Un Guerrero Doncel

Capítulo 10

Al día siguiente el batallón del general Sean, iba a salir a patrullar las fronteras del norte.

Fanxing realmente no quería ir, no quería dejar solo al doncel.

WangYi le sonrió sinceramente - debes ir tigre - subió su mano y acaricio la mejilla de Fanxing - debes cuidarte mucho y volver a mí, te estaré esperando tigre - lo abrazo fuerte, no quería perder otro amigo más.

Seguro estarás bien A-Yi - cuestiono Fanxing teniendo aún abrazado al castaño.

Claro que sí Haoxuan se queda conmigo, por favor, regresa bien si.

Ok, espérame leoncito.

Ambos sonrieron y se abrazaron fuerte, Fanxing le dio un beso en su frente y fue hacia cabos blancos para irse con el general Sean que lo esperaba con su mirada sería a cierta distancia.

Las invasiones de los Liu se hacían muy rápido, parecía que el líder estuviera desesperado.

Cuando llegaron a la frontera en el área Oeste, estaba un gran grupo del enemigo esperándolos.

La batalla fue fuerte, al parecer deberían cambiar las tácticas, porque el enemigo las conocía como la palma de su mano.

El general Sean se distrajo por un momento, uno de los hombre de los Liu aprovecho ese momento y lo hirió con su espada, haciéndolo caer al suelo.

General Sean - grito Fanxing, que estuviera enojado con el por lo que le hizo a su amigo no quería decir que le deseaba el mal.

Corrió hacia el a ayudarlo.

General, por favor aguanté - busco algo que le sirviera como una venda para poder presionar la herida.

El enemigo al ver, se fueron a dar las buenas nuevas que habían salido victoriosos.

Todos corrieron ayudar a los heridos y al general, los pusieron en una carreta y salieron rumbo a la base militar.

El general Sean, pidió a los soldados que llevaban la carreta donde iba el que lo dejarán solo por un momento con Fanxing.

El tigre solo lo veía serio - deberíamos irnos general y tratar su herida.

Quiero que me hagas un favor, se que debes odiarme por lo sucedido con WangYi, pero nunca lo entenderías si te lo explicará.

No soy bruto como usted lo piensa general, tampoco soy menor si eso es lo que cree que le impide decirme, ambos tenemos la misma edad general.

El azabache se sorprendió al escucharlo hablar, pensó que el era menor que el castaño.

Se que no merezco perdón por como me comporté, pero era lo mejor, el debería cortar los lazos conmigo, los sentimientos en campo de batalla nos hacen débiles, yo tampoco quiero perderlo.

Le dije todo eso, porque quiero que borre todos sus sentimientos, que haga fuerte eso lo va hacer triunfar en la vida, el muy bien lo sabe, su padre se lo aconsejo.

Si es así como dice - suspiro fuerte el tigre - no cree que había maneras para saber decirle las cosas.

El azabache sonrió - tu mejor que nadie conoces a WangYi y sabes que no hay manera de hacerlo entender con palabras, hay que demostrar con hechos.

Hay muchas maneras para poder demostrarle a WangYi, esa parte general, creo que usted tomo la decisión incorrecta, espero que en un futuro no se arrepienta de eso.

Ahora dígame en qué quiere que le ayude - frunció su ceño, ya no quería seguir hablando de eso.

Quiero que le des mi placa, dile que morí - levanto su mano con la plaquita de jade que llevaba su nombre.

No - negó con firmeza Fanxing - no juegue con eso general, acaso quiere que A-Yi muera al saberlo.

Se lo que hago Fanxing, tu y yo sabemos que a pesar de lo que yo le dije, el aún tiene sentimientos por mí, yo quiero que el rompa ese lazo, quiero que el olvide todo ese amor que dice tener - lo vio en silencio, pudo observar como el ceño del tigre se fruncía.

No estoy de acuerdo con esto general.

No vas a mentir Fanxing, sabes que la herida que tengo no da seguridad que vaya a sobrevivir, quiero que lo hagas, quiero que me olvide para que sobreviva en el campo de batalla, que se haga fuerte.

El azabache sonrió al ver cómo convenció de rápido al joven.

No cante victoria general, si acepto no es por usted, sino porque yo también quiero que A-Yi lo olvide por completo y dejé de estar sufriendo por alguien que al parecer no le importa sus sentimientos.

Fanxing tomo la plaquita y llamo a los soldados para empujar la carreta del general.

