Venganza o maldición

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Capítulo 32

[W]

Se me habían vuelto a escapar de las manos, pero no tengo razón para alarmarme, todavía. No estoy jugando a esto de manera bruta, sino inteligente y un paso por delante. Ellas creen tener la ventaja, pero yo tengo ojos y oídos en todas partes, yo se cada maldito paso que dan y no tienen idea de aquello.

No tienen ni idea de que su escondite ya fue revelado a mis ojos. Que mi localizador lleve parada más de dos horas en el mismo lugar no las encubre, de hecho las delata. La idiota de Lucia se cree importante, cree que todo había quedado en sus manos, no sabe que también es carne de cañón en caso de que sea lo necesario. Así que prefiero decir que ella se creía importante, nunca lo fue, solo era otro peón más en un juego más grande.

Así que mi plan se ponía en marcha, ya teniendo a los otros dos distraídos me dirigí al punto que marcaba el rastreador de lucia. No tenía ningún minuto que perder así que ponerse en camino era lo mejor.

𒊹︎𒊹︎𒊹︎𒊹︎
[B]

Todavía estaba procesando lo que había pasado hace unas horas. Todo había pasado tan rápido que aún no podía terminar de creerlo.

Skara seguía hecha bolita en un rincón de esa habitación, mientras yo no estaba mucho mejor, ya que todo lo que había pasado durante estos días era horrible, ya era suficiente con todos los meses anteriores y estás situaciones recientes no ayudaban. Estoy cansada en muchos aspectos, sólo quiero llorar pero no puedo, ya que cada día qué pasa todo empeora aún más, simplemente ya no quiero estar viviendo esto. Las pesadillas me persiguen cada vez que cierro los ojos, su imagen me atormenta en sueños y ya no puedo más con esto, ya no puedo seguir viviendo esta realidad, de la cual no tengo escape.

Quiero llorar, quiero gritar y quiero respuestas. Porque cada vez estoy más segura de que quien me persigue no es humana, o perdió su humanidad hace tiempo. Pero hay algo más grande detrás de todo, o de ese me quiero convencer, o por lo menos algo además de esto. Pero aún no quiero creer que por eventos del pasado alguien me quiera muerta o en peores condiciones. Tal vez yo era la hija de perra cuando era joven, pero ella perdió la cordura en todo sentido.

Me siento débil e inútil, sólo quiero acabar con esto lo más rápido que pueda. Solo quiero dejar de sentirme tan miserable por un minuto, pero no puedo.

Pero salí de mis pensamientos al escuchar como la trampilla del sótano era forzada. Definitivamente alguien nos había encontrado y habían dos posibilidades, una era buena y la otra mala. — ¡¿Quien está ahí?! — Escuche gritar a Skara. No hubo respuesta y la trampilla fue abierta, me aleje lo más posible de la entrada al sótano, intentando esconderme en un rincón con mi respiración agitada, temía lo peor, y lo peor sucedió. Pude ver esa conocida silueta abalanzarse sobre Skara, ella tenía esa mirada, se veía dispuesta a matarla a golpes. Skara parecía intentar esquivar y defenderse de los golpes certeros a su rostro por parte de la más alta. Pero todo era en vano, y su fuerza no parecía humana, pronto la chica de cabello plateado cayó ¿inconsciente? o ¿muerta?

No podía controlar mi respiración, sentía que en cualquier momento iba a sufrir un paro cardíaco, las lágrimas salían de mis ojos de manera involuntaria, mientras cada una de mis pesadillas volvían a mi mente y distorsionaban la realidad. Cerré los ojos por un instante y cuando los volví a abrir pude ver como una sombra se acercaba a mi con un fierro en una de sus manos o eso era lo que podía distinguir, prontamente recibí un golpe con este y caí inconsciente.

Cuando desperté estaba atada a una silla en un lugar que desconocía por completo, pero a la vez se me hacía de algún modo familiar. Paredes de piedra cubiertas por placas de metal viejas, y con manchas de sangre oxidada. — Ya despertaste, pensé que dormirías un poco más.— Cuando escuche esa voz, mis ojos se dirigieron a donde esta provenía. Ahí estaba el diablo, sentada al otro lado de esa pequeña habitación con la mirada fija en mi. Mi respiración se volvió a agitar.

— ¿No tienes nada que decir al respecto?— Cuando escuche esas palabras salir de su boca, me dió un escalofrío, ya que ella parecía estar juzgándome por haber escapado, igualmente no dije nada. — Sabes, yo confié en ti y me decepcionaste. Pensé que habíamos pasado esta etapa.— Al escuchar sus palabras por fin pude darme cuenta de algo, esa desgraciada que tenía enfrente mío, nunca había sido amable, solo quería manipularme con algo, hacerme pensar que podía confiar en ella.

— ¡Cierra la puta boca! — Ya no podía seguir escuchándola, simplemente ya no podía y explote. Pude ver como esa cara de decepción fingida desaparecía de su rostro en un ceño fruncido y una cara de mirada cansada. — Sabes, esto nunca fue solo por venganza. Y me lo estás haciendo más difícil de lo que necesito.— Esas palabras provenientes de la más alta, me dejaron confundida. Pude ver cómo está se levantaba y volvía con un libro en sus manos. — Seguramente recuerdes este libro, es probable que lo hayas visto cuando intentaste pedir ayuda con mi teléfono.— Escuche con atención y desconfianza las palabras ajenas, mientras la peliverde hojeaba el libro, terminando por mostrarme una página concreta.

— En pocas palabras, estoy maldita y de mi humanidad me queda poco, para recuperarla tengo que matarte. Si no lo hago tarde o temprano no solo perderé mi humanidad de manera superficial, me transformaré físicamente en un monstruo y cada vez estoy más cerca de eso. Todo el rencor que junté en tu contra durante tantos años causó esto. Tal vez sea inhumanamente fuerte y ágil pero eso no compensa el vomitar sangre, los golpes y contorsiones involuntarias. Y un montón de problemas más como la sed de sangre.— No sabía si debía confiar en ella pero el estar viendo una página de ese extraño libro, que hablaba de lo mismo pero más detallado. Me hacía tener un poco más de confianza en sus palabras.

Im Not Your Pet • Beta BoschlowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora