Corro por mi habitación mientras escucho los reproches de mi madre.
-¡Michelle Jones!, te advertí que llegarías tarde, nunca obedeces...
Dejo de oír cuando me encierro en el cuarto del baño, hoy es mi primer día de clases en la universidad de Londres.
Mi madre y yo nos mudamos a la ciudad de Londres para comenzar desde cero cuando mi padre fue hallado muerto en su camioneta por parte de unos atracadores los cuales él tenía problemas desde antes, le habían inculcado una deuda que no era de él. Ya hace un año de lo sucedido y por ende nos tocó huir de Denver «para que no nos hicieran daño».
Mis ojos se llenan de lágrimas al recordar a papá, fue un hombre lleno de alegría y carisma nos amaba e hizo lo inalcanzable para que estuviéramos bien.
Flashback.
- Mamá - le llamo - ¿Por qué papá se fue? - pregunto mientras termino mi paleta.
- Porque está haciendo lo inalcanzable para que estemos bien - dice mamá de volviendo mis esperanzas - muy pronto mi preciosa, muy pronto volverá por nosotras - Finaliza diciendo y asentí sonriente. Papá vendrá por nosotras.
Regreso a la realidad, ignorando mis recuerdos y me paro frente al espejo admirando mi belleza gracias a mi madre. Soy de tez blanca heredada por mis padres, mido 1.63, mis ojos son verdes oscuros iguales a los de mi padre, mis caderas son anchas, mi cuerpo está perfectamente moldeado y mi peso es perfecto para mi estatura. Ni muy flaca ni muy gorda solo perfecta.
Sonrío admirando mi cuerpo
- ¡Michelle, baja el desayuno está en la mesa, vas a llegar tarde a tu primer día de clases! - La voz de mi madre me devuelve a la realidad y me apresuro a bajar, me dirijo hacia la cocina donde ya se encuentra mi desayuno, huevos revueltos con tocino y tostadas de pan.
Empiezo a comer mientras mi madre repara mi atuendo, llevo unos vaqueros negros, un crop top y unas converse del mismo color.
-Deberías renovar tu guarda ropa, pareces que fueras a un funeral vestida de negro - habla en cuanto me ve.
Ruedo los ojos mientras me encamino a la puerta una vez termino de desayunar.
-Buenos días para ti también madre.
la señora Bianca no es que le agrade mucho mi guarda ropa ya que la mayoría son de color negro. abro la puerta y me dirijo hacia el auto.
Observó como mi madre se dirige hacía a mi.
-Te dejaré la tarjeta para que renueves tu guarda ropa- habla con molestia - y por favor que no sea ropa negra -reprocha entrado al auto - ya tienes demasiada, procura no hacer caso omiso a lo que te digo Michelle, ya sabes que no es la primera vez que te lo digo no me obligues a ir personalmente y escoger la ropa por ti. - Termina por decir mientras enciende el auto.
- Claro, me compraré un vestido rosa chillón - le respondo con ironía blanqueando los ojos y me lanza una mirada de advertencia.
Se la pasa todo el camino hacia la universidad reprochando por mi guarda ropa hasta que llegamos a UNIVERSITY OF LONDON, mi madre suspira y se gira a mirarme.
-Trata de no meterte en problemas y si necesitas algo, llámame sabes que siempre estaré aquí para ti - dice e inmediatamente me lanzo a abrazarla, reparto besos por su cara que la hacen reír.
Mamá es la mujer más amo en el mundo, a pesar de sus regaños siempre está ahí para mí aún más cuando estoy mal, deja el papel de madre y se convierte en la amiga que necesitas.
Bajo del auto y me dirijo hacia el interior de la universidad, mientras comienzo a buscar la oficina del director.
Vacilo por varios de los pasillos atestados de personas mientras trato de hallar a alguien que me guie hacia la dirección.
- Hola disculpa, ¿me podrías decir dónde queda la oficina del director? -Me dice una chica de tez blanca y cabello rubio teñido de rosa en las puntas.
- Estamos buscando exactamente lo mismo - le respondo con una sonrisa y me presento - Mucho gusto Michelle Jones, ¿y tú?
- Karla Macleine. - Responde - llevo 25 minutos intentando preguntarle a alguien donde queda la oficina del director, pero al parecer no es que les guste responder - dice arrugando la nariz en un tono de reproche que me hace sonreír.
Avanzamos juntas por los pasillos hasta que logramos encontrar la oficina del director.
El director Lenny Vargas se encarga de darnos la información de lo que debemos saber, y nos entrega los horarios respectivos, Karla se despide de mi hacia su primera clase y yo tomo rumbo a otro pasillo.
Camino por los pasillos de la universidad embelesada por lo grande que es, pero choco con alguien yéndome de bruces al suelo.
Alzo la mirada encontrando con un chico atractivo de ojos color miel, nariz respingada, labios rosados y unas cuantas pecas en su rostro. Su pelo color azabache lo hace ver sumamente más lindo de lo que es y su tez es pálida.
Se da la vuelta dejándome en el suelo.
Engreído.
- Al menos una mano, que poca caballerosidad - comento haciendo que se gire hacia mí.
- Yo no soy el que anda despistado, como si no tuviera los pies sobre la tierra - dice con un dejé dé amargura y hastío al dirigirse a mí.
- Oye, yo si tengo los pies sobre la tierra. - Respondo indignada - pero tranquilo se levantarme sola.
- Qué bien - responde sin mas y se gira sobre sus talones siguiendo por donde iba.
Indignada avanzo por mi parte a otra dirección, sigo por uno de los pasillos buscando el número de mi primera clase.
Idiota chico de ojos miel.
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Mil barreras para amar ©
ChickLitPara Michelle su vida simplemente era "normal" aburrida y monótona, su padre había muerto en manos de sus deudores o como mejor le dijeron "atracadores" los cuales al no sentirse satisfechos quisieron cobrar el resto de sus deudas con ellas, logrand...