El azabache quedó pensativo por las palabras de Fanxing, acaso el era un egoísta, el lo único que quería era que su doncelito sobreviviera a esta guerra.

Al llegar a la base militar, WangYi corrió a la entrada a buscar a Fanxing, aunque también su corazón buscaba a otra persona.

A pesar que el otro lo había lastimado y jugado con sus sentimientos, el aún lo amaba, no podía olvidar un amor así de la noche a la mañana.

Fanxing lo observó con un semblante triste, el castaño sintió una opresión en su pecho cuando vio como a su lado en una carreta llevaban el cuerpo del azabache.

Sus labios y manos temblaban del miedo, no, eso no podía ser posible, sus lágrimas empezaron a derramarse por su rostro al ver en la mano de Fanxing la plaquita de jade de Sean.

Antes que Sean muriera - trago fuerte - me pidió que te diera esto WangYi - extendió su mano para que el otro la tomará.

El castaño sintió sus piernas temblar del miedo y dolor, siempre temió que un día le diera esa mala noticia.

Sus últimas palabras fueron que te dijera, que nunca te rindieras WangYi.

Fanxing no soporto verlo de esa manera dio la vuelta y se fue hacia donde estaban los heridos para apoyarlos.

El castaño tomó fuerte la placa y la llevo a su pecho al lado de su corazón, para sentirlo cerca.

Por la noche fue al lago a lavar la plaquita y empezó a golpear el agua y llorar la perdida de su alma gemela.

En medio de la oscuridad dio un fuerte grito de dolor, nadie se acercó a ver qué pasaba porque sabían que era el dolor de la perdida de su general.

El tiempo pasó y el castaño entro en depresión, se la pasaba llorando en su tienda de campaña, las primeras noches no comía y empezó a tomar alcohol.

Dylan disfrutaba viendo en ese estado a WangYi, se sentía satisfecho porque ya había quitado una piedra de su zapato, uno más y sus planes se harían realidad.

Los soldados estaban esperando una orden de misión oh el entrenamiento de su general WangYi, pero no lo veían por ninguna parte.

Cuando el no estaba tomando, se la pasaba durmiendo, últimamente se sentía muy cansado y somnoliento, le echaba la culpa a su estado.

Dejó de tomar alcohol porque sentía malestar en su estómago, no estaba acostumbrado a eso, con solo el olor le causaba náuseas.

El tiempo pasó tan rápido como si nada un mes de la muerte del general Sean.

Muchos se quejaban de ver qué el general WangYi en estaba en ese estado, creían que no les importaba sus tropas, ellos también se pusieron a beber.

Habían noches en que se despertaba llorando por los sueños que tenía con Sean.

Fanxing y Haoxuan estaban tristes al verlo de esa manera, sabían que estaba pasando por un estado de luto y no dijeron nada por el momento.

Pero se estaban cansando de verlo así, empezó a bajar un poco de peso y su semblante era muy pálido.

Fanxing motivo a los compañeros a entrar por si solos, pero nadie quería hacerlo, no tenían motivación alguna.

Compañeros entrenemos nosotros mismos.

Y para que tigre, si ni siquiera le importamos al general.

Acaso todavía hay algún general no veo ninguno.

Que dices - grito con molestia y su espada en su mano Haoxuan a sus compañeros.

Haoxuan calma - lo tomo del hombro Fanxing - ven entrenemos solo nosotros.

Ellos solos estuvieron entrenando, no habían podido acercarse al castaño, el no los quería cerca aún, tenía mucho dolor y no quería que nadie lo viera así.

Esa noche salió a las aguas termales y se recostó en la roca, en qué muchas veces estuvo con Sean viendo el cielo estrellado.

Con solo recordarlo sus lágrimas empezaron a brotar de sus ojos, regreso a la habitación a seguir durmiendo.

Por la mañana Fanxing se enojo y fue a verlo, ya era momento que saliera de ese estado, el no valía la pena, acaso el no se recordaba todo lo que lo hizo sufrir antes de esa tragedia.

Lo vio tirado en el suelo durmiendo con su rostro aún hinchado de tanto llorar.

Fanxing corrió hacia donde vio que el coloco la plaquita de jade con el nombre de Sean, empezó arrancar también las de sus amigos.

Estaba molesto quería hacer entrar en conciencia a WangYi.

WangYi despertó rápido al escuchar el sonido y empezó a pelear con Fanxing al ver que este tomo la plaquita de Sean.

Que haces Fan Fan - empezó acercarse a él para tomar la plaquita.

Estás en ese estado para estar recordando a los muertos A-Yi, ya estoy cansado de verte así, te has olvidado de tus amigos, de tu gente, recuerda a los vivos - grito empujando al castaño peleando con el.

Ya déjame a mi, se que hacer Fan Fan, no lo entenderías - grito frustrado el castaño.

Reacciona WangYi, tienes responsabilidades, debemos ganar esta guerra, regresar con tu padre y el mío, acaso no piensas en ellos también.

WangYi lo tiró fuerte, quitando su plaquita y quedó con su puño en el aire, dispuesto a pegarle a su hermano del alma.

Ya no eres mi hermano al que yo siempre solía admirar - lo empujó y se levantó - siempre quieres escapar y nos estás dejando en manos del enemigo.

Jamás en mi vida te imagine siendo tan egoísta WangYi, solo piensas en ti, porque no piensas en nosotros que estamos aquí esperando por ti, acaso quieres vernos morir también - grito con lágrimas en su rostro haciendo reaccionar al castaño.

Acaso no recuerdas todo el daño que causó el en ti, todo lo que el te hizo sufrir, porque no me vengas con mentiras que es por todos que estás así, es solamente tu corazón que lo anhela a él, reacciona por una vez más en tu vida y sigue adelante como un día prometiste WangYi.

El castaño no dijo nada, solo se quedó en el suelo llorando y escuchando lo que Fanxing decía.

No decepciones a tu padre y al mío, el quería que tu fueras un buen líder, reacciona a tiempo si no quieres seguir con arrepentimiento, perdiendo a más de nuestros soldados.

Fanxing salió del lugar donde estaban dejando a un castaño aún perdido en sus pensamientos.

Se fue a su cama y lloró por última vez su dolor, dio gritos de dolor que llegaron hasta los rincones de toda la base militar.

Fanxing tenía razón, debía cambiar su forma de ser en estos momentos.

Su madre estuviera decepcionado de el al verlo todo desaliñado.

Fue a tomar un baño a las aguas termales en la madrugada, se cambió, coloco la plaquita de jade con el nombre de Sean en su cintura junto dónde iba su espada.

Al llegar al campo de entrenamiento vio a Fanxing y Haoxuan entrenar y uno que otro soldados acompañándolos, los demás estaban sentados en el suelo.

Al verlo se levantaron de inmediato y se pararon al ver lo decidido que el estaba yendo hacia al frente de ellos.

Tigre - susurro Haoxuan cuando vio al castaño subir al lugar donde daban las motivaciones.

Fanxing sonrió con orgullo al ver a su hermano de nuevo con su rostro en alto.

En línea compañeros - grito fuerte con una sonrisa Fanxing.

Todos obedecieron ese llamado y corrieron a ponerse en línea para obedecer a su líder.

Quiero decirle algo - empezó hablar el castaño - en todo este tiempo que hemos ido a combate siempre eh tenido muchísimo miedo - suspiro profundo.

Nunca pensé que el temer a lo incierto me hiciera perder - trago fuerte - a muchos de mi gente y así mismo - suspiro profundo - a un amigo muy especial para mí.

Se refería al azabache, pero delante de los demás no podría mencionarlo como una pareja, al final Sean le había dejado muy en claro que tampoco lo eran, solo el lo había tomado de esa manera.

Ahí comprendí que en esta vida, entre más miedo tengas tienes aún más derrotas y pierdes lo que un día es muy valioso para ti, pero hoy delante de todos ustedes - los observó a casa uno sinceramente.

Les prometo que me volveré fuerte, los protegeré con vida si es posible y ustedes igual que yo lo haremos juntos de volvernos fuertes, para protegernos el uno con el otro y no solo a nosotros.

Sino también a nuestros padres y familias que están lejos, que esperan un día volvamos a ellos, es por eso que hoy les pido de todo corazón comprometernos con nuestra nación y espero no defraudarlos de nuevo.

Vamos a recuperar lo que es nuestro, quiero que esté motivamos y comprometidos conmigo, porque vamos a entrenar fuerte para terminar de una vez por todas con esta guerra, están conmigo - grito con firmeza.

Fanxing y Haoxuan se vieron muy orgullosos de su hermano.

Viva el general WangYi - grito emocionado Fanxing.

Viva el imperio Xiao - grito con motivación el castaño.

Todas las tropas gritaban unánimes.

viva el ejército imperial Xiao.

Viva el ejército imperial Xiao.