonrisa.

— Deja de joder — soltó una risa y le dió un pequeño golpe.

Aquel trio se marcho entre risas y algunos golpes pasivos o de broma entre ellos, en fin, amigos ¿No?