Nigromante

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Capítulo 35

[G]

Mis oídos escucharon el crujir de la puerta y fue en ese momento en el que comencé a dar todo por perdido, rogaba que no fuese quien pensaba, pero la probabilidad era mínima, casi nula, entonces no contaba con más remedio que esperar lo mejor, pero mis esperanzas se fueron por la borda tras ver como algo rodaba escaleras abajo en dirección al sótano. No tarde en identificar la silueta, era un cuerpo, no cabía duda. De inmediato busqué refugio en algún escondite que pudiera encontrar en ese sótano, lo próximo que vi fue al Diablo, bajaba las escaleras, parecía consternada por algún motivo. Ella dibujo en el piso un montón de runas o algo similar, bastante desconocidas para mi, lo cual me inquietaba. Pronto prendió un par de velas y por fin pude identificar de quién era el cuerpo, era Lucia, lo cual me era perturbarte, ya que nunca esperé que Willow fuera una nigromante.

Quería huir de ese lugar lo más pronto posible, porque no quería saber qué era lo que estaba a punto de presenciar. Pero ya era muy tarde, Willow acomodó las velas alrededor de las runas, mientras hojeaba algo en el libro de magia negra que había visto anteriormente, ella lo dejó abierto en una página, mientras recogía una navaja del escritorio. Willow tajó su mano, dejando escurrir su sangre sobre el alrededor de las runas, luego colocando su mano, con el tajo aún abierto, sobre el pecho de Lucia. Estuvo un par de minutos de esa manera, donde parecía que nada sucedería, pero la sangre en las runas comenzó a brillar en un fuerte rojo carmín, mientras del tajo de Willow comenzaba a brotar una oscura mugre o energía, no podía descifrar bien que era aquello, nunca había visto algo similar. La mugre comenzó a brotar de las heridas de Lucia, al par que lo hacía de los ojos y boca de la ya mencionada morena.

Era un escenario perturbador en todo sentido, quería apartar mi vista de aquello, pero el morbo y la curiosidad me llamaba a seguir observando. Todo concluyó en el momento que Willow quito su mano, Lucia se levantó vomitando la materia oscura y luego abriendo sus ojos, los cuales habían perdido su color avellana y ahora eran de un profundo color carmín, que incluso me atrevería a decir que brillaba en la tenue luz de la habitación. — Muévete animal, hay mucho que hacer, tenemos ventaja, pero no dudo que ellos encuentren pronto la ciudad fantasma.— Willow regaño a la morena, como si no acabara de revivirla de la misma muerte. — ¿Que? ¿Como carajo? Bueno, por lo menos descubrí que el infierno existe ¿Porque mi boca sabe a muerto? — Se notaba que Lucia tampoco tenía idea que Willow podía hace eso. — No importa el como, tú sabes la fuerte energía que produce mi maldición, no necesito sacrificar a nadie para poder traer de regreso a gente, y tu boca sabe a muerte porque todavía estás en un estado pútrido, con el pasar de las horas ya serás más humana y menos un cadaver andante.— Tras tener esa información debía salir de ese lugar lo antes posible, además debía llevarme ese libro de todas maneras.

Aunque el saber eso aumentaba aún más mi tensión sobre la situación en la que me encontraba, no quería ser descubierto, porque sería una muerte certera, ahora tenía más miedo que nunca de saber que podría hacer el diablo con mi cuerpo inerte. Espere por unos minutos a que las dos mujeres abandonaran el apartamento para poder salir de mi escondite, antes de irme tomé el libro y un par de fotografías del aún fresco ritual, subí del sótano para decidir salir por el balcón y evitar toparme con Willow o Lucia saliendo del edificio.

En la noche ya estábamos reunidos todos de nuevo y todos teníamos aunque sea un poco de información útil para rescatar a Boscha. — Mierda ¿Porque nunca me contaron sobre lo que Willow puede hacer? Te puedo apostar que hasta Eda sabía y yo era el único que no estaba enterado de que ella era un monstruo de una manera mucho más literal. — Le reclame a Amelia tras haberle entregado la información. — Gus, calma, eras el menos cercano a ella, es normal que nadie te contara, además ni yo sabía que Willow podía hacer algo como eso. Y creo que hasta tú eres consciente de que estuve bastante cerca de salir con Willow.— Skara se sorprendió tras las palabras de Amelia. — Espera ¿Tu y ese monstruo? ¿Juntas por completa voluntad? — Skara comenzó a atormentar de preguntas a la Blight, la cual suspiró antes de responder. — No quiero hablar mucho de eso, es incómodo, pero ella es una muy buena mentirosa, y sabe como encantarte el oído con palabras amables y cumplidos que te erizan el corazón, pero la realidad es que ella nunca verá a nadie como una persona, porque para ella todos somos herramientas, es una psicopata sin empatía, que haría lo que fuera por cumplir sus deseos.— Hunter terminó por interrumpir la interesante conversación. — Lamento cortarles el tema, pero hay algo más importante, se de la llamada ciudad fantasma. Es el nombre que los detectives locales le colocaron a una ciudad obrera abandonada a los limites del estado.— Amelia sonrió tras escuchar eso, al parecer no todo estaba perdido y había esperanza de salvar pronto a Boscha. — Entonces está noche debemos prepararnos de la mejor manera, no hay más tiempo que perder, saldremos de madrugada para estar temprano por allá, asumiendo que tú como detective local sepas cómo llegar.— Nos ordenó Amelia, mientras que su última oración estaba dirigida a Hunter como el actual jefe de detectives de la ciudad y quien había asumido el cargo después de la muerte de Emira.

Im Not Your Pet • Beta BoschlowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora