humiliation. [| NSFW |]

humiliation. -[| 2 |]

Dando embestidas bastantes bruscas, el castaño aferrado a las sábanas y lágrimas a montones cayendo por su cara.

Tomándole de la cadera y provocando que las embestidas sean más profundas, las paredes apretadas y mojadas no solo le tomaba a quackity ser feliz... Si no aprovecharse de tal vez sacar un par de fotos a las expresiones de luzu.

— abre la boca luzu.

Introduciendo sus dedos dentro de la cavidad bocal del castaño, quería hacer que luzu se sintiera en este momento totalmente débil y desesperarlo en busca de terminar todo esto.

— Hmm...

Tomando un impulso de ira mínima mordió los dedos del intruso, y no una mordida leve... Una mordida dolorosa.

Quackity soltando un quejido retiro sus dedos rápidamente y tomando la mandíbula del contrario con fuerza para evitar que se moviera.

— ¡¿CON ESAS ANDAS?!, EH!. ¿Quieres que te trate como zorra? quieres que te trate como eres!, maldita zorra sexy~.

Apegando el cuerpo del castaño más hacia el y la cabeza hacia su hombro, como respuesta recibiendo quejidos agudos y jadeos.

— Dime luzu, dime, gritalo... Grita que eres una maldita zorra roba alcaldías.

Siguiendo con embestidas más fuertes y más profundas, quería más... Pero sabia que no estaba solo para eso... Estaba para humillarlo.

Aun tratando de seguir con sus movimientos y seguirle un poco el juego... Tomó la cámara que estaba dentro de su mesita de noche para acto seguido sacar fotos, pero las fotos era borrosas gracias al castaño que se movía para soltar el agarre del híbrido.

— Joder quédate quieto!...

Los movimientos bruscos de intentar zafarse, ya entendió el por que quería esto... Manchar su imagen; algo que sabia perfectamente no dejaría. De algún modo sabia que pasaría a esto, que estaba avergonzado o con tristeza?... no mucho.

— Se-señor... dijo alcalde luzu, necesita refuerzos?.

esa voz congelo el cuerpo de luzu, era su asistente; — no sa-sabría que decirte en estos momentos... solo espe-. 

— con quien tanto susurras?, hablas solo acaso?.

Mostrando esa peculiar sonrisa burlona y pasando su mano por el cuello del contrario, esa piel de porcelana con un par de... Lindas decoraciones. Dejando en la mesa la cámara que traía en manos siguiendo aun con sus embestidas.