Un Romance Adolescente

Conociendo a alguien.... ¿raro?

Después de eso, llegaba el día lunes, cosa que no le agradaba a Lizz, tenía que volver a soportar a sus compañeros de clase. Al llegar a la escuela, volvieron a hablar mal de ella, así que planeo algo.
Ya era la hora del receso, ella salió y ese día no quería literalmente hacer nada, por lo que solo dio vueltas a la escuela. Iba pasando por los salones de segundo, cuando observo que alguien la estaba viendo, o eso sintió ella. Después de un rato un chico se le acerca - Hola, vengo de parte de mi amigo, te manda esto- dijo mientras le entregaba una carta, después de eso fue a dónde estaba el otro chico, quién la observaba. En ese momento termino el receso, por lo que fue a su aula, agarro la carta y la abrió.

Hola, soy Liam, un chico de segundo grado. Hace tiempo que te observo, me pareces un poco seria, siempre te veo sola en los recesos.
Sabes, eres linda, tengo muchos amigos que se la pasan hablando de ti, si no mal recuerdo te llamas Lizz. Bueno, dejo mi número si deseas hablarme.
+52 ** ** ****

Después de eso Lizz se quedó confundida, pues ¿Quién le mandaría una carta? Y ¿Por qué hablarían más personas de ella?.

Ya en su casa, ella no sabía que hacer, ¿Debía mandarle mensaje?... Después de un rato ella se decidió y le mando un mensaje.

Hola, si soy Lizz, ¿Cómo es que sabes mi nombre?

Después de eso, ella entro en pánico, sentía que solo le querían hacer daño, hasta que le llegó un mensaje, era el chico Liam.

Hola!, Esperaba que no me mandarías mensaje, es un gusto conocerte.
Y si se tu nombre es por qué, muchos amigos hablan de ti, al parecer uno tiene una hermana en tu grupo y ella le dijo algo, después ella te señaló en una charla. Los chicos empezaron a cuestionar muchas cosas.
Yo solo te observaba.

Decían los mensajes, ella se sorprendió, resultó que al final, siempre corrían los chismes por los hermanos y primos especialmente.

Oye, podemos vernos mañana en el receso?

Decía un último mensaje.

Si, en donde?

Respondió Lizz, se pusieron de acuerdo para verse y dejaron de mandar mensajes. Llegó el siguiente día, y comenzaron sus clases de Lizz, ella estaba un poco nerviosa, no sabía exactamente el por qué quería hablar con ella.

Llegó el receso y ella fue a dónde le dijo el chico, espero un rato y saco su teléfono, notó que era un lugar apartado de dónde los profesores no podían observar. Pasaron unos minutos después y llegó Liam. -Hola, perdón por la tardanza, mis amigos no dejaban de preguntarme cosas- decía mientras se sentaba a un lado de Lizz - Si no hay problema, una pregunta...- dijo Lizz mientras pensaba como hacer la pregunta -¿Por qué querías hablarme?- dijo mientras lo observaba - Verás desde ese día que la hermana de uno de mis amigos te señaló, me interesante, ver a una chica que no sea tan, y perdón decirlo así pero que no sea tan "femenina" me llamo mucho la atención y también ver qué no te juntabas con las demás ni con chicos, me impresionó el como te excluyen por algo patético- dijo -Entonces, ¿También sabes por qué me excluyen?- dijo Lizz volteando nuevamente a su celular - Así es- dijo Liam. Platicaron durante un rato, hasta que termino el receso, Lizz se estaba preparando para irse a su aula, cuando Liam le tomo la muñeca para que no se fuera - Toma, es para ti- dijo mientras le daba una caja pequeña - Gracias - dijo Lizz soltandose para irse. En el aula su amiga (la única que tenía) fue con ella - Hola Jean, ¿Qué sucede?- dijo Lizz mientras se sentaba en su butaca - Vi que alguien te dio un regalo, ahora... ¿Quién te lo dio?- dijo mientras se sentaba en la butaca de adelante, Lizz le explicó que un nuevo amigo se la dio, después de explicarle abrió la pequeña caja. - Un.... ¿Un collar?- dijo Lizz, le empezaron a llegar mil preguntas a la mente, hasta que llegó el profesor de historia.
En su casa Lizz decidió mandarle mensaje a Liam.

