11. Hija de Hécate

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Cabello negro y ojos verdes... Me parecía demasiado familiar y sin embargo no sabía quién era.

–La vas a incomodar con tu mirada .–

Salté en mi asiento asustada y giré mi vista a Nico, quien ya había llegado a la arena con una playera limpia de merengue.

–Yo... –mascullé

–¿Por qué miras tanto a Lou Ellen? –preguntó con una ceja alzada para después sentarse a mi lado.

Con que ese es su nombre...
–No sé .–dije y regresé mi vista a ella –Siento como si ya la conociera .–

Nico se encogió de hombros
–Puede ser porque conociste a su madre Hécate en el Inframundo .–

–Oh...– mascullé.

La vi un par de segundos más antes de que se me ocurriera una buena idea. Después de entrenar voy a ir a presentarme y enseñarle la poción que me dieron, tal vez y ella sabría de qué se trata.

–Uhm... ¿Danielle? –Nico me sacó de mis pensamientos –¿Pasa algo con ella? –preguntó y me miró extrañado.

Dudé un par de segundos en contarle todo, pero preferiría averiguar un poco más antes de preocuparlo.
–No es nada .–dije con tranquilidad y me levanté de un salto de la banca donde lo había estado esperando.

Me miró con los ojos entrecerrados como tratando de adivinar mis pensamientos pero antes de que pudiera decir algo apareció Leo el hijo de Hefesto y lo abrazó por los hombros.

–¡Sombritas! –dijo el chico y casi al instante Nico se deshizo del abrazo.

–Leo no lo molestes...–y entonces apareció Jason

En ese momento hubieron unos segundos que parecieron eternos de incómodo silencio en los que solo se veían fijamente Nico y Jason.

–Solo queríamos saber cómo les había ido en su misión...–soltó finalmente el rubio mientras se rascaba la nuca.

Al instante me sentí un poco culpable de haber provocado todo esto entre Nico y sus amigos, puse mi mano derecha sobre mi codo izquierdo encogiéndome mientras veía el suelo y buscaba una buena razón para no irme y dejarlos arreglar sus cosas.

–Todo salió bien .–dijo Nico fríamente poniéndose enfrente mío con recelo.

Los chicos se quedaron viendo un par de segundos, Jason con tristeza y Nico con rencor, fue ahí cuando supe que tenía que hacer algo al respecto.

–Lo... siento...– solté finalmente y me coloqué donde me pudieran ver ambos. –El otro día no reaccioné de la mejor manera y me gustaría disculparme contigo Jason y con Piper, no debí haberla golpeado y estoy muy arrepetida .–dije con sinceridad.

Sus expresiones cambiaron a unas de sorpresa, para después sonrojarse.

Jason me sonrío y asintió con la cabeza para luego decir
–Yo también quisiera disculparme .–y se paró firme como si de un militar se tratara, justo como imaginarías al antiguo pretor de la Nueva Roma. –Nico... yo solo quiero que sigamos siendo amigos, tu sabes que me preocupo por ti, así que si aceptas mis disculpas prometo dejar de comportarme como el líder fastidioso que suelo ser y empezar a apoyarte como un amigo.–

Las palabras sinceras de Jason me hicieron esbozar una sonrisa.

Y Nico quien había permanecido callado finalmente soltó un gran suspiro.
–Tu ganas Grace...–y fijó su mirada en el suelo –Es verdad que no me gusta que me estés diciendo qué hacer todo el tiempo, pero tu amistad es muy importante para mi aunque a veces no sepa cómo demostrarlo...–

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⏰ Última actualización: Jan 14 ⏰

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