El perrito era el centro de atención, pasando su cabecita por la palma de la mano de Jisoo, ronroneando por el tacto.
—Ya pásame a perro —dijo Jennie sentándose al lado de Jisoo en el sillón, tomando en brazos al pequeño perrito y dejándolo en sus piernas, haciendo que el pequeño cachorro se acomodara en sus piernas para poder dormir, moviendo su colita por las caricias que le daba la castaña.
—¿En serio tu perro se llama "Perro"? —preguntó sorprendida Dahyun, quien se había autoinvitado al departamento de ambas jóvenes. Estaba sentada en el posa brazos del sillón donde estaba sentada Jihyo mirando las noticias.
—Estamos buscando un nombre para el aún —dijo Roseanne sentándose al lado de Jennie, acariciando al cachorro.
El pequeño ya llevaba una semana en el departamento, y por supuesto que lo habían llevado al veterinario. Estaba sanito, y por las noches, intentaba trepar las sábanas de las camas de cualquiera de ellas para acurrucarse en el cuello de estas. Todo dependía de quien tuviera la puerta entre abierta esa noche.
—Sí, bueno. Jihyo, ¿podrías no aparecerte por la cafetería, por favor? —preguntó seria Jennie mirando a la chica.
En la mañana, Jihyo entró cómo si fuera su casa a la cafetería, y claro, solo Jennie y Roseanne podían verla, a no ser que ella decidiera ser vista. Estuvo molestando a la castaña toda la mañana, hablado de distintas cosas, opinando de los clientes y en una, pasando a botar la canela. Por supuesto, Jennie debía fingir que nadie más estaba ahí, sino sería visto cómo una loca.
—¿Qué? ¿Por qué? —preguntó haciendo un mohín— En esa cafetería hay más chismes de lo que imaginé. Son muchas historias en un mismo lugar, es impresiónate —Dahyun miró a Jihyo y luego a Jennie.
—Hey, yo también quiero ir —pidió ilusionada.
—Dahyun, por favor —dijo Jisoo negando con la cabeza.
—Tranquila, nadie de los vivos me puede ver. Paso desapercibida entre los vivos, no saben que estoy ahí —sonrió traviesa Jihyo, sintiéndose cómo una niña haciendo una travesura. Además, me gusta asustar a tu amiga.
Roseanne solo rio, mientras que Jennie rodó los ojos. Jisoo por su parte se dedicó a ver las noticias que pasaban.
No era una reunión de amigas o algo por el estilo, de hecho, Jisoo solo había ido por el perrito, además porque Dahyun le suplicó a que vayan, porque si iba ella iba sola, se vería "sospechoso". Sea cual sea el motivo, estaban ya ahí sin hacer mucho, solo comiendo y viendo lo que pasaban por la televisión, y aunque no querían ver realmente las noticias, en el canal donde estaban viendo una película fue interrumpido por una noticia de última hora.
—"...Aunque se creía que era un accidente, la muerte de este joven hombre fue, aparentemente, un suicidio..." —las presentes en la sala prestaron atención a lo que decía la noticia. No se habían enterado de nada, solo de esas últimas palabras.
Jihyo y Dahyun se miraron serias, solo ellas entendiendo sus miradas. En silencio y sin comentar nada, ambas se levantaron para irse a quien sabe dónde. Roseanne fue la primera en darse de cuenta de las acciones sigilosas de ambos seres, como si estuvieran ocultando algo.
—Hey, ¿a dónde van? —preguntó la rubia curiosa.
Dahyun se relamió los labios y se rascó su nuca nerviosa.
—Debemos irnos. Hay que darle la bienvenida a un nuevo integrante.
—¿Van a cuidar a alguien que volverá a la vida? —preguntó esta vez Jennie.
—No, no en sí —respondió Jihyo— Alguien nuevo entre los que cuidamos a los que revivieron —ante la mirada curiosas de las presentes, solo sonrió y negó con su cabeza para que le quiten la importancia— Que da igual. Nos vemos luego.
—¡Adiós! —se despidió Dahyun alegre como siempre siguiendo a Jihyo que ya estaba yéndose.
Las presentes en la sala se miraron entre ellas confusas, sin entender la rara situación que habían presenciado.
Como fuera, Jennie no podía olvidar que ese día debían salir a manejar, esta vez en la calle e intentar que por lo menos Roseanne maneje hasta la esquina.
Había que aprovechar que no había autos pasando por la autopista, estaba todo tranquilo por su sitio.
—Eh, Roseanne —llamó Jennie obteniendo la inmediata atención de la mencionada. Se levantó y tomó las llaves del auto, alzándolas para dejarlas a la vista de la que sería la conductora— Vamos —demandó firme.
Roseanne chasqueó con su lengua haciendo una mueca, levantándose de mal gusto y tomando las llaves sin emoción alguna. Aun así, sabía que era por su completo bien. Y sin decir nada, empezó a caminar a la puerta a pasos cortos, colocándose su abrigo colgado en la entrada.
—¿Y tú qué? ¿Te vas a quedar aquí cuidado a perro? —preguntó Jennie viendo como Jisoo estaba toda feliz y cómoda en el sofá jugando con el cachorro.
—Deben encontrarle un nombre, no se puede llamar "perro". Y sí, me quedaré aquí. ¡Que les vaya bien! ¡Suerte! —se despidió sin siquiera mirarlas, teniendo su completa atención el precioso cachorrito.
La castaña solo rodó los ojos y negó con su cabeza.
Tomó las llaves del departamento y su abrigo, dirigiéndose a la salida para empezar a ayudar a Roseanne nuevamente. Sabía que tarde o temprano, la rubia volvería a disfrutar de manejar por las ciudades y carreteras, o al menos eso seguía esperando.

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¡𝑬𝒔𝒕𝒆 𝑵𝒐 𝑬𝒔 𝑴𝒊 𝑪𝒖𝒆𝒓𝒑𝒐! - 𝑪𝒉𝒂𝒆𝒏𝒏𝒊𝒆
Fiksi PenggemarUn accidente que los llevó a la muerte, pero también a una nueva y rara aventura. ¿Cómo reaccionarías que, de un día para el otro, pasaste de ser un chico a una chica? ¿O que ahora debes vivir en otro cuerpo? No era una idea fácil de afrontar que de...