«𝘖𝘯𝘦-𝘚𝘩𝘰𝘵'𝘴 & 𝘏𝘦𝘢𝘥𝘤𝘢𝘯𝘰𝘯𝘴 [𝘈𝘯𝘪𝘮𝘦]»

𝑲𝒖𝒈𝒂 𝑻𝒆𝒓𝒖𝒏𝒐𝒓𝒊

Te acorraló contra la mesada de aquella cocina y continuó besandote.

-Pero mira que atrevida, provocandome cuando estoy experimentando en mí cocina antes de la batalla contra Tsukasa- Tomo una de las sillas que tenía cerca y se sentó.

Quitaste tu camiseta, dejando ver tus pechos voluminosos frente a él.
Kuga se cruzó de piernas, apoyando su mano en su mandíbula, obligadamente tuvo que inclinarse algo para delante, así, estando aún más cerca.

-A mí no me engañas Kuga, te conozco perfectamente, esa tonta manía de cruzarte de piernas en intento de ocultar tu erección- Relamiste tus labios mirándolo fijamente.

Él espero a que tomarás la iniciativa.
Comenzaste por inclinarte frente a el, quedando por debajo. Separaste sus piernas, abriendo camino a su miembro. Bajaste el cierre y desabrochaste el botón, dejando ver el boxer color negro con un notorio bulto.

-Vamos cariño, apúrate, no hagas tan larga la espera- Sonreiste ante esas palabras.

-Sabes que si dices que me apure, más lento voy a ir- Kuga sonrío de lado y se calló.

Quitaste su miembro de su ropa interior y lo acariciaste un poco con las dos manos. Los mechones de pelo que estorbaban los pusiste detrás de tus orejas.
Acercaste su miembro a tu boca, comenzando por la punta, tomaste tu tiempo para lamerlo de arriba hacia abajo. Terunori tomo todo tu cabello sosteniéndolo con sus manos por detrás de tu cabeza para que hagas mejor tu labor.
Sus gemidos tapados con leves suspiros y respiración agitada comenzaron a aparecer cuando fuiste un tanto más rápido, chupandolo todo por completo.
Pareció desconcertarse cuando sacaste su sexo de tu boca, pero su sonrisa volvió al sentir como con tus pechos envolvían su miembro, cubriéndolo casi por completo. Parecía impaciente por qué te muevas.

-¿Quieres que comience a moverme?- Preguntaste juguetonamente, obviamente ibas a hacerlo, solo querías que lo dijera y esperara por ello.

Asintió rápidamente con su cabeza, no iba a aguantar mucho más así que hiciste caso y empezaste a moverte. La punta de su miembro sobresalía, te inclinaste y comenzaste a lamerla.
Sus gemidos ahora eran nítidos, y con su miembro palpitante, estaba claro que se correría pronto.
Mientras tanto preparabas tu interior. Tus mano derecha se movía frenéticamente de atrás hacia adelante en tu entrada, Kuga al darse cuenta de eso se excito todavía más.
Tus líquidos bajaron por tus muslos, mojando toda esa zona. Por más que quisieras ocultarlo, también estabas impaciente como una pequeña perra en celo esperando a que la follen.

-Ya..basta..- Ordenó Kuga. Te detuviste al instante.

Golpeó suavemente sus piernas, como orden para que te subas y lo montes.
Se puso un preservativo y te sentaste encima. Comenzaste a besarlo fogosamente y a simular embestidas contra su miembro.

-Deja de jugar cariño, montame de una maldita vez- Dictaminó.

-Me está seduciendo de una manera increíble. Que vergüenza.♡︎- Le dijiste a tu senpai sonrojado.

Jugueteaste un poquito más y lo metiste lentamente dentro.

-♡︎¡Ah!♡︎- Gemiste al sentirlo dentro.

Kuga se limitó a suspirar y tomar tus pechos, en verdad le gustaban mucho.

-♡︎¡Kuga, justo ahí!♡︎- Terunori siguió golpeando donde ella le dijo, quería complacerla y hacerla sentir así de bien como él se sentía.

Tu senpai aviso que se corría en un sonoro gemido. Tu abdomen se contrajo, señal de que te correrías también. El miembro de Kuga era del tamaño perfecto, llegaba a tus lugares más sensibles y eso te encantaba. Te hacía sentir verdaderamente bien.

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