Hola, disculpa, ¿Por qué el collar?

Mando el mensaje y fue a hacer sus deberes, paso un rato y cuando reviso su celular vio que Liam ya había enviado respuesta.

Pensé que sería un bonito detalle, espero que te guste.
Por cierto, voy a mudarme, por lo que no tendré internet por un tiempo.

Ella le respondió algo rápido pues su madre la llamaba. Pasaron los días tan rápidos para Lizz que el fin de semana llegó muy pronto. Todos la semana se había estado reuniendo con Liam durante los recesos.

Lizz estaba aburrida, ya había terminado su tarea y sus deberes, estaba esperando a que su madre terminara de hacer la comida, por lo que después de un rato su madre le dijo que fuera por unas últimas cosas a la tienda, Lizz accedió y fue a la tienda, en el camino observo como la casa que no tenía dueños se llenaba de muebles y de personas, se distrajo mucho con la imagen de la mudanza, cosa que provocó que chocará con alguien - Lo siento- dijo ella, para después voltear a ver contra quién chocó, para su sorpresa era... -¿Liam?- dijo ella, después de eso Liam la miro - Hola Lizz, parece que vives por acá- decía mientras bajaba la mirada para ver lo que se le calló - Lo lamento- dijo Lizz mientras se agachaba para recoger las cosas - No te preocupes Lizz - dijo Liam, quién le ayudo con las últimas cosas.... - ¡Hola hermanito!- dijo alguien quien le ayudo a levantarse a los dos chicos - parece que nos volvemos a encontrar- dijo mientras veía a Lizz - ah? Tu eres Ian, ¿Cierto?- dijo Lizz - Espera, entonces ustedes ya se conocen, genial- dijo Liam.
- Bueno yo ya me tengo que ir, adiós- dijo Lizz mientras se marchaba, ya que se le estaba haciendo tarde. En cuanto llego a su casa su madre la cuestionó del por qué se había tardado, cosa a lo que Lizz respondió con la verdad. Después de comer Lizz salió y para su sorpresa Liam se encontraba afuera de su casa - Hola Liam, ¿Qué haces?- dijo Lizz para iniciar una conversación - Pues, iba a ir a buscar tu casa- dijo Liam mientras le mostraba una tierna sonrisa, después de eso fueron al parque y comenzaron a platicar, hasta que su teléfono de Lizz sonó, indicando que ya se tenía que ir.

Pasaron los días, Lizz y Liam se seguían viendo después de la escuela y en la escuela. Un día durante el receso, estaban peleando por una paleta... - ¡Vamos Linda!- dijo Liam mientras intentaba quitarle la paleta - ¿Cómo me dijiste?- dijo Lizz mientras bajaba la mano en la que tenía la paleta - ahh... es un apodo que quise ponerte, me parece lindo- dijo mientras se encogía de hombros - Claro que sí no te gusta no lo digo- decía mientras se sentaba en una jardinera cercana - No te preocupes, me gusta el apodo- dijo Lizz dándole una sonrisa tierna. Desde ese día Liam de decía Linda, era algo que a Lizz le causaba mariposas en el estómago pero después se acostumbró al apodo. Un día Lizz fue a ver a Liam a su casa, a la hora de tocar quien abrió la puerta era su hermano mayor: Ian. -Hola Lizz- dijo Ian, Lizz le pregunto por Liam, a lo que respondió que se estaba dando una ducha, después de responder le dijo a Lizz si quería pasar a esperar a Liam, ella accedió. Después de un rato Liam salía de la ducha ya cambiado, mientras se secaba el pelo con su toalla - Oye Ian, ¿Sabes si Lizz vino?- decía mientras dejaba la toalla en una silla, el lo de había dado cuenta que Lizz estaba allí, pues ni siquiera había volteado a ver, estaba observando si celular, viendo si tenía mensajes de Lizz - Si ella vino, de hecho está aquí- dijo mientras señalaba a Lizz, el se sorprendió y fue a saludarla, pidió permiso para salir y salió con Lizz al parque.